Estos son los coches de segunda mano imposibles de vender: “Nos negamos a aceptarlos de vuelta”

Un problema técnico común ha provocado que el sector de compraventa genere más desconfianza

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Concesionario de coches de segunda
Concesionario de coches de segunda mano. (Europa Press)

El mercado de vehículos de segunda mano en Europa se enfrenta actualmente a una crisis que afecta concretamente a ciertos modelos del grupo Stellantis. El protagonista de esta situación es el motor 1.2 PureTech, un bloque de tres cilindros turboalimentado que, tras años de ser valorado por su rendimiento y eficiencia, ha perdido la confianza de compradores y profesionales debido a un defecto grave que afecta directamente a su fiabilidad, según el medio especializado Les Activateurs.

Entre 2014 y 2020, el motor 1.2 PureTech fue montado en varios modelos de marcas como Peugeot, Citroën, DS y Opel. Sin embargo, hoy esos mismos vehículos sufren una depreciación cada vez más acelerada. Según un análisis del medio especializado francés mencionado anteriormente, un Peugeot 208 del año 2015 con motor PureTech de 82 CV ha perdido hasta el 61% de su valor en el mercado de ocasión, en comparación con un Volkswagen Polo equivalente, cuya depreciación es de solo un 48%.

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La situación es aún más dramática en otros modelos como el Citroën C3, que sufre una pérdida de valor del 65%, mientras que modelos más recientes, como el Opel Corsa 2020, ya registran una depreciación del 31%, frente al 20% de su rival alemán.

Un fallo mecánico que arruina el motor

El motivo detrás de esta caída es un problema mecánico en la correa de distribución que está en contacto con el aceite y sufre un desgaste prematuro. Este defecto puede llevar a la destrucción completa del motor si no se detecta a tiempo. Las informaciones publicadas por Les Activateurs destacan que este problema ha sido documentado por mecánicos y afectados desde hace años, y aunque Stellantis ha intentado corregirlo mediante campañas de retirada y cambios en los protocolos de mantenimiento, el daño sigue ahí, sobre todo el relacionado con la reputación de la marca.

Los testimonios de propietarios que han sufrido estas averías se han multiplicado en foros y redes sociales, alimentando la desconfianza. Como resultado, muchos talleres y concesionarios se niegan a aceptar vehículos con este motor. “No retiramos ningún modelo PureTech, salvo que tenga garantía vigente. El riesgo es demasiado alto”, declara Yoni Dayan, director de la red de concesionarios Simplicicar. Esta postura es compartida por gran parte del sector de compraventa.

Dos mecánicos arreglan un coche
Dos mecánicos arreglan un coche en un taller (Canva)

Medidas urgentes de Stellantis

En un intento por recuperar la confianza del público, Stellantis ha lanzado varias iniciativas desde su sección de vehículos de segunda mano, Spoticar. Según informa Les Activateurs, estas medidas incluyen garantías ampliadas de hasta 175.000 km para modelos PureTech, cobertura extendida a 8 años o 160.000 km para unidades más recientes, bonificaciones de hasta 700 euros en caso de renovación de los vehículos y nuevos protocolos de mantenimiento para prevenir averías.

Algunos compradores ven esta situación como una oportunidad para adquirir coches de gama media a precios muy asequibles. Además, los expertos recomiendan extremar precauciones, revisar el historial completo de mantenimiento, optar por vehículos que estén bajo garantía, realizar cambios de aceite más frecuentes y controlar periódicamente el estado de la correa de distribución.