Comienza el primer juicio contra el fondo buitre Nestar-Azora, demandado por el cobro de “cláusulas abusivas” a sus inquilinos

Hace más de un año, hartos de las “cláusulas abusivas e ilegales” y las subidas de precios en sus contratos de alquiler, decenas de vecinos de diferentes puntos de la Comunidad de Madrid se declararon en “huelga” para plantar cara al fondo buitre que gestiona sus viviendas, Nestar-Azora, el tercer mayor casero de España, y junto al Sindicato de Inquilinas presentaron una demanda colectiva contra la empresa. Este miércoles comienza el juicio y los inquilinos confían en que pueda “sentar un precedente” contra la especulación inmobiliaria.

“Nuestro objetivo es sentar precedente contra aquellos que se creen impunes con el poder económico y político en su mano, y conseguir que esas cláusulas que utilizan para conseguir más beneficios sean consideradas abusivas”, explica Assiatou Diallo, portavoz del Sindicato de Inquilinas de Madrid, que aclara que esas cláusulas consisten en el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), los gastos de la Comunidad y seguro de impago, “conceptos que corresponde pagar al propietario por ley”. “Queremos que los fondos buitre dejen de exprimir la economía de las familias que se ven estas situaciones”, añade la activista.

Desde el sindicato también califican de “abusivas” las subidas de precio de los alquileres, que no solo suponen un mayor esfuerzo económico para los inquilinos, sino que en muchas ocasiones les obliga a cambiar de casa ante la imposibilidad de asumir “aumentos de entre 150 y 200 euros mensuales”.

A pesar de que en 2019 el Gobierno aprobó una Ley de Arrendamientos Urbanos que prohíbe a las entidades jurídicas subir el precio del alquiler durante los siete años de vigencia del contrato, recuerda el sindicato, “los fondos inmobiliarios han encontrado mecanismos para eludir esta restricción, trasladando a los inquilinos gastos adicionales como la Comunidad o el IBI, lo que en la práctica representa un aumento indirecto del alquiler”, denuncian, por lo que reclaman al Ejecutivo que “declare ilegales estas cláusulas y persiga estas prácticas que asfixian a las familias”.

El sindicato también critica que a lo largo de este último año de “huelga de alquileres”, los inquilinos e inquilinas de Nestar-Azora “han soportado amenazas, presiones y el silencio absoluto” por parte de la empresa frente a sus reclamaciones. Pero pese a todo, defienden, “no han parado”. “Gracias a la huelga, muchas vecinas han dejado de pagar cláusulas abusivas que encarecían los contratos hasta en 400 euros al mes. No vamos a parar hasta que se haga justicia”, advierten.

En ese sentido, el sindicato recuerda que ya son decenas de bloques en diferentes puntos de Madrid los que se han organizado para hacer frente a este fondo que tiene más de 8.000 viviendas en todo el país.