Indemnizan con 20.000 euros a un guardia civil lesionado al intentar reducir a un hombre: primero le habían ofrecido 160

El incremento de la compensación fue gracias a la labor de la Asociación Unificada de Guardias Civiles. El efectivo había recibido patadas en las piernas y muñecas

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ARCHIVO. Un agente de la
ARCHIVO. Un agente de la Guardia Civil (GC)

Un guardia civil ha sido indemnizado con 20.000 euros tras sufrir lesiones graves durante una intervención en un establecimiento, en la que intentó reducir a un hombre agresivo. Inicialmente, la indemnización ofrecida fue de tan solo 160 euros, cifra que fue finalmente modificada tras la intervención legal del abogado José Luis Ganfornina, quien logró aumentar considerablemente la compensación para el agente afectado.

Los hechos ocurrieron en un establecimiento donde los agentes fueron llamados a intervenir debido a la conducta violenta de un hombre que, visiblemente alterado, amenazaba con tener un arma y con matar a dos policías. Durante la intervención, el agresor se resistió activamente, golpeando a los agentes, lo que resultó en que uno de ellos cayera al suelo. El guardia civil recibió varias patadas en la pierna y la muñeca, lo que le provocó heridas que requirieron un largo proceso de recuperación de nueve meses, además de dejar secuelas permanentes.

Según la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Sevilla, fue gracias al trabajo del abogado Ganfornina que se pudo presentar un recurso de reforma, logrando revertir la inicial valoración de la indemnización. En un comunicado, la AUGC destacó que, con la nueva indemnización, se reconoció finalmente la “compensación justa” para el agente afectado, quien, además de las secuelas físicas, también sufrió las consecuencias psicológicas del incidente.

12.000 agresiones cada año

Este caso pone de manifiesto la lucha constante que enfrentan los miembros de las fuerzas de seguridad del Estado para obtener el reconocimiento debido cuando se les agreden en el cumplimiento de su deber. Según las estimaciones de la AUGC, se registran alrededor de 12.000 agresiones anuales contra agentes de la Guardia Civil y otros cuerpos de seguridad. Sin embargo, estos incidentes de agresión rara vez son reflejados en los informes oficiales de criminalidad, lo que la asociación considera un agravio hacia quienes arriesgan su vida a diario por la seguridad pública.

Se han realizado 11 registros domiciliarios en España, en una investigación coordinada por los Equipos Mujer Menor (EMUME) de la Unidad Técnica de Policía Judicial (Guardia Civil)

El incidente ha reavivado las peticiones de la AUGC para exigir más medios humanos y materiales, así como una mayor seguridad jurídica para los agentes. La asociación también ha reiterado la necesidad de endurecer las penas por agresiones a los miembros de las fuerzas de seguridad, subrayando que la labor de estos profesionales debe ser reconocida como de alto riesgo y dotada de la protección legal adecuada.

Este caso se une a una serie de incidentes que evidencian las dificultades que enfrentan los agentes de la ley en el ejercicio de sus funciones, donde la violencia contra ellos se ha convertido en una constante que requiere una respuesta más contundente por parte de las autoridades y la sociedad.