Una mujer de 88 años fue dada por muerta en la ciudad de Pilsen, al sudoeste de Praga (República Checa), y despertó cuando ya había sido introducida en un ataúd. Los hechos ocurrieron el pasado viernes y han desencadenado una investigación por presunta negligencia contra una médico forense que certificó el fallecimiento.
La información fue difundida este lunes por el diario Pravo y ha generado una respuesta inmediata de las autoridades sanitarias y judiciales del país, que han iniciado las diligencias correspondientes tras constatar que la mujer no presentaba signos de muerte al momento de ser declarada fallecida.
El error comenzó con una llamada de emergencia
Según la información recopilada, el incidente se produjo cuando la pareja de la anciana, residente en la ciudad de Pilsen, llamó a los servicios de emergencia al no conseguir despertarla por la mañana. El equipo de emergencias, siguiendo el protocolo establecido para estos casos, derivó la situación al servicio forense privado con el que se colabora en casos de presunto fallecimiento.
Una empleada de la empresa forense se presentó en el domicilio y certificó la muerte de la mujer sin realizar una inspección médica completa. No se practicaron maniobras de reanimación ni se aplicaron pruebas diagnósticas adicionales que pudieran haber confirmado con certeza la defunción.
El cuerpo fue posteriormente entregado a una funeraria para continuar con el proceso habitual. En las instalaciones de la empresa funeraria, los empleados procedían con los preparativos cuando notaron que la mujer, dentro del ataúd, abrió los ojos.
Investigación por negligencia médica
Tras el descubrimiento, se activaron de nuevo los servicios de emergencia y la mujer fue trasladada de inmediato a un centro hospitalario de la región. Allí fue sometida a observación médica y se confirmó que no había sufrido consecuencias físicas adicionales, más allá de dolencias habituales en pacientes de edad avanzada.
La empresa forense implicada ha decidido despedir a la empleada responsable de la certificación errónea y ha comunicado su colaboración con las autoridades en el proceso de investigación.
Una portavoz de la Policía checa ha indicado que la médico forense despedida podría enfrentarse a una pena de hasta tres años de prisión si se confirma su responsabilidad por negligencia en el ejercicio profesional. La legislación del país contempla sanciones penales para casos en los que la falta de diligencia médica conlleve un riesgo grave para la vida o la integridad de una persona.
La investigación continúa abierta a la espera de nuevos informes médicos y testimonios. Las autoridades judiciales han solicitado una revisión del procedimiento seguido por los servicios de emergencia, la empresa forense y la funeraria, para esclarecer en qué momento se produjeron las fallas que permitieron que una persona con signos vitales fuera declarada muerta.
Últimas Noticias
El Supremo confirma hasta un año de prisión para seis militares por insultar y vejar a una compañera: “No tienes ni culo ni tetas”
La Sala de lo Militar les condena por un delito de acoso por razón de sexo y les obliga a indemnizarla conjuntamente con 2.000 euros
Esta serie española se coloca entre las imperdibles de Netflix para el fin de semana
Protagonizada por Miguel Ángel Muñoz, la producción se coloca entre las 10 más populares de la plataforma
El Parlamento Europeo propone aumentar las ayudas a jóvenes y crear un registro de okupas para revertir la crisis de vivienda
Según el documento, en los últimos ocho años los precios de la vivienda en la Unión han aumentado una media del 48% y los alquileres un 18%, representando a menudo hasta el 40% de los ingresos mensuales de un hogar
Prime Video España: Estas son las mejores series para ver hoy
En la guerra por el streaming, las series de televisión se han convertido en un elemento importante para Prime Video, que busca seguir gustando a los usuarios
Un hombre se cuela en el patio de un colegio y amenaza a un niño con un arma: “No debe volver aquí o cambiaré de escuela a mi hijo”
El agresor vive en una antigua casa de profesores al lado de la escuela y había acudido varias veces al ayuntamiento a quejarse del ruido
