Una empresa alemana inventa un airbag para los pies: “Las piernas pueden moverse de manera descontrolada durante el impacto”

La evolución de la seguridad en los automóviles ha sido constante desde la introducción de los primeros cinturones de seguridad y airbags frontales. Estos dos dispositivos se ha consolidado como uno de los elementos esenciales en la protección de los ocupantes de vehículos modernos, desplegándose en apenas tres milisegundos y alcanzando velocidades de hasta 300 km/h para amortiguar el impacto durante una colisión

Con el paso de los años, los vehículos han incorporado airbags laterales, de cortina y, más recientemente, airbags para las rodillas. Sin embargo, los pies y los tobillos han permanecido como zonas vulnerables, expuestas a lesiones graves en caso de colisión. Durante un impacto, los pies pueden golpear el suelo, los pedales o torcerse, lo que puede provocar fracturas o daños en los músculos y huesos. Los sistemas actuales, aunque efectivos para proteger la cabeza, el torso y en ocasiones las rodillas, no ofrecen una defensa específica para la parte inferior de las piernas.

En este sentido, la empresa alemana ZF Lifetec ha presentado un avance en la seguridad automovilística con la creación de un airbag para los pies, diseñado para proteger a los ocupantes de lesiones en los talones y tobillos durante accidentes de tráfico. El lanzamiento de este innovador airbag está previsto para el año 2028, y promete transformar la manera en que los fabricantes abordan la protección de los ocupantes en el habitáculo.

El airbag para los pies se instala bajo la alfombra del suelo del vehículo, en la zona de los pedales, y se despliega en situaciones de riesgo para crear un punto de apoyo estable a nivel de los talones. Este ‘cojín’ protector envuelve los pies tanto del conductor como del acompañante delantero, con el objetivo de prevenir torceduras en los tobillos y reducir el riesgo de que los pies queden atrapados en los pedales, especialmente en el caso del freno.

Funcionamiento del airbag

La innovación radica en que el sistema no se activa de manera sistemática ante cualquier choque, sino que utiliza sensores para determinar cuándo la posición de las piernas representa un peligro. El funcionamiento del airbag para los pies se basa en la detección de la postura de los ocupantes. Si los asientos están retrasados y los pies no tocan el suelo, el sistema se activa para estabilizar los talones.

De este modo, la fuerza del impacto se distribuye hacia los muslos y el fémur, el hueso más resistente del cuerpo humano, en lugar de concentrarse en los pies y tobillos. En palabras de Harald Lutz, responsable de desarrollo en ZF Lifetec, se trata de un complemento a la protección de las rodillas: “Sin este punto de apoyo en los talones, la eficacia del airbag para las rodillas disminuye, ya que las piernas pueden moverse de manera descontrolada durante el impacto”.

Con la mirada puesta en el futuro, la industria automovilística observa con atención cómo esta innovación podría transformar la experiencia de conducción y la protección de los pasajeros en los próximos años.