Letonia publica una guía práctica para detectar a los espías rusos: “Higiene insuficiente”, apariencia descuidada o corte militar

La amenaza de tener a Rusia como vecino ha hecho que el país báltico tome importantes medidas. Como país miembro de la OTAN y de la Unión Europea, la relación geopolítica con los rusos no atraviesa su mejor momento. Estonia ha advertido a sus ciudadanos de la posibilidad de que haya espías rusos en su territorio.

Pasar desapercibido es la clave del trabajo de espionaje. Tratar de hacerse pasar por personas anónimas, que no suponen ningún peligro, es para lo que han sido formados. Por ello, Estonia ha tratado de ayudar a sus ciudadanos y que sean capaces de adelantarse a esta labor de disimulación.

Lo ha hecho a través de la publicación de una guía práctica para detectar a los espías. En su informe anual, el Servicio de Inteligencia y Seguridad de Defensa de Letonia (MIDD) ha incluido una lista de consejos para reconocer a los agentes rusos. Lo consideran una de las “principales amenazas” a su seguridad nacional.

El primer consejo que da el servicio de inteligencia es fijarse en la apariencia física de la persona. Un aspecto descuidado y una “mala higiene” podrían revelar que se trata de un informador clandestino. Esto no cerca mucho la búsqueda, pero a partir de aquí presentan otras claves más definitivas.

El gobierno de Estonia ha advertido a sus ciudadanos sobre no bajar la guardia cuando un turista realiza una pregunta que parece inofensiva. Esta es una de las principales tácticas que siguen los agentes encubiertos rusos para evitar ser reconocidos: hacer creer a los lugareños que son simples turistas.

Otras de las tapaderas que emplean son sanitarios o personas interesadas en la naturaleza. De esta forma, empleando botiquines o una vestimenta propia de un explorador, pueden acercarse a zonas militares o infraestructuras importantes. De esta forma, buscan obtener información o conocer los lugares, mientras pasan desapercibidos.

Otro indicativo del que han avisado es que porten objetos o utensilios que no se corresponden con la profesión que fingen ejercer. Por ejemplo, una persona que se presenta como un turista, pero que lleva encima una radio de alto alcance o un botiquín muy completo y especializado.

Aunque reconocen en el informe que “sus miembros podrían ya no encajar visualmente con el perfil clásico de un grupo de reconocimiento y sabotaje”, también advierten que el corte de pelo corto estilo militar puede ser otro factor a tener en cuenta.

Según el MIDD, los agentes infiltrados rusos podrían intentar “incitar disturbios contra el gobierno existente” o atacar a “individuos socialmente significativos”. Pueden estar buscando propagar el miedo y la desconfianza entre los letones, generando la inestabilidad del país y el gobierno.

El objetivo de este informe es que los ciudadanos estén alerta ante posibles saboteadores que quieran aprovecharse de ellos, pero también que puedan aportar información sobre dónde encontrarlos. Advierten que no traten de combatirlo por sí mismos, sino que informen a “la Policía Estatal, a los servicios especiales o a la unidad de las fuerzas armadas más cercana”.