El país que da a sus jubilados 350 euros para gastar en calefacción: “Aún se siente la presión de la crisis del coste de vida”

La inflación impulsa al Ejecutivo británico a considerar la expansión de los beneficiarios de la ayuda de hasta 300 libras para que los pensionistas paguen sus facturas en invierno

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Pensionista (Adobe Stock)
Pensionista (Adobe Stock)

El pasado abril Reino Unido registró su tasa de inflación más alta en más de un año, superando las expectativas que tenían los expertos para la evolución de los precios en el país en el cuarto mes del año. La Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS, por sus siglas en inglés) reveló que abril había cerrado con una tasa del índice de precios al consumidor (IPC) interanual media del 3,5%, tocando niveles que no había alcanzado desde enero de 2024.

El encarecimiento de los productos de consumo habitual lleva años preocupando a los ciudadanos del Reino Unido, pero la gravedad de la situación se ha intensificado este año con el repunte en los datos arrojados por las últimas lecturas del IPC. Ante esta realidad, el Gobierno británico continúa estudiando medidas para proteger a los colectivos más vulnerables frente al aumento de precios y ayudar a los hogares con dificultades para llegar a fin de mes.

Entre los grupos de personas para los que el Ejecutivo busca implementar ayudas adicionales se encuentran los jubilados, un colectivo que depende del importe que cobre como pensión para costearse sus necesidades y mantener su nivel de vida. Así, el Departamento de Trabajo y Pensiones (DWP) ha comenzado los trámites para reestablecer la subvención de 300 libras (unos 350 euros al tipo de cambio actual) para pagar las facturas de calefacción durante los meses de invierno, conocido como Winter Fuel Payment (WFP), por sus siglas en inglés.

Los laboristas quieren ampliar la subvención

El primer ministro de Reino Unido, Keir Stramer, aseguró que “las personas siguen sintiendo la presión de la crisis del costo de la vida, incluidos los pensionistas”, pese a las mejoras en la economía. Por lo tanto, se mostró dispuesto a “tomar medidas que impacten en las vidas de las personas” e intentar que “más pensionistas sean elegibles para el pago de la ayuda”.

Cómo solicitar la ayuda de 525 euros para jubilados que viven de alquiler.

La medida introducida en el año 1997 por el gobierno laborista de Tony Blair tiene como objetivo aliviar la carga económica de las personas mayores durante los meses más fríos del año, cuando los costes de energía tienden a aumentar. Durante las casi dos décadas de trayectoria de esta ayuda, los diferentes Ejecutivos han alterado las condiciones necesarias para acceder a la misma, reduciéndola de un recurso adicional disponible para todos los pensionistas a uno al que solo se puede acceder si no se alcanza cierto umbral de ingresos.

Nuevo sistema para solicitar la ayuda

Según explica el medio Birmingham Live, el Instituto de Estudios Fiscales (IFS) ha propuesto un sistema similar al utilizado para la bonificación por hijos. Esto consistiría en permitir que en un inicio todos los hogares de pensionistas soliciten el WFP, para pedir después a las familias con ingresos que superen cierto nivel una declaración de impuestos en la que se devuelva parte de este beneficio en forma de un mayor impuesto sobre la renta.

Otra opción es ampliar aún más el público de la ayuda: “El gobierno podría permitir que los hogares que no reciban el Crédito para Pensionistas (PC) soliciten directamente el pago de la ayuda, reportando sus ingresos y otras circunstancias, lo que permitiría aplicar una prueba de medios con un umbral de elegibilidad más alto que el del PC”.

Sin embargo, el IFS admite que este sistema podría conllevar problemas, ya que la complicación del proceso de solicitud podría suponer “que muchos no lo reclamen”. Además, resalta que burocratizar esta ayuda con un trámite más “conllevaría un alto coste administrativo” para una subvención que ronda las 242 libras al año de media, frente a las 4.300 libras de la pensión.