Manuel Benítez ‘El Cordobés’, en su momento más feliz: “Estoy aprendiendo a leer y escribir”

El padre del extorero Manuel Díaz González ‘El Cordobés’ se encuentra en su mejor momento, cuando está a punto de cumplir los 89 años

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Manuel Benitez 'El Cordobés' en
Manuel Benitez 'El Cordobés' en una imagen de archivo. (Europa Press)

Son, todavía, muchas las personas en España que aún no saben leer y escribir. El trabajo desde edades tempranas y el poco impulso que tenía la educación en las épocas anteriores, así como la dura rutina y el bajo nivel de vida obligaban a los jóvenes a comenzar a trabajar pronto, y la educación que recibían era pobre e insuficiente. Ahora, aún recordando el sufrimiento y la lucha constante que tuvieron que llevar a cabo, muchas personas mayores se animan a aprender a leer, escribir y expresarse mejor, aun teniendo en cuenta su avanzada edad.

Según la UNESCO, todavía quedan en el mundo 750 millones de personas que no saben leer ni escribir. Este es un dato muy llamativo que hace replantearse, dentro de lo malo, la suerte que ha tenido España en cuanto a la alfabetización en los últimos años. Actualmente, la tasa de alfabetización española, según los últimos datos de 2023, es del 98′5% de la población y, aunque el analfabetismo ha desaparecido prácticamente en los últimos 60 años, ya que en 1960 la tasa era del 15%, aún hay más de medio millón de españoles que todavía no saben leer ni escribir.

Verónica, de 72 años, está
Verónica, de 72 años, está aprendiendo a leer y escribir. (Guillermo Martínez)

Manuel Benítez ‘El Cordobés’: torero de éxito internacional y padre de otro gran torero

Este problema social y educativo ha afectado durante muchos años a personas de toda índole social, independientemente de su profesión o su nivel socioeconómico. Aunque, en origen, el analfabetismo está asociado con las familias de pocos recursos, a medida que los tiempos cambian y las personas que no han recibido una educación crecen, dentro de lo posible está más en su poder la decisión de intentar aprender a leer o escribir. Las personas con más posibilidades económicas han optado normalmente por obtener una educación, como base de un futuro próspero, pero también hay casos en los que, por mucho reconocimiento y éxitos que se hayan cosechado, se llega a la edad anciana con una cuenta pendiente.

Este es el caso de Manuel Benítez ‘El Cordobés’. El afamado torero español fue considerado uno de los mayores exponentes de la tauromaquia a nivel internacional, y fue una verdadera sensación en la década de los 60. Nacido en Palma del Río y de origen humilde, fue apodado ‘El Cordobés’, sobrenombre que heredaría su hijo, el también famoso extorero Manuel Díaz ‘El Cordobés’. El diestro, que también ha participado en numerosos programas de televisión, luchó durante toda su vida para iniciar una relación con su padre, hasta que este le reconoció como hijo legítimo en 2016, 48 años después. De hecho, Manuel Díaz inició su carrera en el mundo del toro cuando su madre, María Dolores Díaz, desveló que ‘El Cordobés’ era su verdadero padre. Entonces, Manuel Díaz quiso demostrarle a su padre que podía ser un gran torero como él.

Manuel Benítez 'El Cordobés' junto
Manuel Benítez 'El Cordobés' junto a su hijo, Manuel Díaz 'El Cordobés', en su retirada de los ruedos. (Europa Press)

Leer y escribir para “tener la mente bien”

Ahora, en una entrevista para la revista Semana, Manuel Benítez ‘El Cordobés’, a punto de cumplir los 89 años, declara vivir uno de los momentos más felices de su vida, sobre todo por haber dejado atrás los rencores y haber retomado la relación con su hijo: “Estoy muy contento. Ya no lo esperaba, pero siempre hay que tener fe y pensar en positivo”. Además, en el plano personal, también se siente realizado por estar aprendiendo “a leer y escribir bien”.

Manuel Benítez se decidió a contratar a una profesora, en su afán por ampliar horizontes y conocer a más personas: “Tengo que aprender, saber expresarme. Aún desconozco mucho y quiero mejorar“, declara a Semana el icono de la tauromaquia que, tras tres años aprendiendo a leer y a escribir, dice estar muy contento e incide en la importancia de “tener la mente bien”.