El Parlamento Europeo rechaza la reforma que recorta derechos a los pasajeros: “Es una puñalada por la espalda”

Los eurodiputados denuncian la presión del lobby aéreo y advierten de un retroceso “inaceptable” en las compensaciones por retrasos y cancelaciones de vuelos

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Avión de Ryanair. (Europa Press)
Avión de Ryanair. (Europa Press)

El Parlamento Europeo ha cerrado filas contra la propuesta del Consejo de la Unión Europea para modificar el Reglamento EU261, que desde hace más de veinte años regula los derechos de los pasajeros aéreos. En un debate celebrado el 17 de junio, los eurodiputados expresaron su rechazo frontal a un texto que, según denuncian, recorta de forma sustancial las compensaciones económicas por retrasos, cancelaciones o incidencias en los vuelos, según recoge Vuelo-Retrasado.es.

La propuesta del Consejo, aprobada el pasado 5 de junio, introduce cambios que endurecen los requisitos para que los pasajeros puedan reclamar compensaciones. Entre las medidas más polémicas figura el aumento del umbral mínimo de retraso que da derecho a indemnización, que pasaría de las actuales tres horas a cuatro o incluso seis, en función de la distancia del trayecto. También se plantea reducir los importes económicos que las aerolíneas deben abonar a los pasajeros, lo que podría dejar fuera de cobertura hasta al 60 % de quienes hoy tienen derecho a reclamar.

Recortes por tramo de vuelo

La reforma afectaría tanto a vuelos nacionales como internacionales. En vuelos de hasta 1.500 kilómetros la compensación subiría a 300 euros, pero solo si el retraso supera las cuatro horas, frente a los 250 actuales a partir de tres. En trayectos intercontinentales fuera de la Unión Europea, la cantidad se reduciría de 600 a 500 euros y requeriría una hora más de espera.

Aviones de la compañía estatal
Aviones de la compañía estatal israelí El Al y de Israir, entre otras aerolíneas, aparcados en el aeropuerto internacional de Larnaca, en Larnaca, Chipre. 16 de junio de 2025. REUTERS/Yiannis Kourtoglou

El Parlamento reaccionó con dureza. Roman Haider y Rosa Serrano Sierra calificaron la propuesta como una “puñalada por la espalda”. Jan-Christoph Oetjen y Oihane Agirregoitia Martínez hablaron de un “ataque directo” a los derechos de los pasajeros. Ernő Schaller-Baross acusó a las aerolíneas de eludir responsabilidades desde la pandemia, y Serrano Sierra añadió que la iniciativa es “inaceptable e inexplicable para nuestros ciudadanos de la UE”.

En el tramo final del debate, Ana Miranda Paz alertó del creciente peso de los lobbies en la política comunitaria. “El lobby de las grandes aerolíneas está influyendo cada vez más en las decisiones de la UE, dejando atrás a los pasajeros”, dijo.

Organizaciones de consumidores y peticiones públicas

La reacción parlamentaria se suma a la oposición expresada por organizaciones como BEUC, que ya la semana anterior criticaron el contenido de la propuesta. Tom van Bokhoven, portavoz de Flight-Delayed.com, advirtió de que “el lobby de las aerolíneas sigue ejerciendo una presión implacable a costa de los pasajeros” y aseguró que “algunas compañías todavía creen que los viajeros tienen demasiados derechos”.

En paralelo, la Asociación de Defensores de los Derechos de los Pasajeros (APRA) ha puesto en marcha una campaña para frenar la aprobación definitiva de la reforma. Una petición pública dirigida a los legisladores de la UE supera ya las 40.000 firmas. El objetivo es que el Parlamento mantenga su postura crítica de cara a la votación prevista para septiembre.

Los aeropuertos españoles operarán 97.420 vuelos en esta Navidad, un 17,7% más que hace un año.

Desde Vuelo-Retrasado.es, recuerdan que un retroceso en el reglamento afectaría de forma directa a millones de pasajeros cada año y consideran que la reforma vulnera el principio de protección al consumidor.

La votación final en el Parlamento Europeo está prevista para septiembre. Hasta entonces, el pulso entre las instituciones, las aerolíneas y los representantes de los pasajeros marcará la agenda comunitaria en materia de transporte aéreo.