De la playa al despido: así puede afectar un viaje durante la baja médica a tu subsidio y tu puesto de trabajo

La ley admite que los trabajadores de baja médica se trasladen del domicilio, pero hacerlo sin cumplir con las obligaciones puede conllevar consecuencias graves

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Así puede afectar un viaje
Así puede afectar un viaje durante la baja médica a tu subsidio y tu puesto de trabajo. (Montaje Infobae España/Pexels)

La normativa española permite que un empleado en situación de incapacidad temporal por baja laboral se desplace y resida fuera de su domicilio habitual. Sin embargo, las posibles consecuencias de un viaje durante este periodo pueden ser muy graves. Entre ellas, están la cancelación del subsidio por parte de la Seguridad Social y un despido disciplinario. Existen requisitos y limitaciones concretas que los trabajadores deben conocer antes de tomar una decisión al respecto, especialmente durante la temporada de verano, cuando muchos planean sus viajes en vacaciones.

Y es que el ordenamiento jurídico vigente no prohíbe a un trabajador salir de vacaciones durante una baja médica, siempre que la actividad no perjudique el proceso de recuperación. Según el artículo 175 de la Ley General de la Seguridad Social, recogido por COPE, el subsidio por incapacidad temporal puede quedar suspendido o anulado si el empleado no cumple con las obligaciones asociadas al tratamiento o actúa de forma fraudulenta, lo que la empresa puede interpretar fácilmente como un motivo de peso para el despido procedente y sin indemnización.

La importancia de cumplir con las obligaciones médicas

Las autoridades distinguen entre desplazarse fuera del domicilio mientras se respeta el proceso de curación, y realizar actividades que obstaculicen la recuperación. Por ejemplo, una persona de baja por una lesión muscular que decida practicar deporte o realizar esfuerzos en la playa podría estar incurriendo en una infracción grave.

Además de la necesidad de no realizar actividades contraproducentes, otra infracción directa ocurre cuando el trabajador se va de viaje y, como consecuencia de ese desplazamiento, falta a las citas programadas por el Instituto de la Seguridad Social (INSS) o por la mutua de la empresa. Basta con una denuncia o un informe de la mutua para que se active un expediente sancionador. Ante esto, existe la posibilidad de solicitar con antelación una autorización médica que ampare cualquier desplazamiento de este tipo.

Desde la perspectiva legal, los regímenes de la Seguridad Social bajo los que puede estar inscrito un empleado (régimen general, de autónomos o de empleados del hogar) permiten el desplazamiento temporal, aunque cada uno contempla condiciones específicas para el control del tratamiento, la notificación de viajes y la supervisión de la actividad del trabajador mientras dura la baja.

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Casos excepcionales y recomendaciones para los trabajadores

No obstante, no todas las situaciones son iguales. Existe flexibilidad en los casos de enfermedades psicológicas, donde los médicos pueden recomendar cambios temporales de ambiente o periodos de descanso fuera de la residencia habitual como parte de la terapia.

En esas circunstancias, y siempre que el trabajador continúe cumpliendo con el seguimiento médico y con las citas, los tribunales suelen fallar en favor de la legalidad del desplazamiento y desestiman los despidos cuando no existe evidencia de negligencia ni de perjuicio para la recuperación por parte del afectado. También existen precedentes legales en los que se ha restituido el puesto de trabajo a empleados despedidos tras haber viajado durante su baja, siempre que no se demostrara mala fe o perjuicio para su salud.