Receta de gazpacho de remolacha, una versión deliciosa y muy nutritiva de este clásico de verano

Probablemente, el gazpacho sea uno de los platos más tradicionales y reconocibles de nuestra gastronomía, a la vez que uno de los que más variaciones ha sufrido con el paso de los siglos. El gazpacho tradicional tiene sus orígenes en Andalucía, en concreto, en los campesinos y jornaleros que aprovechaban los recursos disponibles para alimentarse en tiempos de escasez. Desde entonces hasta ahora, el gazpacho original ha cambiado radicalmente su receta, convirtiéndose ahora en una sopa fría a base de hortalizas que es uno de los platos más repetidos en los meses de verano.

Aunque la versión más tradicional del gazpacho sigue siendo la más repetida en los hogares españoles, hay otras alternativas que se han ido haciendo hueco poco a poco, recetas con ingredientes frescos y saludables como son la sandía, la cereza o la remolacha. Esta última es la protagonista de nuestra receta, un gazpacho de remolacha cocida que reúne todo el sabor de esta tradicional sopa fría y todos los beneficios de esta hortaliza morada.

La remolacha es un tubérculo de color vibrante, conocido por su sabor dulce y terroso, que es además un gran aliado para lograr una alimentación saludable, gracias a sus muchas propiedades beneficiosas. Una de las características más destacadas de las remolachas es su contenido de betalaínas, un compuesto que actúa como pigmento natural y que además cuenta con potentes propiedades antioxidantes que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres. Este efecto antioxidante puede contribuir a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y enfermedades cardiovasculares.

Asimismo, las remolachas son conocidas por su capacidad para mejorar la salud cardiovascular. Algunos estudios han apuntado que el consumo regular de zumo de remolacha puede reducir la presión arterial, gracias a la presencia de nitratos naturales en la remolacha. Estos nitratos se convierten en óxido nítrico en el cuerpo, el cual ayuda a relajar y dilatar los vasos sanguíneos, mejorando así el flujo sanguíneo y reduciendo la presión arterial.

Asimismo, cabe destacar que este tubérculo es un alimento de bajo contenido energético, en parte gracias a que está compuesto en un 90% por agua. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), 100 gramos de remolacha aportan 37 kilocalorías en total, además de 6,4 gramos de hidratos de carbono y 3,1 gramos de fibra.

El gazpacho de remolacha comienza con la cocción previa de las remolachas si no se compran cocidas. A partir de ahí, se mezclan con tomate maduro, pepino, pimiento rojo, cebolla, ajo y pan remojado en agua y vinagre. Todo se tritura con aceite de oliva virgen extra hasta lograr una textura cremosa y homogénea. Puede colarse para una textura aún más fina, y se recomienda enfriar al menos una hora antes de servir.

Para preparar gazpacho de remolacha se necesita un tiempo aproximado total de 1 hora y 15 minutos:

• 15 minutos para pelar y cortar los ingredientes.
• 5 minutos para el triturado.
• 1 hora de refrigeración previa al servicio para que esté bien fresco.

• 3 remolachas cocidas medianas
• 3 tomates maduros grandes
• 1/2 pepino pelado
• 1/2 pimiento rojo
• 1/4 de cebolla
• 1 diente de ajo pequeño
• 1 rebanada de pan duro (opcional)
• 2 cucharadas de vinagre de vino blanco
• 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• Sal al gusto
• Agua fría (cantidad necesaria para aligerar la textura)

1. Si las remolachas no están cocidas, hiérvelas enteras con piel durante 40 minutos, deja enfriar, pela y corta.
2. Lava bien los tomates, pela el pepino, el ajo y la cebolla, y corta todo en trozos medianos.
3. En el vaso de la batidora, coloca las remolachas cocidas, los tomates, el pepino, el pimiento, la cebolla, el ajo, el pan y el vinagre.
4. Añade sal al gusto y tritura hasta obtener una mezcla uniforme.
5. Mientras bates, incorpora el aceite de oliva poco a poco para emulsionar.
6. Ajusta la textura con un poco de agua fría si lo deseas más líquido.
7. Pasa por un colador fino si prefieres un resultado más liso.
8. Refrigera durante al menos 1 hora.
9. Sirve bien frío con un chorrito de yogur, dados de queso fresco o menta picada.

Esta receta de gazpacho de remolacha rinde aproximadamente 4 porciones.

Cada porción contiene aproximadamente:

• Calorías: 150
• Grasas: 9 g
• Grasas saturadas: 1,3 g
• Carbohidratos: 14 g
• Azúcares: 8 g
• Proteínas: 2 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

El gazpacho de remolacha se puede conservar en el frigorífico hasta por 3 días, guardado en un recipiente hermético.