Te acabas de mudar y quieres hacer de tu balcón un espacio único. Para ello, sabes que recurrir a las plantas es siempre una buena opción. Y es aquí cuando aparece en tu mente la idea de una planta serpenteando el muro de tu pared.
Así, las plantas trepadoras son una excelente opción para añadir verdor y belleza a cualquier espacio, tanto interior como exterior. Su capacidad para ascender por superficies verticales las convierte en aliadas perfectas para embellecer cualquier tipo de superficie. Sin embargo, de entre todas ellas hay una a la que nada se le resiste: la hiedra (hedera helix).
Así es la planta trepadora que escala por cualquier superficie
La hiedra (Hedera helix) es una planta trepadora muy apreciada tanto por su resistencia como por su versatilidad en jardinería. Esta planta se caracteriza por su capacidad para fijar sus raíces en cualquier objeto cercano, ya sea un muro, una verja o incluso un árbol, lo que la convierte en una opción ideal para cubrir superficies verticales o crear pantallas naturales. Su follaje denso y verde la hace perfecta para crear una barrera de privacidad, proporcionar sombra o incluso decorar paredes exteriores. Además, la hiedra es capaz de resistir a condiciones climáticas muy diversas, lo que la convierte en una planta fácil de mantener y que puede prosperar tanto a pleno sol como en sombra parcial.
De igual forma, también destaca por su crecimiento rápido, lo que la convierte en una excelente opción para quienes buscan resultados rápidos en su jardín o balcón. Sus hojas, de forma lobulada y color verde oscuro, ofrecen un contraste atractivo y pueden aportar frescura a cualquier espacio. Sin embargo, es importante destacar que la hiedra puede necesitar un cuidado recurrente, ya que tiende a crecer de forma descontrolada, llegando a cubrir áreas que no deseamos. En este sentido, para quienes no estén dispuestos a llevar a cabo este tipo de mantenimiento hay otras opciones.
Plantas trepadoras alternativas a la hiedra
Si estás en busca de plantas trepadoras que requieran de un mantenimiento menor que el de la hiedra, aquí te presentamos algunas opciones.
La Buganvilla (Bougainvillea) es una planta trepadora altamente resistente, ideal para climas cálidos. Esta planta requiere muchas horas de sol diarias y, una vez establecida, apenas necesita riego. Sus flores, que varían entre tonos de fucsia y púrpura, proporcionan un color vibrante y atractivo a cualquier balcón o pared. Además, su resistencia a plagas y enfermedades la convierte en una opción de bajo mantenimiento.
Por otro lado, la Clemátide (Clematis) es una planta fácil de cuidar, especialmente en áreas con sombra parcial. Aunque crece rápidamente, no requiere una poda constante. Sus impresionantes flores, que abarcan desde colores suaves hasta más intensos, la convierten en una excelente opción para decorar pérgolas y vallas.
Finalmente, la Gloriosa (Gloriosa superba), una planta perenne que se adapta bien a climas cálidos, necesita un suelo bien drenado y luz directa. Tras establecerse, requiere poco cuidado. Sus flores exóticas en forma de lirio hacen de ella una excelente opción decorativa.
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