Sevilla en alerta naranja y otras nueve provincias en nivel amarillo por máximas de 40 grados: la Aemet espera temperaturas “propias de pleno verano”

Los meteorólogos no descartan que este jueves se batan récords para el mes de mayo en puntos del nordeste, centro y sur de la península

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Varios niños se refrescan en
Varios niños se refrescan en una fuente durante la tercera ola de calor en Madrid, en el parque Madrid Río, a 3 de agosto de 2024. (Ricardo Rubio / Europa Press)

El miércoles, varios puntos del sur del país superaron los 38 grados. De hecho, en El Granado (Huelva) alcanzaron una temperatura máxima de 39,1 grados y en el aeropuerto de Sevilla llegaron a los 39ºC. Se quedaron a las puertas de superar los 40 grados, una temperatura más común de los meses de verano que de mayo. No obstante, se espera que el mercurio traspase la barrera este jueves, que junto al viernes, se prevé que sean las dos jornadas más calurosas de este episodio, que se prolongará, al menos, hasta el fin de semana.

Las temperaturas, que irán aumentando a lo largo de la jornada, han llevado a la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) a activar las alertas. En concreto, los avisos de nivel amarillo se registrarán en Córdoba y Jaén (Andalucía); Teruel Huesca y Zaragoza (Aragón); Lleida y Tarragona (Cataluña); Badajoz y Cáceres (Extremadura); Navarra, La Rioja y Ourense (Galicia). Y lo harán desde la una hasta las ocho de la tarde. En el caso de Sevilla, la alerta por altas temperaturas es naranja por riesgo importante ante la previsión de máximas de 40 grados. De hecho, las máximas serán "las propias de pleno verano, especialmente en los valles de los grandes ríos".

¿Por qué hace tanto calor?

Las inusuales altas temperaturas responden a la coincidencia de dos fenómenos meteorológicos concretos, conforme detalla el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo. Por un lado, la presencia de un anticiclón centrado en la península y Baleares, ha sido y es el principal responsable de los cielos despejados y las temperaturas cálidas. “La presencia de altas presiones sobre la península garantizan un tiempo estable y, por lo tanto, cielos poco nubosos con fuerte insolación es decir, el sol calienta fuertemente el terreno”, detalla del Campo. A esto, se suma “una masa de aire muy cálido procedente del norte de África” que se ha desplazado hasta el país.

El calor extremo en verano aumenta en España, con riesgos como golpes de calor y cáncer de piel. Sanidad recomienda hidratación, protección solar y prevención para evitar complicaciones, especialmente en vulnerables.

Posibles récords de temperaturas máximas

La Aemet no descarta que durante este episodio puedan batirse récords de temperatura máxima para el mes de mayo en puntos del nordeste, centro y sur de la península, aunque “es difícil precisar en qué lugares concretos ocurrirá esto a priori”, apunta del Campo. Según la previsión, ciudades como Zaragoza y Lérida podrían alcanzar entre 37 y 38 grados, mientras que Madrid rondará los 36 o 37 grados. En localidades como Badajoz, Córdoba, Jaén o Granada, los termómetros marcarán entre 38 y 40 grados. Sevilla, por su parte, podría superar los 40 grados y acercarse a los 42.

Noches tropicales y avisos por calor

Otra característica destacada de este fenómeno será la intensidad del calor nocturno. Según Del Campo, “las noches serán muy cálidas, especialmente entre el viernes y el domingo, con temperaturas mínimas superiores a los 22 grados en puntos de la mitad sur de la península”.

En paralelo, se han activado avisos por temperaturas extremas en varias regiones del país. Concretamente, en Andalucía y Cataluña este miércoles. No obstante, las alertas por altas temperaturas también se han activado de cara al jueves en Andalucía, Aragón, Cataluña, Galicia y Extremadura.

Descenso gradual y otro repunte

El domingo podría marcar el inicio de un descenso en las temperaturas en algunas zonas del país, aunque el calor persistirá en general. A partir del lunes 2 de junio, la entrada de aire más fresco del Atlántico contribuirá a un alivio térmico en buena parte del territorio, salvo en el área mediterránea, donde los vientos recalentados mantendrán un ambiente cálido.