Esta es la utilidad de la línea roja de la pantalla de los coches

Esta guía visual no solo ayuda a evitar golpes, sino que permite aprovechar al máximo el espacio de estacionamiento.

Guardar
Cámara de aparcamiento (Wikipedia)
Cámara de aparcamiento (Wikipedia)

Aparcar puede ser una de las maniobras más delicadas y estresantes al volante, especialmente en ciudades donde el espacio escasea. Por eso, cada vez más coches cuentan con cámaras traseras que proyectan en la pantalla del salpicadero la imagen de lo que hay detrás del vehículo. Lo que muchos conductores no saben es que las líneas que aparecen sobre esa imagen (verde, amarilla y roja) no están ahí por simple decoración. En particular, la línea roja tiene una función muy específica y útil que va más allá de señalar el límite de seguridad para evitar un golpe.

¿Para qué sirve la línea roja?

Esta línea roja no solo indica la distancia mínima antes de chocar contra un obstáculo, sino que también marca el punto exacto hasta el cual puede acercarse el vehículo sin impedir que se abra correctamente el maletero. En otras palabras, si se aparca justo con esa línea roja tocando el bordillo, una pared o cualquier objeto, se garantiza que el portón trasero podrá abrirse sin inconvenientes. Esta utilidad práctica se ha convertido en una referencia visual clave para conductores que necesitan aprovechar cada centímetro al aparcar, especialmente en zonas estrechas o garajes pequeños.

Novedades tecnológicas en los coches

Este tipo de herramientas forma parte del equipamiento tecnológico cada vez más avanzado de los vehículos modernos. Además de las cámaras traseras, muchos modelos actuales incluyen sistemas de visión 360º, asistentes de aparcamiento automatizados, detectores de ángulo muerto, sensores de tráfico cruzado al salir marcha atrás, control de crucero adaptativo y frenado de emergencia. Estas incorporaciones no solo hacen la conducción más cómoda, sino también mucho más segura.

Coche con tecnología "handout" (Daimler
Coche con tecnología "handout" (Daimler AG/dpa)

Marcas como Toyota, Volkswagen o Hyundai han incorporado sistemas completos de asistencia a la conducción que combinan cámaras, radares y sensores para anticiparse a situaciones de riesgo. Programas como el Toyota Safety Sense detectan peatones y ciclistas, alertan sobre cambios de carril involuntarios y adaptan la velocidad del vehículo según la distancia con el coche de delante. Todo esto con el objetivo de reducir la siniestralidad vial y facilitar la conducción diaria, especialmente en entornos urbanos complejos.

Además de las mejoras en seguridad, los nuevos modelos también incorporan funcionalidades de entretenimiento y conectividad. Entre las curiosidades más recientes se encuentran proyectores portátiles que permiten transformar cualquier superficie en una pantalla improvisada, ideales para actividades al aire libre. Otros elementos como los sistemas de alerta por cansancio, los retrovisores digitales o las luces de emergencia V16 (que serán obligatorias a partir de 2026) también muestran cómo la tecnología está cambiando por completo nuestra relación con el automóvil.

Coche equipado con los sistemas
Coche equipado con los sistemas ADAS (AECA-ITV)

Funciones del coche que quizás no conocías

Los coches modernos incorporan cada vez más tecnología, y muchas de sus funciones pasan desapercibidas para los conductores. Por ejemplo, algunos modelos incluyen un “modo valet” que restringe el acceso a ciertos elementos del coche (como el maletero o la guantera) cuando lo conduce otra persona. También es habitual el sistema de memoria de conductor, que ajusta automáticamente el asiento, los retrovisores y la climatización según la llave usada.

En el ámbito de la seguridad, algunos vehículos detectan si se aproxima un ciclista u otro vehículo cuando se va a abrir la puerta, para evitar accidentes. Además, los coches más modernos incorporan sensores de humedad que activan el desempañador de forma automática, o incluso sistemas de control gestual que permiten cambiar de canción o subir el volumen sin tocar la pantalla.