La primera reunión entre el PSOE y Sumar con Santos Cerdán en la cárcel termina en fracaso: “No son conscientes de la gravedad de la situación”

Representantes de ambos partidos se han sentado en el Congreso de los Diputados para tratar de coser la alianza, pero no ha habido entendimiento

Guardar
Ernest Urtasun, portavoz de Sumar
Ernest Urtasun, portavoz de Sumar y ministro de Cultura. (Alejandro Martínez Vélez/Europa Press)

Ernest Urtasun, portavoz de Sumar, ha puesto voz al sentir del partido tras la reunión mantenida este miércoles con el PSOE en el Congreso de los Diputados a fin de tratar de calmar las aguas tras el ingreso en prisión de Santos Cerdán, ex número 2 de Pedro Sánchez en Ferraz. Pero lo cierto es que la formación de Yolanda Díaz dice salir insatisfecha y preocupada. Los socialistas, según Urtasun, “no son conscientes de la gravedad de la situación”, por lo que no ha habido avances. Todo mientras la UCO prepara nuevos informes que pueden tensar aún más la relación.

El también ministro de Cultura ha concretado que Sumar ha puesto sobre la mesa una ”batería de propuestas" que permitiría al ejecutivo, según él, llegar con vida a 2027, pero esto exige que el PSOE actúe, recupere la iniciativa política: “El mayor riesgo que tenemos de que legislatura embarranque se llama inmovilismo y maquillaje”, ha verbalizado Urtasun.

Yolanda Díaz tilda de "vergüenza" la entrada en prisión de Santos Cerdán e insta a Pedro Sánchez a actuar.

La reunión ha durado algo más de dos horas y no ha contado con los dos líderes, ni Sánchez ni Díaz. Por el primero han acudido la vicepresidenta primera, María Jesús Montero; el ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños; y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales, Rafael Simancas. Por la segunda, además de Urtasun, han estado el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, de Más Madrid; y los diputados Enrique Santiago (IU), Candela López (comunes) y Jorge Pueyo (Chunta Aragonesista).

Equilibrismo de Sumar

Difícil ejercicio de equilibrismo el de Sumar, sostén del Gobierno pero muy crítico y contundente contra su aliado desde el día que vieron la luz los demoledores y clarificadores informes de la UCO con las transcripciones de los audios entre Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García. Los dos primeros son los dos últimos secretarios de Organización del PSOE, de la máxima confianza de Sánchez. Uno de ellos pasa este miércoles su tercer día entre rejas. El juez le señala como presunto encargado de “percibir las mordidas” y “el botín” y temía que pudiera destruir pruebas.

Por ahora no se le ha caído ningún socio al PSOE, si bien teme que esto no haya terminado aquí. Sus habituales apoyos prefieren a Sánchez antes que a PP y Vox, pero la cuerda está muy tensa. Sumar exhibe enfado, pero no se contempla como el principal candidato a tumbar la legislatura, una vez Sánchez ha proclamado que sigue. Nacionalistas e independentistas tienen más papeletas, si bien hasta la fecha se muestran cautos. Solo Junts, a fin de provocar al PP, ha invitado a Alberto Núñez Feijóo a sentarse con Carles Puigdemont para negociar una moción de censura.

Santos Cerdán y Carles Puigdemont
Santos Cerdán y Carles Puigdemont en la negociación de la investidura. (EFE/PSOE)

Pero el PP no pica. Ester Muñoz, quien será nueva portavoz del partido en el Congreso -y Miguel Tellado, secretario general, tomando el relevo de Cuca Gamarra-, ha recordado que la última persona que se vio con Puigdemont en Waterloo ha acabado en Soto del Real, refiriéndose a Cerdán.

“Le hemos señalado el camino y ahora la pelota está en el tejado del PSOE”, ha zanjado Urtasun, quien no ha avanzado qué ocurriría en caso de que no pase nada. Los de Yolanda Díaz, en una pugna con Podemos por la supremacía de la izquierda a la izquierda del PSOE, tiene un papel complicado frente a los de Ione Belarra, que están fuera de las instituciones y tienen poco que perder.