El consumo excesivo de regaliz puede aumentar el riesgo cardiovascular, según un estudio

Un análisis realizado por el Gobierno francés detectó 64 intoxicaciones por exceso de raíz de regaliz entre 2012 y 2021

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Chuches de regaliz. (MAXINE ESCHGER/Europa
Chuches de regaliz. (MAXINE ESCHGER/Europa Press)

Está presente en miles de alimentos y bebidas diferentes, pero pocos conocen sus efectos secundarios. La raíz de regaliz, utilizada en dulces, jarabes, helados y bebidas, puede generar intoxicaciones graves e incluso mortales si no se consume con moderación.

Lo advierte la agencia francesa de seguridad alimentaria, ANSES, que entre 2012 y 2021 registró un total de 64 intoxicaciones tras consumir bebidas o alimentos a base de regaliz. Es la glicirrina, su principio activo, lo que la vuelve tan atractiva para la industria alimentaria por su poder edulcorante. Sin embargo, es también su principal peligro: actúa inhibiendo una enzima renal clave, lo que favorece la retención de sodio y la pérdida de potasio. Este desequilibrio puede provocar síntomas como debilidad muscular, arritmias cardíacas y, en los casos más graves, crisis hipertensivas potencialmente mortales. “La glicirricina induce un pseudo-hiperaldosteronismo. Sus manifestaciones son la pérdida de potasio por las orinas, que lleva a hipokalemia, la retención de agua y sodio y la elevación de la presión arterial”, explica la ANSES.

Un desequilibrio electrolítico

La ANSES, en colaboración con diferentes centros antiveneno franceses, identificó en un estudio 64 casos de intoxicación relacionados con la raíz de regaliz. De ellos, el 42% presentaba síntomas graves, como la hipertensión arterial y alteraciones cardíacas provocadas por una disminución significativa de los niveles de potasio en sangre. En algunos casos, estas complicaciones pusieron en peligro la vida de los pacientes: aunque la mayoría de los 64 casos analizados mejoraron con atención hospitalaria, uno falleció y otro quedó con secuelas graves.

La intoxicación por regaliz en el contexto alimentario es poco frecuente, pero puede provocar efectos graves, principalmente pseudo-hiperaldosteronismo con hipertensión e hipopotasemia. El consumo crónico y excesivo, sobre todo de bebidas y confitería, representa el mayor riesgo. Es algo que también advierte la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, que informa de que “la toma elevada de regaliz puede producir desequilibrio electrolítico”. El organismo español recomienda no sobrepasar la dosis diaria de 15 gramos de raíz de regaliz para evitar sus efectos adversos.

La raíz de regaliz, ampliamente utilizada en la industria alimentaria, puede causar pseudo-hiperaldosteronismo, con riesgos de hipertensión y complicaciones graves.

Mayor regulación para los alimentos con regaliz

Raíz de regaliz. (AdobeStock)
Raíz de regaliz. (AdobeStock)

El riesgo de toxicidad depende tanto del tipo y la cantidad de producto consumido como de la sensibilidad individual. Factores como la absorción intestinal, la actividad enzimática y el uso de ciertos medicamentos (por ejemplo, diuréticos) pueden aumentar la vulnerabilidad a la intoxicación.

En la Unión Europea, la legislación exige que los productos con más de 100 mg/kg de glicirricina (o 10 mg/l en bebidas) incluyan la mención “contiene regaliz” en el etiquetado. Sin embargo, la ANSES señala que la información sobre la cantidad máxima diaria recomendada no siempre está presente, y que el regaliz puede encontrarse en una amplia variedad de productos, desde caramelos hasta medicamentos y cosméticos.

Por ello, la ANSES ha recomendado modificar el etiquetado de los productos con raíz de regaliz para advertir sobre los riesgos, incluso en personas sanas, y eliminar la mención exclusiva a hipertensos.