Un adolescente gasta 10.000 anuales para vivir en un tren desde hace años: “Nunca sé donde estaré mañana. Me da libertad”

A la edad de 16 años, Lasse Stolley convenció a sus padres para vivir una vida dirigida por las vías del tren

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Un adolescente gasta 10.000 euros
Un adolescente gasta 10.000 euros al año para vivir en un tren desde 2022. (Imagen: Instagram)

Lasse Stolley es un joven de 17 años que ha encontrado en los trenes su hogar, su lugar de trabajo e incontables aventuras viajando hasta donde llega la red ferroviaria. Desde verano de 2022, cuando el joven tenía 16 años, ha dejado atrás la vida convencional para adoptar un estilo de vida nómada que le permite explorar Europa mientras mantienen su carrera como programador.

Su residencia es cualquier vagón que elija abordar y su “domicilio permanente” es, en realidad, una BahnCard 100 (tarjeta de viajes ilimitados) de primera clase. Aproximadamente, Lasse cubre 960 kilómetros diarios en su interminable viaje alrededor de los países afiliados a las vías alemanas.

La vida en el tren me da la libertad de decidir adónde quiero ir en cualquier momento”, comentó en una reciente publicación en su cuenta de Instagram. “Desayuné en el Mar Báltico por la mañana y disfruté de la puesta de sol en los Alpes por la noche. ¡Las posibilidades son infinitas!”.

Minimalismo sobre ruedas

Esta idea podría parecer una locura, pero Lasse ha transformado este desafío en una rutina que disfruta al máximo. Desde que salió de su ciudad nata, Fockbek (norte de Alemania), con solo cuatro camisetas, dos pantalones y algo de ropa interior, ha adoptado el minimalismo como estilo de vida.

“Cambié la abundancia de posesiones por el minimalismo”, explicó en su blog. “Viajar y trabajar al mismo tiempo no es algo que todos puedan hacer, pero yo tengo la suerte de poder hacerlo gracias a mi trabajo en remoto”, destacó Lasse.

Mientras viaja, se asegura de que su entorno sea lo más cómodo posible: aprovecha los servicios de primera clase, como el vagón comedor para desayunar, y cuando lo necesita, duerme en camarotes privados o incluso en asientos de trenes nocturnos.

Lasse vive de forma nómada,
Lasse vive de forma nómada, acomodándose a cada vagón de tren y duchándose cuándo puede en las estaciones. (Imagen: Instagram)

Un estilo de vida nómada

La rutina de Lasse no es solo viajar. En sus publicaciones, comparte momentos en los que visita los lugares más emblemáticos de cada ciudad, hace senderismo y explora los atractivos turísticos que encuentra en su camino.

A pesar de la falta de residencia fija, el joven no parece ver inconvenientes en su vida de nómada. “Es una vida diferente, pero micho más interesante que quedarme solo en un lugar. Cuando viajó, todo es una nueva experiencia”, señaló.

Sin embargo, la vida sobre raíles también tiene sacrificios. Lasse no duda en lavar su ropa en los lavabos de las estaciones o ducharse en las piscinas públicas o servicios comunitarios. “Es parte de la vida del viajero. Si hay algo que he aprendido, es que no necesitas mucho para ser feliz, la libertad es lo más importante”, indicó.

El tren hotel que conecta España con el resto de Europa: viajes de hasta 30 euros y velocidades de 200.

Ahora, con la vida establecida entre vagones, el joven sueña con un futuro relacionado con los trenes: asesorar a empresas ferroviarias o trabajar con fabricantes de trenes. “Me encantaría ser parte de la evolución del transporte ferroviario, especialmente si puedo ayudar a mejorar la experiencia de quienes viajan de la forma en que lo hago yo”, compartió.

Para él, los 10.000 euros anuales que gasta son una inversión que no se puede comparar al precio. “Mi vida es un viaje constante, y eso es lo que más me gusta de todo esto. Nunca sé donde estaré mañana, pero sé que siempre será un lugar nuevo, llenos de historias por contar”.