Una rica ciudad suiza obliga a una mujer de 71 años a esperar 5 su pensión de viudedad: su reputado marido solo dejó deudas

Incluso cuando la justicia le dio la razón, la autoridad local quiso retrasar más el pago. Su abogado denuncia “hostigamiento”

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Conflicto en una rica comuna
Conflicto en una rica comuna suiza por una pensión de viudedad.

No conocemos su nombre real, ya que el medio de comunicación que ha seguido su historia, el suizo Beobachter, ha optado por preservar la identidad y referirse a ella como Antonella. Reside en Küsnacht, un dato relevante. Se trata de un municipio de apenas 14.000 habitantes situado en el cantón de Zúrich, en la ribera conocida como Costa Dorada por el muy elevado poder adquisitivo y la calidad de vida. Se trata de un lugar idílico, rodeado de naturaleza y con vistas a los Alpes, y apenas a 7 kilómetros de la capital, que conecta por carretera y ferrocarril.

Antonella es italiana, eso sí lo sabemos. Küsnacht es lugar predilecto para extranjeros ricos, que con los años logran la nacionalidad suiza. Lugar tranquilo, acaba sin embargo de saltar a portadas nacionales por un conflicto, bien es cierto que un conflicto de las características que se esperan de aquel contexto. Hay que remontarse a 2020, cuando Antonella, 71 años, presenta la solicitud para recibir una prestación complementaria tras la muerte de su marido. El plazo legal para la respuesta es de 90 días, pero no la tuvo. De hecho, no tuvo noticia hasta 2022: se le denegó el dinero.

Qué pasa con la pensión de viudedad cuando fallece la persona que la recibía.

Dilapidó su fortuna

Antonella convivió desde 1996 con un conocido psicoterapeuta -Küsnacht es también conocida por ser cuna del psiquiatra y psicólogo Carl Gustav Jung-. Tenía consulta también en Roma. En 2016 se casaron. Todos allí le presumían acaudalado. Sin embargo, al morir, solo dejó deudas. Y algo más: atribuyó a su mujer una “disminución de patrimonio” de 116.000 francos (en torno a 124.000 euros). Fueron los argumentos de la comuna para negar a la viuda lo que ella considera que le correspondía.

En Suiza, recuerda Beobachter, el Estado no tiene la obligación de auxiliar con prestaciones complementarias a quien dilapidó su dinero antes de pedirlas. Antonella se asegura no responsable de los desmanes económicos del difunto, apuntando a que estos podían tener lugar ya antes de ser matrimonio. De modo que decidió acudir a la justicia. Y tanto el tribunal de seguros del cantón como el federal fallaron a su favor. Dictaminaron, en efecto, que una viuda no puede ser responsabilizada por decisiones patrimoniales tomadas por el cónyuge antes de la boda.

Comuna de Küsnacht, en Suiza.
Comuna de Küsnacht, en Suiza.

Hubo “hostigamiento”

Esto ocurrió en enero, y ahí debiera haber terminado, pero el caso ha trascendido ahora, y es porque no se ha cerrado y ella ha decidido contarlo. La comuna de Küsnacht solicitó en marzo nuevos documentos a Antonella y sigue reteniendo el pago. Todo este retraso ya ha pasado factura a la jubilada, que ha perdido su vivienda al no poder asumir el alquiler, y ha tenido que pedir dinero a amigos. Pese a su edad, 71 años, ha tenido que volver a trabajar para incrementar sus ingresos.

Ha sido su testimonio en la mencionada revista el que parece haber cambiado las cosas. Beobachter entró en contacto con la concejala competente y solo tres días hábiles después, la autoridad prometió transferir el dinero de forma urgente. 63 meses después de la solicitud, Antonella recibirá la prestación. Su abogado critica la conducta de “hostigamiento” de la comuna, que se negaba a pagar, llegando a desafiar la ley. La institución justifica la negativa al desembolso cuando tocaba en meras excusas burocráticas, negando que hubiera una mala intención.