Una adolescente fue secuestrada y forzada a realizar felaciones a jóvenes en una casa okupada: los hombres eran narcotraficantes

Una operación antidrogas rutinaria terminó destapando este caso de agresión sexual a una menor

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Policía Judicial de Francia
Policía Judicial de Francia

Una operación antidrogas rutinaria llevada a cabo por la Policía Municipal en los barrios del norte de Marsella (Francia) ha derivado en el descubrimiento de un caso de secuestro y abuso sexual a una menor. Los hechos se desencadenaron cuando los agentes se centraron en un individuo, identificado como traficante de drogas, quien intentó escapar del piso que okupaba al detectar la presencia policial.

Como recoge el periódico francés La Provence, el sospechoso emprendió una huida hacia un edificio residencial próximo, entrando y subiendo rápidamente por las escaleras hasta el decimosexto piso. Tras una intensa persecución, los agentes lograron interceptarlo. Sin embargo, en el momento de la aprehensión, el individuo ya no portaba la bolsa que habitualmente contenía dinero y estupefacientes.

Se presume que la había arrojado por una ventana en un intento de deshacerse de la evidencia, y posteriormente, un cómplice habría recuperado el bulto del suelo. Dada la ausencia de pruebas directas en ese instante, la policía se centró en la detención del sospechoso y comenzó el descenso.

Inesperado encuentro en el descenso

Durante el descenso por las escaleras, los agentes se encontraron con una joven de 17 años. La adolescente, que mostraba signos de agotamiento, explicó a los policías que había huido de su hogar. Según La Provence, la chica relató, con dificultad, haber sido llevada al piso okupado por un joven y mantenida allí durante tres días sin contacto con el exterior. Su testimonio incluyó la revelación de haber sido forzada a practicar felaciones a varios hombres mientras se encontraba en el apartamento okupado ilegalmente y de haber sido obligada a consumir protóxido de nitrógeno.

Un coche de la Policía
Un coche de la Policía Nacional francesa (Flickr)

El relato de la joven transformó la naturaleza de la intervención policial, que pasó de ser una operación contra el tráfico de drogas a incluir un grave caso de abuso a una menor. Los agentes decidieron actuar con premura, trasladando a la víctima en la patrulla para recorrer la zona con el fin de identificar a sus agresores.

Detención de los implicados

Durante el patrullaje, la joven identificó a dos hombres que deambulaban por la zona. Las descripciones que había facilitado a los agentes coincidían con los individuos señalados. El primero fue identificado como quien la introdujo inicialmente en el edificio, mientras que el segundo, según su versión, fue uno de los que exigieron favores sexuales a cambio de su permanencia en el apartamento okupado.

Sin perder el tiempo, los agentes municipales procedieron al arresto de ambos individuos. La rapidez en la identificación y la actuación posterior facilitaron la incorporación inmediata del caso a una investigación oficial. A raíz de ello, las diligencias han sido trasladadas a la brigada del distrito norte, que ahora se ocupa de esclarecer lo ocurrido junto a la joven y de reunir todas las evidencias posibles.

Las autoridades peruanas le atribuyen al detenido su participación en 30 acciones delictivas

La investigación por violación en grupo a la menor ha sido formalizada por las autoridades competentes. La joven ha sido trasladada a un centro de acogida especializado para garantizar su seguridad mientras el proceso sigue su curso. Las declaraciones de la adolescente constituyen la base para las siguientes etapas de la investigación, mientras los equipos trabajan para identificar no solo a los detenidos, sino también a cualquier otro implicado en esta y otras posibles actividades ilícitas en el área.