Ikram, la perra que llegó en patera a Ibiza y que PACMA pide liberar del sacrificio: “Existen alternativas seguras y éticas”

La perra, de apenas dos meses, no está vacuna contra la rabia, lo que pone en riesgo su vida al proceder de un país fuera de la Unión Europea

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Ikram, la perra que llegó
Ikram, la perra que llegó en patera. (Imagen: Ayuntamiento de Ibiza)

El pasado 19 de junio, una patera fue interceptada por Salvamento Marítimo a pocas millas de la costa de Formentera. A bordo viajaban 19 personas, entre ellas un menor y su perro, Ikram, una cachorra de apenas dos meses.

El animal fue rescatado junto a su dueño y, aunque estaba acompañada de su cartilla veterinaria, la normativa española sobre vacunación antirrábica ha puesto en peligro su futuro.

Un vacío legal que pone en riesgo su vida

Aunque Ikram había recibido varias vacunas hasta el día de su rescate, aún no cumplía con los tres meses requeridos para recibir la vacuna contra la rabia. Esto generó un vacío legal que podrá llevar a su sacrificio, como establece la normativa vigente para animales procedentes de países fuera de la Unión Europea.

No obstante, el Ayuntamiento de Ibiza, tras la intervención del centro veterinario San Jorge, propuso una alternativa: que Ikram permanezca en cuarentena en el Centro de Protección Animal de Sa Coma hasta que cumpla los tres meses y puede ser vacunada.

Sin embargo, la decisión final depende del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, cuyo director general, Valentín Almansa, ha recibido una solicitud formal de PACMA (Partido Animalista con el Medio Ambiente).

Una solución ética

PACMA ha sido uno de los principales impulsores de la campaña para salvar a Ikram. En un comunicado, la organización manifestó que no debe optar el sacrificio de un animal aparentemente sano. “El sacrificio de un animal aparentemente sano no puede ser la respuesta que demos como sociedad en pleno siglo XXI”, declaró el partido.

Así, el Partido Animalista aboga por una solución ética y segura, como el establecimiento de una cuarentena controlada con seguimiento veterinario y pruebas diagnósticas.

Del mismo modo, la organización ha recordado el caso de Res, un perro rescatado de Marruecos que logró salvar su vida gracias a la presión ciudadana y el compromiso institucional. “Existen alternativas seguras y éticas, tal como se hizo en el caso de Res”, reiteró PACMA, pidiendo que Ikram sea tratada de la misma manera.

La presión social de ciudadanos
La presión social de ciudadanos y protectoras pueden salvar la vida de Ikram. (Imagen: X)

Un símbolo de humanidad

La historia de Ikram corrió como la pólvora por las redes sociales. Decenas de familias ya se han ofrecido a adoptarla, y varias protectoras han expresado su disposición a intervenir para salvarla.

Por su parte, el concejal de Bienestar Animal de Ibiza, Manuel Jiménez, también ha mostrado su apoyo al caso, subrayando que el objetivo es permitir que la perra pueda ser adoptada por una familia residente en la isla.

La presión continúa

Con cada día que pasa, la presión sobre el Ministerio de Agricultura aumenta. La petición de PACMA sigue siendo clara, a las que se suma las voces de varias personas y grupos que se juntan para pedir la salvación de Ikram.

El sacrificio no es la solución, la vida de Ikram debe prevalecer”, concluyó PACMA. Mientras tanto, las autoridades locales y organizaciones protectoras continúan trabajando en una solución que permita a la cachorra tener una segunda oportunidad.

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La importancia de la vacuna contra la rabia

La normativa exige la vacunación antirrábica para todos los perros, especialmente aquellos procedentes de países con rabia endémica.

A pesar de que España es considerada libre de rabia desde 1978, la vacunación sigue siendo prioritaria para proteger la salud pública, especialmente después de los casos detectados en Valencia, donde un hombre murió después de un viaje a Etiopía, y Melilla, donde un pastor belga mallinois fue diagnosticado con rabia, siendo el primer perro detectado de 2025 con esta enfermedad.