Los socios del Gobierno acorralan a Sánchez al pedir su comparecencia por el caso de la militante Leire Díez: “No puede permanecer más tiempo en silencio”

La presión de la oposición por el caso de la militante socialista Leire Díez no solo llega desde la bancada de la derecha. Podemos y ERC, socios progresistas del Gobierno, también han pedido este martes la comparecencia del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, tras las informaciones que atribuyen al PSOE una supuesta trama para acabar con la UCO.

Más allá de que el PSOE ha negado la existencia de esa supuesta operación y ha abierto un expediente informativo a Leire Díez, que fue teniente de alcalde en Vega de Pas (Cantabria) y desempeñó cargos significativos en empresas públicas durante el mandato de Pedro Sánchez, los aliados parlamentarios creen que el presidente del Gobierno y líder socialista debe dar explicaciones.

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“Ambas formaciones consideran necesario que Sánchez comparezca para rendir cuentas por la inacción del Gobierno ante las prácticas antidemocráticas y corruptas existentes en los cuerpos policiales, que continúan operando con impunidad”, dicen desde ERC. Asimismo, a juicio de Podemos, el jefe del Ejecutivo debe comparecer ante la Cámara para aclarar “si el PSOE está respondiendo con prácticas antidemocráticas a las cloacas policiales que existen en nuestro país, y también debe explicar en dicha comparecencia cuál es su plan para acabar con las prácticas policiales corruptas”.

Los de Ione Belarra añaden que “Sánchez no puede permanecer más tiempo en silencio” ante este caso. “Cada día que pasa sin ofrecer explicaciones es un día perdido para disipar las dudas, fortalecer nuestra democracia y poner punto final a las cloacas”, resumen fuentes moradas.

Esta petición de comparecencia en el Pleno del Congreso, que se suma a la registrada por el PP (contará previsiblemente con el respaldo de Junts), aboca a Sánchez a rendir cuentas por el caso que salpica a su partido. Cabe señalar que el dirigente socialista no se ha pronunciado todavía sobre este asunto.

En el Gobierno, su portavoz, Pilar Alegría, ha evitado este martes reprobar de manera expresa el comportamiento de la militante socialista, quien pidió información comprometedora contra Antonio Balas, teniente coronel de la UCO de la Guardia Civil que encabeza las pesquisas sobre el caso Koldo o la investigación en torno a la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez. Asimismo, ha negado “absolutamente” que la UCO sea una “policía patriótica”, subrayando que esas “policías patrióticas no responden a la época de estos últimos siete años y a este Gobierno”, sino que las hubo con el PP.

En cuanto las manifestaciones que ella y otros dos ministros realizaron en relación con unos mensajes que intercambió Juan Vicente Bonilla, un excapitán de la UCO y actual gerente de Seguridad Corporativa del Servicio Madrileño de Salud, con otra persona, en los que se hablaba presuntamente de atentar contra Sánchez, pero después se reveló que no se refería a Sánchez, sino al miedo de sufrir él un ataque, Alegría se ha negado a rectificar.

Más allá de alegar que algún medio consideró que una parte de esa conversación “había que interpretarla de otra manera”, la dirigente socialista ha señalado que en esas largas conversaciones hay una “agresividad preocupante” y en ellas interviene una persona (Bonilla) que hoy es un actual alto cargo del Gobierno de la Comunidad de Madrid y que, por tanto, ”cobra un salario público”. Además de recordar que tuvo responsabilidades dentro de la UCO, ha calificado de “impropios” dichos mensajes al tratarse de “un servidor público”.

Por otro lado, según han informado la Ser y El País, Díez acudirá en la tarde de este martes a la sede nacional del PSOE para defenderse ante las informaciones que ponen en duda su actuación. En concreto, esta “militante de base”, como la definen en Ferraz, ofreció un pacto con la Fiscalía al empresario a cambio de información sobre Balas. En el mismo audio, calificó a la Guardia Civil como la “Camorra”.