Red Eléctrica responde y acusa a las eléctricas de ocultar información sobre el apagón del 28 de abril

La presidenta de Redeia, Beatriz Corredor, se desmarca del informe del Gobierno y defiende que la actuación del operador del sistema fue “impecable”

Guardar
La presidenta no ejecutiva de
La presidenta no ejecutiva de Redeia, Beatriz Corredor, en una rueda de prensa en la sede de Red Eléctrica (Alejandro Martínez Vélez / Europa Press)

Red Eléctrica de España ha presentado este miércoles el resultado de su propio informe sobre el apagón del pasado 28 de abril, en una rueda de prensa marcada por reproches a las compañías eléctricas. La presidenta de Redeia, Beatriz Corredor, ha denunciado que las eléctricas se negaron a facilitar toda la información necesaria para esclarecer el origen del fallo, dificultando así el trabajo de los técnicos de Red Eléctrica tras el incidente que dejó sin suministro a miles de usuarios en distintas zonas de España.

“Las compañías eléctricas no han suministrado toda la información solicitada por el operador del sistema para estudiar las causas del apagón, a pesar de que están obligadas a ello”, ha subrayado Corredor. Según la responsable, los datos aportados por los agentes del sistema fueron “parciales y reiteradamente marcados como confidenciales”, lo que limitó el alcance de la investigación interna.

Choque con el Ministerio de Transición Ecológica

La presentación del informe de Red Eléctrica se ha producido apenas 24 horas después de que la ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, avanzara en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros las principales conclusiones del informe elaborado por el Gobierno. El Ministerio sostiene que Red Eléctrica “no tenía suficiente control de tensión” el día del apagón y señala la falta de preparación de las centrales de generación convencional para hacer frente a situaciones de inestabilidad.

La ministra explicó que “el sistema no disponía de suficiente capacidad de control de tensión dinámica”, diagnóstico al que han respondido la presidenta de Redeia y la directora general de Operación, Concha Sánchez, defendiendo el trabajo del operador y apuntando a la limitada colaboración de las eléctricas.

“Red Eléctrica no gestiona la red de distribución”

Corredor ha sacado pecho del comportamiento “impecable” del operador del sistema y de sus empleados desde el primer minuto tras el apagón. “La ley asigna al operador del sistema la función de garantizar el suministro. Ejerce sus funciones en consonancia con el resto de operadores de la red ibérica bajo principios de transparencia y eficiencia”, ha detallado.

Asimismo, ha añadido que Red Eléctrica “no gestiona las redes de distribución, lo hacen los distribuidores. Tampoco gestiona redes privadas ni todos los puntos de control vinculados al operador eléctrico”.

“En cuanto a la generación, el operador del sistema recibe los programas de los diferentes mercados, determina la cantidad de energía disponible y comprueba que todo es compatible con las leyes de la física a través de los denominados servicios de ajuste”, ha explicado.

Corredor ha defendido la transparencia en la elaboración del informe, que “se ha remitido completo tanto al Ministerio como a la CNMC” y que, por voluntad propia, se publicará en versión anonimizada en la web de Red Eléctrica.

Defienden su actuación y transparencia

La presidenta de Redeia además ha subrayado el cumplimiento “estricto” de los protocolos europeos tras el incidente. “En cumplimiento de la normativa europea se está remitiendo toda la información a ANSOE. Hemos dado autorización para que los datos sean públicos, pero no todos los agentes del sector han hecho lo mismo”, ha indicado.

También ha remarcado que la colaboración con la CNMC y la Justicia sigue abierta, insistiendo en la labor “incansable” de los trabajadores de Red Eléctrica desde el primer minuto tras el apagón.

El origen: una oscilación forzada en una planta fotovoltaica de Badajoz

Concha Sánchez, directora general de Operación, ha explicado cómo se desencadenó el apagón. Según ha apuntado, a las 12:03 de la mañana del 28 de abril comenzó una oscilación forzada en la red, identificada en una planta fotovoltaica en Badajoz conectada a la red de transporte.

“Este comportamiento oscilatorio se identificó en una planta fotovoltaica en Badajoz. No es la primera vez que observamos estos hechos. La causa de la oscilación deberá ser aclarada por el propietario de la planta”, ha manifestado Sánchez.

El informe técnico desmenuza el colapso paso a paso

La oscilación en Badajoz provocó una bajada súbita en el nivel de tensión, acompañada de fluctuaciones “muy importantes” que obligaron a intervenir y desconectar líneas, reducir el intercambio exportador con Francia y aplicar medidas para amortiguar la incidencia. Las perturbaciones continuaron hasta varios minutos después, reproduciéndose en diversas zonas de la red.

Durante las maniobras para estabilizar el sistema, Red Eléctrica localizó una inesperada subida de la tensión y anomalías en la interacción entre la red de transporte y la de distribución. “Vimos un crecimiento instantáneo desde la red de transporte que no se comporta así salvo en casos muy particulares”, ha afirmado Sánchez. Además, se identificaron “pérdidas de 700 megavatios de generación no conectados a la red de transporte”, lo que incrementó la demanda y redujo las exportaciones.

El apagón se agravó tras la desconexión de un transformador en una subestación de Granada, provocando la pérdida de 355 megavatios de generación y una subida de tensión. Apenas 35 segundos después, se originaron dos nuevas desconexiones en Badajoz, con una pérdida acumulada de 582 megavatios.

“Casi de forma inmediata, una nueva desconexión en otra subestación en Badajoz agravó la situación”, ha destacado Sánchez. Estos incidentes derivaron en una sucesión de incrementos de tensión, asociados a la falta de adaptación rápida a los cambios de condiciones.

Efecto cascada y colapso total

La serie de desconexiones arrastró al sistema a una fase de efecto cascada. Sánchez ha indicado que “en total, se produjo una pérdida de 1.150 megavatios de generación renovable” y el sistema sufrió una desconexión de más de 2.000 megavatios, provocando caídas de frecuencia y el colapso del sistema peninsular. España y Portugal quedaron aisladas del resto de Europa y la caída se produjo menos de medio minuto después del primer incidente en Granada.

Por último, Sánchez ha denunciado “la insuficiencia de recursos efectivos para el control de la tensión” y ha acusado a los generadores de no cumplir sus obligaciones técnicas: “¿Qué hubiese pasado si los generadores con obligación de control lo hubiesen hecho? No se habrían producido las oscilaciones, no habríamos tenido apagón”, ha sentenciado.