Ibex 35: cómo se eligen las empresas que forman parte del principal índice de la Bolsa española

El indicador recoge las principales compañías cotizadas en el mercado nacional, pero los nombres que forman parte de él no siempre son los mismos

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Paneles electrónicos muestran el valor
Paneles electrónicos muestran el valor del Ibex 35 en la Bolsa de Madrid. (Isabel Infantes/Reuters)

Las palabras “Ibex 35″ se han vuelto a poner de moda en los últimos días a causa de la montaña rusa generada en los mercados por la política de aranceles de Donald Trump. Sin embargo, la mayoría de los españoles probablemente no saben bien lo que significan: los inversores minoristas apenas controlan el 16,2% de las acciones españolas, según la última Encuesta Financiera de las Familias, elaborada por el Banco de España, y solo cerca del 12,3% de los hogares invierte en Bolsa.

Pese a ello, el porcentaje ha ido al alza en los últimos años, impulsado especialmente por los jóvenes. De acuerdo con los datos del informe El pulso del inversor minorista, elaborado por eToro a finales del año pasado, los minoristas españoles que invierten en empresas cotizadas locales han aumentado en siete puntos porcentuales. En este contexto —y ahora que las grandes caídas del mercado pueden ofrecer una oportunidad de comprar baratas algunas acciones—, conviene conocer cómo se forma el Ibex 35. Y es que, aunque el número 35 de este índice no cambia, sí lo hacen los nombres de las empresas que lo componen.

Pero lo primero es lo primero: ¿Qué es el Ibex 35? Este indicador, creado en 1992, agrupa a las 35 empresas más líquidas del mercado continuo, seleccionadas entre las que cotizan en las cuatro Bolsas españolas: Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia. Su función no se limita únicamente a reflejar la evolución del valor de estas empresas, sino que también actúa como indicador del estado general de la economía española. Sin embargo, la composición del Ibex 35 no es permanente. Al contrario, su estructura es dinámica y responde a criterios objetivos que permiten una representación lo más fiel posible del mercado español.

Cómo se eligen las empresas del Ibex

El índice se construye en función de dos variables principales: la liquidez de las acciones de las compañías y su capitalización bursátil ajustada por capital flotante. Esto implica que las empresas seleccionadas son aquellas cuyas acciones se negocian con mayor frecuencia y en mayor volumen, y cuyo valor de mercado supera ciertos umbrales establecidos de forma técnica.

La “generosidad” de las cotizadas en el Ibex 35 llena los bolsillos de los pequeños accionistas que invierten por dividendo.

Así, para que un valor sea elegible, su capitalización bursátil —es decir, el número total de acciones multiplicado por su precio— debe haber representado, como mínimo, el 0,30% de la capitalización media del Ibex 35 durante el periodo de control. Otro criterio fundamental es la liquidez del valor. La acción debe haber sido negociada en, al menos, un tercio de las sesiones bursátiles del periodo de control. Esto garantiza que se incluyen empresas cuyas acciones tienen una demanda constante por parte de inversores y operadores del mercado.

El organismo responsable de definir qué empresas ingresan o salen del Ibex 35 es el Comité Asesor Técnico (CAT), un órgano independiente de Bolsas y Mercados Españoles (BME), que se encarga de aplicar las reglas de selección. Este comité está compuesto por expertos del sector financiero y académico, sin vinculación directa con la gobernanza del administrador del índice. El CAT se reúne dos veces al año, en junio y diciembre, para realizar revisiones ordinarias del índice. Además, existen otras dos reuniones de seguimiento, en marzo y septiembre, que permiten evaluar posibles cambios intermedios sin que ello implique necesariamente una modificación en la composición del índice.

Un ejemplo reciente de cambio en el índice es la salida de Meliá Hotels y la entrada de Puig Brands, en una decisión tomada en julio de 2024. En este caso, la decisión se sustentó en que Meliá había dejado de cumplir el requisito de capitalización mínima.