Derriban la pared de un restaurante y encuentran un “tesoro” de la Segunda Guerra Mundial: “La historia está ahí, esperando a ser contada”

El contenido estaba compuesto por cartas amarillentas, cuadernos, manuscritos, facturas y recortes de prensa local de principios del siglo XX

Guardar
Derriban un muro de un
Derriban un muro de un restaurante y descubren un tesoro de la Segunda Guerra Mundial. (Imagen Composición Infobae)

“Las cinco habitaciones que se están preparando tendrán cada una la temática de un periodo histórico que me gusta”, declara Pierre-Alain Delaby, chef y copropietario del restaurante La Léontine, después de un descubrimiento inesperado durante las reformas de su establecimiento en la ciudad francesa de Abbeville (norte de Francia).

Los obreros que estaban trabajando en la renovación de las suites del restaurante derribaron una pared y se encontraron con un paquete meticulosamente envuelto, etiquetado como “Documentos importantes”. “¡Chef, tesoro, tesoro!”, irrumpieron los trabajadores en el despecho de Delaby, según contó al medio Franceinfo.

El contenido estaba compuesto por cartas amarillentas, cuadernos, manuscritos, facturas y recortes de prensa local de principios del siglo XX. “Cada página cuenta una historia: la de los antiguos habitantes, su vida cotidiana, sus intercambios”, explicó Delaby.

En conjunto, se puede reconstruir parte de la historia local entre los siglos XIX y XX, y revela que La Léontine no ha sido solo un restaurante, sino “un discreto testigo de la vida de la ciudad y sus habitantes”.

Marcado por la historia

Entre los documentos más importantes figuran los planos originales del edificio, levantado en 1898 por la familia Lennel de Farelle, empresarios textiles. Con el tiempo, el inmueble pasó a manos del abogado Firmin, conocido en la región por su participación en la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial.

También se encontraron planos del primer hotel de la familia, ubicado en la intersección de la calle Millevoye y el bulevar Vauban, además de correspondencia y archivos administrativos del personal que trabajó en el lugar.

Pero fue la aparición de documentos relacionados con la ocupación nazi lo que dio al hallazgo una dimensión histórica aún mayor. “Es bien sabido que los oficiales alemanes ocuparon las casas más hermosas de la ciudad, así que no es de extrañar que también vinieran aquí”, señaló el chef.

Entre los materiales había notas de la Wehrmacht, estimaciones y documentos oficiales emitidos por las fuerzas armadas del Tercer Reich entre los años 30 y 40.

Documentos encontrados en el restaurante.
Documentos encontrados en el restaurante. (Imagen: Facebook)

Conservación, traducción y un segundo restaurante

Delaby su esposa Noémy, coadministrativa del local, han tomado medidas para proteger los documentos. Los textos más delicados están siendo revisados con herramientas de traducción digital y, en paralelo, el chef prevé reunirse con el departamento de patrimonio de Abbeville.

La historia está ahí, esperando a ser contada, pero primero debemos asegurarnos de que los documentos se conserven adecuadamente”, afirmó Delaby. Así, el chef ha decidido que las nuevas suites estarán inspiradas en distintos periodos históricos, como homenaje al legado descubierto tras el muro.

La gastronomía y la memoria se unirán así en la experiencia que el restaurante quiere ofrecer a sus próximos huéspedes, aunque como primer objetivo, el restaurante se centra en completar las reformas y en abrir su segundo local en Saint-Valéry.

El chef Alex de la Fuente nos habla de In-Pulso, y sus famosas rosquillas de San Isidro, de cara a la celebración madrileña. También nos habla de su reinterpretación de la cocina madrileña y de la historia de nuestra gastronomía.

El edificio de La Léontine ha sido escenario de múltiples usos: residencia burguesa, refugio durante la guerra y ahora restaurante gourmet. Desde diciembre, los clientes han podido visitar su salón principal, con molduras originales y suelo de madera maciza, y sentarse a la mesa en un entorno que combina tierra y mar. Con el hallazgo, la historia del lugar suma un nuevo capítulo.