Billetes de avión, entradas para el cine y un hotel en Turquía: el director de una carpintería es condenado a prisión por llevar a su empresa a la quiebra por pagarse caprichos con dinero de la caja

El director de una carpintería en Argovia, en los Alpes suizos, ha sido condenado a ocho meses de prisión efectiva tras descubrirse que usó fondos de la empresa para financiar gastos personales que llegaron a sumar más de 23.000 francos suizos (unos 23.600 euros). Entre los desembolsos ilegales figuran billetes de avión, entradas para el cine, una habitación de hotel en Turquía y una visita a Europa-Park, un parque temático ubicado en Alemania. Lo más grave es que este caso ha llevado a la empresa al borde de la quiebra, pero también ha destapado una trama de falsificación de firmas en contratos que estaban a nombre de la compañía.

El caso comenzó cuando la carpintería empezó a mostrar señales de crisis financiera, a finales de 2023. En ese momento, el socio propietario detectó que había falta de liquidez y que las cuentas no cuadraban. La investigación posterior reveló que el director había acumulado gastos privados cargados indebidamente a la empresa, utilizando la tarjeta bancaria corporativa para sufragar sus caprichos personales.

Los gastos documentados incluyen un viaje al parque temático alemán, valorado en 250 francos (257 euros), una habitación de hotel en Turquía por 200 francos (206 euros), billetes de avión y hasta entradas para el cine. En total de estos gastos sumaba más de 23.000 francos. Según ha recogido el diario suizo Aargauer Zeitung, el uso abusivo de los fondos puso en riesgo la viabilidad económica de la carpintería, una empresa con décadas de trayectoria en el sector.

Al descubrir las irregularidades, el propietario exigió explicaciones al director, pero este respondió con evasivas. Poco después, el director presentó un certificado médico que justificaba una ausencia laboral, intentando eludir la responsabilidad. Durante este periodo, se comprobó que también simulaba incapacidades para cobrar indemnizaciones diarias, además de su salario habitual.

Una vez finalizada su licencia médica, el director fue despedido inmediatamente por el propietario, quien afirmó que la situación de la empresa se había deteriorado notablemente a causa de estos actos fraudulentos. Además del mal uso de fondos, el acusado estaba siendo investigado por falsificar firmas con la intención de cerrar contratos sin la autorización necesaria, lo que agravó su situación judicial.

El juicio se celebró hace poco, y la sentencia fue clara en cuanto a la gravedad de los hechos. El tribunal condenó al exdirector a ocho meses de cárcel efectiva o a cumplir una serie de multas con suspensión de pena, aunque el acusado todavía tiene la posibilidad de presentar un recurso. Durante la lectura del fallo, el juez destacó que el condenado había defraudado a su socio “por completo” y que, además, parecía no asumir las consecuencias de sus actos.

Así, para la carpintería de Argovia, esta situación ha significado un duro golpe. Esto podría marcar un antes y un después en su trayectoria empresarial, aunque todavía están a la espera de que la justicia resuelva por completo este capítulo.