El fraude de un millón de euros de los empleados de Leroy Merlin que revendieron productos: 26 investigados entre dependientes y vigilantes

Un sistema fraudulento que operó durante casi dos años en una tienda de Leroy Merlin, ubicada en el parque comercial Leonardo Da Vinci en Fiumicino, cerca de Roma, ha sido desmantelada por las autoridades italianas. En total, 26 personas, entre empleados y guardias de seguridad, están siendo investigadas por el robo y reventa de productos sustraídos del establecimiento, generando pérdidas estimadas en 1,2 millones de euros para la empresa francesa especializada en bricolaje.

El fraude, que involucraba desde climatizadores y mesas de jardín hasta grifería y baldosas, consistía en la sustracción sistemática de materiales de los almacenes de la tienda. Estos artículos eran luego revendidos a precios muy por debajo del valor oficial, utilizando el boca a boca como principal medio de comercialización, como ha informado el medio italiano Corriere della Sera. Las operaciones comenzaron en 2021 y se prolongaron hasta 2023, cuando los Carabinieri, que es como se denomina a la policía italiana, de la compañía Aeroporti, bajo la dirección de la Fiscalía de Civitavecchia, iniciaron una investigación formal.

El descubrimiento de este fruade se debió a uno de los responsables del punto de venta, quien, al detectar la falta de varios productos en los almacenes, presentó una denuncia ante las autoridades. Posteriormente, las investigaciones revelaron un panorama más amplio de actividades ilícitas, evidenciando que existía “un mercado paralelo” perfectamente estructurado.

Entre los principales involucrados se encuentran dos vigilantes que trabajaban para la empresa HSH Security Service. Como ha relatado el Corriere della Sera, Lukov Dimitar Gluharov, de 37 años, fue puesto bajo arresto domiciliario, mientras que a su compañero Simone Carmosino, de 38, se le impuso la prohibición de residir en el municipio de Fiumicino. Ambos enfrentan cargos por incumplimiento de sus funciones al permitir que los robos se llevaran a cabo, especialmente en los almacenes subterráneos destinados a la entrega de mercancía.

Las cámaras de vigilancia instaladas en el establecimiento desempeñaron un papel clave en la recopilación de pruebas. Las grabaciones captaron a varios de los implicados, incluyendo empleados, vigilantes y hasta algunos clientes que participaron en la adquisición de productos robados. Todos ellos han sido acusados de hurto agravado, y la Fiscalía de Civitavecchia notificó recientemente el cierre de la investigación a los 26 sospechosos.

El pasado mes de septiembre, como avanzó Roma Today, dos empleados de esta misma tienda fueron detenidos y 20 estaban siendo investigados. Según el medio, ambos eran responsables de la logística y gestión de mercancías en almacén, así como de servicios de seguridad y cometieron los robos entre enero de 2022 y agosto de 2023, aunque previamente uno de los encargados de la tienda ya había puesto una denuncia al ver que faltaban materiales. Finalmente, la cifra ha subido a 26 personas implicadas.

El esquema delictivo abarcó una amplia gama de productos, desde herramientas eléctricas y muebles para exteriores hasta sistemas de climatización, todos vendidos a precios que representaban aproximadamente la mitad de su valor original. Esta operación no solo causó pérdidas económicas significativas a Leroy Merlin, sino que también afectó la integridad de su sistema de seguridad interna.