Una española viviendo en Finlandia explica las diferencias de ir a la playa: “Me llevo un edredón, las esterillas ni existen”

Anna (@anna.matea), española con 13.400 seguidores en TikTok, madre de dos hijos y casada con un finlandés, narra con humor cómo su realidad ha cambiado con la vida en el país nórdico

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Una española explica la diferencia
Una española explica la diferencia de ir a la playa en Finlandia respecto a España. (@anna.matea/ Canva)

Mientras en España el verano trae días calurosos y playas llenas, en Finlandia la experiencia playera queda marcada por el clima ártico y costumbres imposibles de encontrar en la Península ibérica. Anna (@anna.matea), española con 13.400 seguidores en TikTok, madre de dos hijos y casada con un finlandés, narra con humor cómo su realidad ha cambiado con la vida en el norte. “15 grados el 2 de julio es para mí plena ola de frío. Pero oye, el marido nórdico y los niños se empeñan en ir a la playa porque es verano”, ha contado en uno de sus videos.

Para quienes provienen de España, preparar la bolsa de playa en un país nórdico conlleva una adaptación drástica. Anna, que se autodenomina “anti influencer”, describe con humor el contraste entre ambas culturas al hablar de lo que lleva. La diferencia no es solo térmica: la tradición, los hábitos familiares y el propio equipamiento revelan dos mundos separados por más que kilómetros.

Edredón en vez de esterilla: cómo se adapta una familia española

En su experiencia, Anna ha resumido uno de los cambios más llamativos al afirmar: “Por ejemplo, en España nunca me llevaría a la playa un edredón, me llevaría una esterilla, pero aquí las esterillas ni existen ni se las esperan”. Al llegar, ha intentado encajar recurriendo a lo conocido: “Yo al principio me llevaba la típica manta de pícnic que enrollas, pero me di cuenta de que la mayoría de gente, por lo menos a la playa a la que yo voy, llevan este tipo de colchas o edredones”. Adaptarse ha significado hacer lo mismo que los locales: llevar una gruesa colcha para abrigarse sobre la arena.

Playa de Las Canteras de
Playa de Las Canteras de Las Palmas de Gran Canaria. (Europa Press)

El contenido de la bolsa ha reflejado una lógica diferente respecto a la playa española: “También me llevo cuatro toallas, las gafas de bucear de mis hijos en esta bolsa que es impermeable. Llevo ahora la ropa interior seca y después meteremos los bañadores mojados”. El frío obliga a prever cada detalle y Anna lo asume con naturalidad: “En esta bolsa llevamos el champú y el gel de ducha para ducharnos después de la playa porque en los vestuarios hay ducha”.

Organización, comida y juguetes

La organización también llega a la comida, que se adapta a las posibilidades de cada jornada: “Según el día llevo tuppers con comida ya preparada o algunos días llevamos comida para cocinar en la playa, en la barbacoa que hay". El equipamiento varía, pero hay un detalle común: los niños siempre llevan algunos objetos para el agua. “Y ya por último, los típicos churros que utilizan los niños para bañarse”. Pero nada de palas, cubos o rastrillos para jugar en la arena.

La primera ola de calor del verano que ha empezado este sábado dejará a 35 provincias con avisos por altas temperaturas, 18 de ellos en nivel naranja, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Diferentes personas, en las playas de València, han tildado de "insoportable" esta época del año, que ha comenzado antes que antaño, a su juicio.

Para Anna, la cultura finlandesa marca otra gran diferencia: la ausencia de juguetes. “No nos llevamos porque en las playas normalmente hay juguetes que son para todos. Son de la playa, pero son para todos los niños, así que ya estaría”. Ella misma resume la distancia entre las costumbres de ambos países: “La idea de ir a la playa en Finlandia es muy diferente a la de ir a la playa en España. Pero bueno, todo es acostumbrarse”.