Esta es la multa por ocupar varias plazas en un parking público

Un conductor australiano se volvió viral hace un par de años por una hazaña que podría parecer imposible: aparcar ocupando cuatro plazas de un parking público. Más allá del rapapolvo que recibió en ese entonces en las redes sociales, este conductor torpe (o descuidado, o maleducado) se arriesgó a una voluminosa multa económica: y es que la mayoría de los países sancionan cuando un coche ‘okupa’ más espacio del necesario. España no es una excepción.

El principal marco normativo que rige esta cuestión es el artículo 92 del Reglamento General de Circulación. Este artículo establece que “todo conductor que pare o estacione su vehículo deberá hacerlo de forma que permita la mejor utilización del restante espacio disponible”. Este principio tiene como objetivo maximizar el uso del limitado espacio disponible en los estacionamientos públicos y asegurar un acceso equitativo para todos los conductores.

Por tanto, cuando un conductor decide ocupar más de una plaza de aparcamiento con su vehículo, esta acción puede ser motivo de denuncia y sanción. Las multas impuestas por tales acciones oscilan generalmente entre los 80 y 100 euros cuando se consideran faltas leves. Sin embargo, en casos en los que la infracción se cataloga como grave, las sanciones económicas pueden ascender hasta los 200 euros. Adicionalmente, existe la posibilidad de pagar la multa con un descuento del 50% si el pago se realiza dentro de los 20 días naturales siguientes a la recepción de la notificación. No obstante, esta opción impide posteriormente presentar reclamos sobre la sanción.

La aplicación y la cantidad de las multas pueden variar significativamente dependiendo del municipio donde ocurra la infracción. Dado que cada localidad tiene la potestad de establecer sus propias normativas en cuanto a cuestiones de tráfico, la naturaleza y gravedad de las infracciones también pueden percibirse de manera diferente. Esta variabilidad responde a las necesidades de cada comunidad para manejar la disponibilidad de plaza de parking y aplicar orden en sus áreas urbanas.

Una infracción que se considere leve en un municipio puede percibirse como más grave en otro, lo cual se traduce en diferencias en el importe de las multas. Estos aspectos destacan la importancia de que los conductores sean conscientes de las regulaciones específicas de cada localidad que visiten para evitar sanciones innecesarias.

En algunos casos más extremos, donde el vehículo infractor ocupa varias plazas o representa un obstáculo significativo, las autoridades pueden decidir la intervención de la grúa municipal. Esto implica no solo el costo asociado a la multa inicial, sino también gastos adicionales por la remoción del vehículo y el tiempo durante el cual este permanece en el depósito. Estos procedimientos se llevan a cabo con el fin de liberar espacio en el estacionamiento y asegurar que se cumplan las regulaciones vigentes.

El costo de rescatar un vehículo del depósito puede variar dependiendo de la localidad, pero es generalmente bastante significativo, lo que sirve como un incentivo adicional para que los conductores respeten las normas de estacionamiento y eviten infracciones.