Aunque Jennifer Aniston se convirtió en una de las actrices más reconocidas del mundo gracias a Friends, la estrella no pidió autos de lujo ni joyas costosas a su jefe cuando la fama tocó a su puerta.
La actriz de 56 años recordó la anécdota durante una entrevista en el pódcast Armchair Expert, conducido por Dax Shepard, donde habló sobre los primeros años de su carrera y cómo la fama no cambió sus prioridades.
“Le dije: ‘¿Podría darme una lavadora y una secadora, por favor?’. Y él lo escribió en una servilleta”, relató entre risas.
El “él” en cuestión era Warren Littlefield, entonces presidente de NBC, la cadena que transmitió la exitosa comedia entre 1994 y 2004. Según contó la ganadora del Emmy, su pedido ocurrió poco después de que Friends se convirtiera en un fenómeno televisivo.

“Escuchaba que muchos actores recibían autos o cosas costosas cuando eran contratados para una serie, y yo pensaba: ‘¿Dónde están mis regalos? ¿Qué es eso de los actor treats?’”, recordó.
Y añadió: “Warren me dijo: ‘¿Qué quieres tú?’ Yo me quedé pensando y le dije: ‘Bueno, necesito una lavadora y una secadora’”.
Jennifer Aniston confirmó que Littlefield cumplió su promesa y le envió los electrodomésticos, algo que marcó el inicio de su independencia personal. “Para mí, eso fue lo mejor. Lo necesitaba de verdad”, explicó.
La actriz, que dio vida a Rachel Green, una joven mimada que aprende a valerse por sí misma en Nueva York, aseguró que su petición reflejaba más quién era ella que su personaje.

“Rachel habría pedido un bolso de diseñador, pero yo solo quería poder lavar mi ropa. Podría haber pedido cualquier cosa. Pero en ese momento, lo que realmente necesitaba era poder lavar mis jeans”, bromeó.
Durante la charla, Aniston también rememoró cómo consiguió su papel en la icónica serie, tras varios intentos fallidos en otros proyectos televisivos.
“Había llegado hasta las últimas fases de audición de otros shows, pero ninguno funcionaba”, dijo.
Hasta que un día se encontró con Warren Littlefield en una gasolinera de Los Ángeles. “Creo que le di una foto o simplemente le rogué: ‘Por favor denme el papel, por favor’”, recordó. Poco después, el productor le ofreció el papel que cambiaría su vida.

De hecho en una entrevista reciente con Harper’s Bazaar, la actriz volvió a reflexionar sobre esa etapa que definió su carrera.
“Me formó completamente como persona. Era pura alegría. Esperaba con ansias cada día de trabajo, no podía esperar a verlos, a leer los guiones", confesó.
Y continuó: “Cada viernes grabábamos frente al público, y después de terminar, ya teníamos el nuevo libreto en el camerino. Estaba tan emocionada por saber qué iba a pasar como lo estaba el público”.

Cabe destacar que Friends no solo impulsó la carrera de Jennifer Aniston, sino que cimentó su reputación como una de las intérpretes más queridas de Hollywood.
Su papel como Rachel le valió un Emmy, un Globo de Oro y un premio SAG, además de abrirle las puertas a una exitosa trayectoria en cine y televisión, que continúa hoy con The Morning Show.
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