
Catherine creció en Estados Unidos, alimentando su imaginación con películas románticas y libros sobre Italia. Aunque había escuchado sobre la belleza de la Fontana di Trevi, la realidad superó cualquier expectativa. Acompañada por su madre, Mary Lee, una contadora de aerolíneas jubilada, Catherine se preparó para arrojar tres monedas a la fuente, siguiendo la tradición romana de pedir deseos. Mary Lee, agradecida por el viaje que su hija le había regalado, la animó a pedir un deseo especial: “Creo que es hora de que conozcas a alguien especial. Pide un deseo”. Mientras Catherine lanzaba las monedas con la mano derecha, una voz desconocida la interrumpió. Al darse la vuelta, se encontró con Fausto Mezzana, un romano que trabajaba para una aerolínea italiana y que esa noche había salido a pasear . Fausto explicó el significado de cada moneda: “La primera moneda, volverás a Roma. La segunda moneda, encontrarás tu amor en Roma y la tercera moneda… te casarás con un romano”.
La conexión entre Catherine y Fausto fue inmediata. Lo cuentan en un reportaje para la CNN. Ambos venían de relaciones pasadas complicadas y, aunque disfrutaban de sus vidas independientes, sentían que algo faltaba. Mary Lee y Fausto, ambos con experiencia en la industria de la aviación, entablaron una conversación animada sobre viajes y aeropuertos. Mientras tanto, Fausto y Catherine intercambiaron miradas y risas, sintiendo una atracción que describieron como “colpo di fulmine”, el amor a primera vista en italiano. Catherine pensó: “Oh, Dios mío, esta fuente hace magia”. Fausto, por su parte, sintió que la noche tenía algo especial y que Catherine era “un regalo del cielo”.
Esa misma noche, Fausto propuso a Catherine y a su madre un recorrido nocturno por Roma. Aunque Catherine dudó al principio, su madre confió en el instinto y aceptó la invitación. Durante el paseo, les enseñó los lugares más emblemáticos de la ciudad, desde el Coliseo hasta su bar de jazz favorito. La atención que Fausto prestó a Mary Lee y las historias sobre su vida en Roma cautivaron a Catherine.
Cuando Mary Lee se retiró al hotel, Catherine y Fausto continuaron la velada, saltando de bar en bar, conversando y riendo hasta el amanecer. Fausto tocó el piano para Catherine, quien también es música y toca la trompeta. Descubrieron afinidades en la música, el arte y la cultura. “Fue una noche mágica”, recuerda Fausto. Al día siguiente, Fausto invitó a cenar a Catherine y a su madre. Mary Lee, percibiendo la conexión entre ambos, les dio espacio para que se conocieran mejor.
Dos personas destinadas a separarse
Antes de regresar a Estados Unidos, Catherine entregó a Fausto su tarjetan. El viaje de vuelta a California estuvo marcado por la tristeza y la incertidumbre. Sin embargo, pocos días después, Fausto se puso en contacto con ella y le envió un boleto de avión para que regresara a Roma durante cuatro días. Catherine, decidida a no dejar pasar la oportunidad, negoció días libres en su trabajo, a pesar de la advertencia de su jefe sobre el riesgo de perder el empleo. “Si no voy, siempre me arrepentiré”, confesó a su gerente.
Durante esa segunda visita, Catherine y Fausto confirmaron la autenticidad de su conexión. Se comprometieron a mantener una relación a larga distancia, viajando mensualmente entre Roma y California. El trabajo de Fausto en la aerolínea facilitó los desplazamientos, pero el primer año resultó difícil por las constantes despedidas. Para suavizar el dolor, dejaron de decir “adiós” y adoptaron la frase: “Iré a la izquierda” y “Voy a la derecha”.
A Roma pasando por Lóndres
Un año después, Catherine, durante una conferencia laboral, se enteró de una vacante en Londres. Consideró que mudarse al Reino Unido sería un paso intermedio antes de instalarse en Italia. Catherine se mudó a Reino Unido el 10 de agosto del 2000. Los viajes a Roma se volvieron más sencillos y frecuentes. Por cuestiones de cuarentena animal, sus gatos se quedaron en Roma con Fausto, quien los cuidó con esmero. La pareja comenzó a planear un futuro juntos, aunque la posibilidad de tener hijos se desvaneció con el tiempo. “Si llegan, fenomenal, y si no, no pasa nada. Llevamos una vida estupenda”, reflexionó Catherine.
Durante una visita a Londres, Fausto propuso a Catherine mudarse a Roma de forma permanente. La adaptación a la vida en Italia supuso retos, especialmente por el idioma. La pareja implementó un sistema alternando meses en italiano y en inglés, lo que permitió a Catherine ganar confianza. La familia y amigos de Fausto la recibieron con calidez, facilitando la integración. Para Fausto, la convivencia representó una novedad, así como la fusión de dos culturas y tradiciones distintas. A pesar de las diferencias, la relación se fortaleció.
En septiembre de 2004, Catherine y Fausto se casaron en Vitorchiano, un pueblo medieval en Viterbo. La ceremonia tuvo lugar en una iglesia del siglo XIV y la recepción en un antiguo convento convertido en hotel. La familia de Catherine viajó desde Estados Unidos para acompañarla, consolidando los lazos entre ambas familias. Mary Lee, la madre de Catherine, mantuvo una relación cercana con Fausto, visitando Italia con frecuencia, mientras que la pareja también viajaba a California.
Hoy, más de 25 años después de aquel encuentro en la Fontana di Trevi, Catherine y Fausto siguen viviendo juntos en Roma. Aunque no tuvieron hijos, ambos consideran que su relación se benefició de haberse conocido en una etapa madura de sus vidas. Fausto afirma: “A veces la vida tiene un destino, si nos hubiésemos conocido a los 25 o 30 años, creo que no estaríamos aquí hoy”. Catherine coincide: “Quizás no, creo que teníamos que llegar a un punto en el que sabíamos exactamente lo que queríamos”.
Últimas Noticias
Casi millonarios: miles de noruegos creen haber ganado una fortuna en la lotería, pero todo formaba parte de un error
Algunas de las personas afectadas llegaron incluso a hacer planes con el dinero: iban a irse de vacaciones, reformar su vivienda o comprarse un piso

Un bombero acude a trabajar con su bebé porque su jefe no le dio otra opción: “Me dijo que me buscara la vida”
El trabajador realizó una jornada de 00:00 y las 07:00 y a las 16:00 de ese mismo día tuvo que volver para suplir una baja

Un hombre muere por beber siempre del mismo termo: la enguajaba todos los días, pero el plomo acumulado le causó una neumonía
La víctima comenzó a experimentar problemas de salud hace aproximadamente un año, pero la intervención fue “demasiado tarde”

Un TikToker dona a la Cruz Roja unas zapatillas con un AirTag oculto, las encuentra a 800 km en una tienda de segunda mano en Bosnia y las compra de nuevo por 10 euros
El creador de contenido ha seguido el recorrido de la donación durante cinco días y ha podido ver cómo viajaba desde Múnich hasta Austria, Eslovenia, Croacia y Bosnia

Viviendas evacuadas y una urbanización confinada por incendio en Villa del Prado, en Madrid
El fuego se declaró sobre las 22:30 horas del domingo
