El tormentoso romance de Paulina Rubio y Colate: de un verano de amor en Ibiza a la batalla legal por la custodia de su hijo

Lo que comenzó como un romance de ensueño entre Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nágera ha terminado por convertirse en una de las disputas legales más prolongadas y mediáticas del entretenimiento latinoamericano. No obstante, el último capítulo de esta historia ha sido la gota que ha colmado el vaso: la cantante mexicana ha sido denunciada por presunta agresión física a su hijo mayor, Andrea Nicolás, de 14 años, fruto de su relación con Colate. El caso, que está siendo atendido en Miami, suma un nuevo episodio a la ya tensa relación entre sus progenitores.

La noticia salió a la luz pocos días después de que la artista apareciera en la portada de ¡Hola! México junto a sus dos hijos, mostrándose como una madre feliz y orgullosa. Sin embargo, lo que se vivió dentro de su hogar parece contar otra historia. De acuerdo con Y ahora Sonsoles, fue la cuidadora de la casa quien alertó a la policía tras oír una discusión acalorada entre madre e hijo. Según la defensa del empresario español, Paulina habría castigado a Andrea sin su teléfono móvil, y en medio del altercado, presuntamente lo habría golpeado.

La situación derivó en una audiencia virtual urgente celebrada el 23 de mayo en una corte de Miami. En ella estuvieron presentes, además de Rubio, Colate y la cuidadora del adolescente, Amber Glasper, quien también es testigo del incidente. Aunque aún no hay un veredicto definitivo, la jueza ordenó que Paulina inicie terapia familiar con carácter inmediato, como medida preventiva ante la preocupación por el bienestar del menor.

Beatriz Cortázar, periodista cercana al entorno de Vallejo-Nágera, ha revelado que este no es un hecho aislado. En España existe desde el pasado verano otro procedimiento judicial pendiente que involucra a la misma familia, aunque el proceso está paralizado debido a la ausencia del niño. Según Cortázar, una de las pocas cosas positivas es que "un juez va a escuchar al menor y le va a preguntar dónde quiere vivir“.

La historia entre Paulina Rubio y Colate comenzó en 2005, cuando fueron captados disfrutando del verano en Ibiza. Lo que parecía una aventura de verano se consolidó rápidamente: en 2007 sellaron su amor con una boda en el paradisíaco parque Xcaret, en México. La ceremonia fue todo un evento mediático y ella lució tres vestidos distintos. Tres años más tarde, nació su hijo Andrea Nicolás.

Pero la felicidad duró poco. En 2012 anunciaron su separación y, desde entonces, han protagonizado una interminable guerra en los tribunales. La custodia del niño ha sido el punto más sensible del conflicto. Paulina ha llegado a impedir que el menor tenga pasaporte para evitar que viaje a España con su padre, por temor a que no regrese. Como resultado, Colate ha tenido que viajar constantemente a Miami para convivir con su hijo, mientras que el adolescente no puede ver a su familia paterna en España.

Durante su matrimonio, Colate dejó en pausa su carrera empresarial, algo que más tarde le reprocharía públicamente. Años después, en varias entrevistas, ha confesado que su vida se convirtió en un calvario tras su ruptura con Paulina. “Mi padre me advirtió: ‘esta mujer te va a arruinar la vida’”, reveló en el plató de ¡De Viernes!.

Mientras tanto, Paulina ha preferido mantenerse más reservada respecto al tema, centrando su discurso en su rol como madre y artista. Sin embargo, las cifras hablan por sí solas: desde su separación en 2012, ha demandado a Colate en más de cincuenta ocasiones y el expediente judicial entre ambos suma más de seiscientos documentos. Según Divinity, los gastos judiciales del hermano de la chef podrían ascender al medio millón de dólares como mínimo.

En los últimos años, las tensiones no han hecho más que escalar. En marzo de 2025, tras recoger a su hijo antes de la salida escolar habitual para celebrar su cumpleaños, Colate fue denunciado por Paulina, quien alegó que existía riesgo de secuestro. La justicia estadounidense le dio la razón a la cantante y retiró temporalmente el pasaporte del niño.

Uno de los episodios más llamativos se produjo en octubre de 2024, cuando Paulina viajó a Madrid para recoger a su hijo tras pasar el verano con Colate en Pedraza. En el aeropuerto de Barajas, el niño no tenía pasaporte, lo que provocó un enfrentamiento entre ambos padres con intervención de la Guardia Civil. Finalmente, Paulina decidió salir del país a través de Lisboa, desde donde tomó un vuelo de regreso a Miami con su hijo.

Durante el mismo verano, la artista también interpuso una demanda de emergencia al ver que el menor había sido empadronado en España. Aunque logró una resolución favorable en los tribunales, el conflicto se extendió hasta el mes de octubre, cuando por fin pudo llevarse al niño de vuelta.

Hoy en día Colate vive en España tras asumir la vicepresidencia del Badajoz FC, lo que ha reforzado su deseo de que su hijo se críe en nuestro país. Paulina, por su parte, continúa con su carrera musical en Miami, aunque su figura pública se ha visto afectada por las constantes controversias.