Un funcionario francés es pillado conduciendo a 164km/h y da positivo en cocaína: solo le procesan por exceso de velocidad

Después de que el test inicial marcara cocaína en un control vial, contra-análisis confirmaron la inocencia de Lori Helloco

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Un funcionario francés es pillado
Un funcionario francés es pillado conduciendo a 164km/h y da positivo en cocaína: solo le procesan por exceso de velocidad (Rawpixel)

El final del verano de 2024 dejó un capítulo insólito en la política del departamento de l’Orne. El protagonista: Lori Helloco, consejero departamental, primer adjunto al alcalde de Flers y abogado especializado en derecho vial (según lo informa el medio France 3). La escena no tardó en hacerse viral: su Citroën C6 fue interceptado mientras rodaba a 164 km/h por la doble vía entre Briouze y Flers. El radar marcaba la infracción y los gendarmes, además, realizaron un test salival. Resultado: positivo en cocaína.

Con la velocidad a la que viajan las noticias locales en Francia (casi tan rápido como Lori cuando le paró la policía), el caso de Helloco saltó a titulares de inmediato, más allá incluso de las fronteras de la región normanda. El propio funcionario público trató de frenar la polémica desde el primer minuto, negando cualquier consumo de estupefacientes y reclamando una revisión en toda regla. “Me quedé de piedra, ¡no puede ser! Me niego a creerlo porque no he consumido nada”, explicaba cuando los medios se hicieron eco del suceso.

Un funcionario francés es pillado
Un funcionario francés es pillado conduciendo a 164km/h y da positivo en cocaína: solo le procesan por exceso de velocidad (DevianArt)

La segunda ronda de pruebas dio negativo

A diferencia de la acusación de consumo de sustancias, Helloco no tuvo reparo en aceptar el exceso de velocidad. “He cometido el exceso de velocidad, lo asumo. No me había pasado nunca, tenía 11 puntos en mi carnet de conducir”. Esa confesión le ha costado la retirada del permiso de conducir durante nueve meses y la inmovilización de su vehículo. La insistencia por aclarar el positivo en drogas llegó acompañada de contra-análisis solicitados de inmediato, sangre extraída en el hospital, y una ronda extra de pruebas al día siguiente, esta vez de sangre y orina. Todos los resultados acabaron siendo negativos.

Durante dos meses no hubo novedades. Ese paréntesis judicial se sumó al ruido exterior, solo mitigado por el apoyo de algunos y las historias de otros que también aseguraban haber sido víctimas de “falsos positivos”. Helloco puso el foco sobre la fiabilidad de los test salivales: “Hay falsos positivos a menudo”. En conversación con la prensa local, amplió el abanico de hipótesis: “Se manipulan muchos documentos. Puede haber de todo. La noche anterior salí con amigos, quizá bebí de un vaso de otra persona. No llevaba cigarrillos, los compartí. Es algo muy volátil. Todo esto son solo hipótesis”.

El expediente sumó un giro burocrático: debido al perfil profesional de Helloco como abogado, la fiscalía de Argentan optó por traspasar el caso al Tribunal Judicial de Rouen, buscando neutralidad. Una vez en manos de la justicia de Rouen, los magistrados revisaron la carpeta y decidieron archivar la acusación de consumo de estupefacientes. La Fiscalía confirmó que, a partir de aquí, el único proceso abierto contra el político será por la velocidad excesiva, una infracción que se tramitará por la vía de la ordenanza penal, habitual en este tipo de delitos viales.

Helloco quiso cerrar el capítulo con una declaración pública: “Jamás os habría mentido. Hoy, la verdad se ha establecido. La verdad no son las redes sociales ni los medios. La verdad la ha dicho la Justicia.” A ese mensaje sumó una reflexión sobre el desgaste personal de los últimos meses: “No seré procesado ni mucho menos condenado por un delito que no he cometido. Creedme, es difícil de vivir cuando sabes que no has hecho nada y todo el mundo pisotea alegremente la presunción de inocencia. El objetivo, evidentemente, era atacar de forma duradera mi reputación. Todo el mundo comprende lo que se pretendía”. Archivado ya el caso de los estupefacientes, el expediente solo sigue abierto por un exceso de velocidad fuera de lo común en las carreteras normandas.