En qué ha invertido 800 millones de dólares la mujer más rica de Australia: apuesta por un sector estratégico que podría redefinir la geopolítica mundial

Gina Rinehart es la mujer más rica de Australia y una de las mayores figuras del sector minero a nivel global

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Gina Rinehart posa en Australia
Gina Rinehart posa en Australia Occidental en esta foto de archivo sin fecha obtenida el 23 de enero de 2018. (Hancock Prospecting/Handout via REUTERS)

Gina Rinehart, la mujer más rica de Australia y una de las mayores figuras del sector minero a nivel global, ha invertido un total de 800.000 millones de dólares en minerales, en el sector denominado de tierras raras. Estos minerales son esenciales para fabricar tecnologías avanzadas como baterías para vehículos eléctricos, imanes para motores, y equipos médicos. A pesar de que se llaman raras, estas tierras no son difíciles de encontrar, pero su extracción es compleja y cara.

Las inversiones de Rinehart, que han puesto el foco en la minería fuera de China, buscan contrarrestar el predominio del gigante asiático en la producción de metales clave para una variedad de industrias. A través de su holding familiar Hancock Prospecting, Rinehart ha adquirido importantes participaciones en empresas internacionales que buscan diversificar la producción de tierras raras, especialmente en mercados como Estados Unidos, Australia y Brasil.

Inversiones clave en Estados Unidos y Australia

Tal y como han publicado desde Forbes Italia, Rinehart ha centrado gran parte de su fortuna en fortalecer su presencia en este sector estratégico. Si bien las tierras raras representan solo una pequeña parte de su fortuna total, valorada en unos 30.000 millones de dólares, sus inversiones han sido decisivas. De hecho, la empresaria posee más del 8% de Mp Materials, una compañía que opera la única mina de tierras raras funcional de Estados Unidos, en California. Esta mina es de vital importancia para la industria estadounidense, ya que su producción abastece los mercados locales, incluido el sector del automóvil.

Además, Rinehart también ha adquirido un 8,2% de Lynas Rare Earth, una de las empresas más destacadas en Australia en la extracción de tierras raras. Esta compañía explota el yacimiento de Mount Weld en Australia, un recurso clave que abastece el 60% de las necesidades de tierras raras de Japón.

En 2024, Lynas inauguró una planta de refinado de tierras raras en Kalgoorlie, con una inversión de 800 millones de dólares. Gracias a esta planta, Lynas espera aumentar su producción para suministrar metales importantes para la tecnología de alta gama. Pero Rinehart no solo se ha limitado a gestionar su cartera, sino que también ha estado involucrada activamente en la reorganización del sector de las tierras raras, buscando aumentar la competitividad frente a China, el primer productor mundial.

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Las tierras raras, clave en la economía global

Aunque parezca que no, las tierras raras tienen un gran impacto en la economía global, y las acciones de Rinehart tienen un alcance estratégico. Las tierras raras son esenciales en la fabricación de productos de tecnología avanzada, desde componentes para misiles y motores eléctricos hasta dispositivos médicos. La inversión en este sector busca rentabilidad económica, pero también una posición geopolítica más fuerte, alineada con los intereses de países como Estados Unidos, que buscan disminuir su dependencia de China en recursos clave para su industria.

Además, Gina Rinehart es conocida por su cercanía con figuras políticas como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. La empresaria ha demostrado en varias ocasiones su capacidad para adaptarse a los cambios del mercado global. En 2023, por ejemplo, adquirió propiedades cercanas a la residencia de Trump en Palm Beach, y ha sido una firme defensora de las políticas económicas del presidente estadounidense, instando a Australia en algunas ocasiones a seguir el mismo camino.