Dos hermanos encuentran la botella que un niño lanzó al mar en 1976 y dan con él: “Me ha llevado de vuelta a cuando tenía 14 años, cuánto han cambiado las cosas”

Tras el hallazgo de los Buffington, un periodista encontró a Peter R. Thompson, que ya no recordaba haber lanzado el mensaje con su dirección para que le fuera devuelta

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Clint Buffington, el hombre que
Clint Buffington, el hombre que encontró la botella. (@clint_buffington)

Clint Buffington y su hermano Evan crecieron con un inusual entrenamiento que les inculcó una pasión poco común. Eran cazadores de tesoros desde niños. Explorar canteras de roca y buscar hongos fueron algunas de las actividades con las que comenzaron a afilar sus sentidos, y con el tiempo estas aventuras se trasladaron a playas, donde pasaban días enteros recolectando fragmentos de cristales marítimos o cualquier objeto inesperado, incluso electrodomésticos abandonados. “Competíamos para ver quién podía encontrar, no el diente de tiburón más grande, sino el diente de tiburón más pequeño porque eso te mostraba quién tenía el ojo más agudo”, recordó Clint en una entrevista con Boston.com. Sin embargo, nunca esperaron dar con lo que un día encontraron.

La aventura que llevó a Clint a descubrir su primera botella con un mensaje comenzó cuando estaba a punto de terminar sus estudios universitarios. Inspirado por unas vacaciones al Caribe en las que sus padres regresaron con un hallazgo similar, Clint soñaba con tener una experiencia igual. Como regalo de graduación, su padre lo acompañó al Caribe, donde finalmente encontró su propio mensaje en una botella. “De repente lo entendí”, confesó Clint, al recordar la emoción del momento. “Era como todas las otras cosas que crecí haciendo… si encuentras dientes de tiburón, habrá más. Encuentra un mensaje en una botella, va a haber más”.

Esa intuición resultó ser cierta. A lo largo de los años, Clint y Evan compartieron varias expediciones similares, aunque habían pasado seis años desde su último viaje juntos. Esto cambió recientemente cuando ambos decidieron emprender unas vacaciones en una isla poco habitada de las Bahamas, tras recuperarse de problemas de salud que casi les llevan a cancelar la escapada. Al amanecer del primer día, cada uno tomó un camino por separado para hacer una búsqueda más eficiente.

Una botella lanzada al mar hace 49 años

Mientras escudriñaba la arena, Evan tropezó con algo inusual. “Hombre, no vas a creer lo que encontré”, dijo a su hermano por el walkie talkie con evidente emoción. El objeto —una antigua botella de vidrio de Pepsi con una fecha grabada de 1975— contenía un mensaje en su interior, fechado en 1976. El papel dentro estaba tan manchado por el sol que su tonalidad marrón recordaba a un cigarro. “Supimos de inmediato que teníamos algo especial”, comentó Clint.

El mensaje resultó ser la carta de un adolescente de 14 años llamado Peter R. Thompson, de West Newbury, Massachusetts, que en los años 70 cursaba una clase de oceanografía. “Por favor, envíe esto a la dirección en la parte inferior y diga dónde lo encontró, qué día y hora, y cómo”, se leía en la carta. Según la nota, el experimento había sido parte de una actividad de clase y el mensaje fue arrojado al océano desde un barco de la Guardia Costera en mayo de 1976.

Si bien el contenido puede parecer sencillo, Clint reflexionó sobre el impacto de semejante hallazgo. “Imaginen lo que significó para aquel niño de 14 años que envió este mensaje en los años 70”, señaló. “Los sueños de dónde viajaría, dónde podría terminar, quién podría encontrarlo… Bueno, después de quién sabe cuántos viajes alrededor del Atlántico Norte, terminó en esta isla, esperando ser encontrado”.

Los hermanos Buffington sabían que su siguiente misión era localizar a Peter Thompson. Publicaron un video en TikTok sobre el hallazgo, con la esperanza de ayudar a encontrarlo; el video pronto se hizo viral, alcanzando más de un millón de visitas. Sin embargo, un reportero de una televisión estadounidense ya había contactado a Thompson antes que ellos, logrando conectar a ambas partes.

Thompson confesó que no recordaba haber escrito la carta, pero sí tenía vagos recuerdos de la clase de oceanografía. “No podía recordar el experimento, ni preparar la botella ni nada”, admitió el hombre, que añadió que “fue un poco frustrante no poder recordarlo”. Sin embargo, encontrar su mensaje cuatro décadas después lo llenó de asombro. “Me ha llevado de vuelta a cuando tenía 14 años y pensaba en la escuela en ese entonces, en mi vida y en cuánto han cambiado las cosas en 50 años”, expresó.

Para Evan, esta experiencia fue como una “montaña rusa”. “Desde la perspectiva de un playero, es como un sueño máximo ser parte de algo como esto”, dijo. Los hermanos esperan que esta experiencia no solo haya conectado dos épocas, sino también que inspire a otros a perseguir la curiosidad y el asombro que pueden surgir en una simple caminata por la playa.