Un jubilado pide a CaixaBank un anticipo de 100 euros y el banco le obliga a firmar un seguro de hogar por tres años: “A los más vulnerables, a exprimirlos”

El abogado Miguel Orellana hace público un testimonio recibido en su despacho

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Un usuario utiliza un cajero
Un usuario utiliza un cajero automático. (Europa Press)

Los jubilados pueden solicitar un adelanto de la pensión. Por lo general, y sin que sea por norma, los bancos tratan de facilitar liquidez a sus clientes cuando por un imprevisto o cualquier otra circunstancia personal se han quedado sin dinero. Esto contando con que las entidades ya de partida lo entregan días antes de que termine un mes.

Bankinter, Santander, CaixaBank, ING o BBVA lo hacen. La Seguridad Social abona a mes vencido, entre los días 1 y 4. Comúnmente, el único requisito es que esa pensión esté domiciliada, pero cada empresa marca sus condiciones. Algunas como Ibercaja ofrecen además anticipos sin intereses hasta dos veces al año con un límite del 50% del importe de la pensión mensual, hasta un máximo de 450 euros.

Caixabank ordena el desahucio de un joven que se quedó a cargo de la casa de su padre tras pagar media hipoteca.

“Esto hay que erradicarlo”

El abogado Miguel Orellana, especializado en banca y seguros, ha difundido un caso que le ha llegado a su despacho en relación con esto y que le ha indignado. Se trata del mensaje de un jubilado: “Fui a CaixaBank a pedir un anticipo de 100 euros y me lo dieron, pero me obligaron a hacerme un seguro de hogar para tres años y no tuve más remedio que hacerlo”.

“Después dicen que los bancos no hacen esto. Sí lo hacen, sí”, se queja el letrado. “Esto hay que erradicarlo -continúa- porque no se respeta ya nada, ni a los jubilados ni a los inmigrantes; es decir, a los más vulnerables, a los que menos recursos tienen. A esos, a exprimirlos”, insiste.

Dos jubilados en un banco.
Dos jubilados en un banco. (Pixabay)

Lo podría haber evitado

Orellana cree que esto se podría haber evitado, pero que, como en tantos otros casos, el desconocimiento ha derivado en que el cliente, realmente necesitado del dinero, haya aceptado. “Esto -explica el abogado- hubiera sido tan sencillo como decirle -al empleado del banco- ‘venga sí, dame el dinero’, y una vez lo tengas, desistes y a correr. Pero se ve que el hombre no sabía”.

“Los seguros son importantes, pero siempre evidentemente que tengáis la intención de contratar, que queráis hacerlo, no por fuerza y obligados. Ese no es el camino”, termina el abogado, que ya denunciado públicamente otros casos de CaixaBank, como el del cliente que pidió un préstamo de 15.000 euros y el banco le hizo un seguro de 250.000.

Este mismo abogado también descubrió una práctica similar de BBVA, en particular por hacer un seguro por 45.000 euros a un cliente que pidió un préstamo de 17.000.

Sede de CaixaBank en Barcelona.
Sede de CaixaBank en Barcelona. (Reuters/Albert Gea)

Los seguros como imperativo

Los bancos ofertan distintos seguros, del hogar a la vida, el automóvil, de protección de pagos o de accidentes, y sus precios superan los que ofrecen aseguradoras ajenas a la entidad. Sin embargo, contratarlos suele ser imperativo para rebajar el tipo de una hipoteca o facilitar alguna otra concesión, lo que reduce o cuando menos condiciona la capacidad de elección del cliente.

El testimonio recibido por Orellana apunta a una situación poco o nada conocida: pedir un seguro a cambio de un adelanto de la pensión de además apenas 100 euros.

La pensión media de jubilación en España es de aproximadamente 1.502 euros mensuales tras una revalorización para contrarrestar los efectos de la inflación y garantizar el poder adquisitivo de más de 10 millones de personas. En cuanto a la edad, la legal se sitúa en 66 años y 4 meses para quienes no alcanzan el periodo mínimo de cotización de 37 años y 9 meses. Para los que sí, pueden acceder a la jubilación completa a los 65 años.