Tras las elecciones, y en un contexto de mayor certidumbre para los mercados, las empresas argentinas —con las energéticas a la cabeza— aceleraron el ritmo de emisiones de Obligaciones Negociables (ON) en dólares. El nuevo clima político y la expectativa de un marco macroeconómico más previsible impulsaron a varias compañías a aprovechar la ventana financiera.
Solo en las primeras dos semanas de noviembre, las colocaciones ya sumaron alrededor de USD 3.000 millones, un volumen significativo que refleja tanto la necesidad de financiamiento corporativo como el renovado apetito de los inversores por activos locales.
En este sentido, Invecq señaló: “Despejada la incertidumbre electoral y tras la fuerte compresión del riesgo país -en más de 500 puntos básicos- se desató un boom de emisiones corporativas en el exterior, impulsado principalmente por el sector energético, que descomprime la tensión cambiaria”.
Según precisó la consultora, durante la administración Milei ya se había alcanzado un máximo previo de colocaciones de ON por USD 2.600 millones mensuales en octubre de 2024, pero en apenas las dos primeras semanas de noviembre las colocaciones ya rondaron los USD 3.000 millones, equivalente a todo lo emitido en 2022 y 2023 combinados.

“Cerca del 98% de las emisiones de noviembre correspondió a empresas de energía, que volvieron a financiarse a tasas en torno al 8% TNA y con plazos superiores a 10 años. Esto implica un crédito más profundo y estable que el observado en meses anteriores, en los que predominaban vencimientos más cortos de 2 años en promedio”, explicaron.
En la actualidad, las tasas corporativas se ubican menos de 2 puntos por debajo de lo que rinden los bonos soberanos -actualmente en torno a 9,9%- lo que sugiere que el riesgo país está empezando a normalizarse y que el Gobierno se acerca a recuperar acceso al financiamiento internacional, condición clave para rollear vencimientos y mejorar la sostenibilidad de la deuda.
En este contexto, las provincias también retomaron el camino hacia los mercados internacionales. La Ciudad de Buenos Aires anunció que la próxima semana buscará captar hasta USD 600 millones destinados a obras públicas y a la refinanciación de pasivos.
Con esta operación, se convierte en la segunda jurisdicción en regresar al mercado global de deuda, luego de que Córdoba lo hiciera a comienzos de este año con una colocación de USD 725 millones, a una tasa del 9,75% anual y a un plazo de siete años.

“A nivel cambiario, parte de estas emisiones también derivó en mayor oferta marginal de dólares, dado que algunas empresas optan por vender parte de los fondos en el mercado. Si bien no existe obligación de liquidar 100% en el MULC, este flujo adicional contribuyó a la baja semanal del tipo de cambio: el oficial (A3500) retrocedió 2,5% y el MEP se redujo más levemente en torno a 0,2%“, destacó Invecq.
La consultora 1816 apuntó en su último informe: “El resultado electoral del 26 de octubre activó un boom de emisión de bonos corporativos en el exterior, luego de varios meses de un mercado prácticamente cerrado para el crédito argentino. Aunque las empresas no están obligadas a liquidar todo lo recaudado, las nuevas emisiones podrían sumar dólares al mercado spot en el corto plazo”.
También, la consultora Ecolatina resaltó: “En lo que va del mes se emitieron USD 3.000 millones de Obligaciones Negociables denominadas en dólares, con USD 1.700 millones colocados tan sólo entre lunes y jueves de esta semana, y restando aún dos semanas para finalizar el mes".
“Para dimensionar, durante el cuarto trimestre del 2024 se emitieron USD 5.000 millones. Un punto importante es que esta emisión no implica que se liquidará en su totalidad en el MULC, sino que la potencial oferta estará sujeta a una serie obligaciones de las propias compañías (rollear deuda, por ejemplo) y sólo una porción será liquidada en el mercado de cambios”, agregó.
Por su parte, Wise Capital remarcó que con un riesgo país por debajo de los 600 puntos básicos, las emisiones de ONs de empresas comenzaron a aflorar “ayudadas por las expectativas de paz cambiaria y enmarcadas en un ambiente de optimismo por los activos argentinos”.
Los casos más llamativos fueron YPF y Tecpetrol con emisiones de aproximadamente USD 500 millones y USD 750 millones, respectivamente. Mercado Pago también hizo una colocación al igual que Arcos, Pampa y Banco Comafi. Otros, como Banco Patagonia, Galicia y TGS alistan emisiones.
“Estos bonos corporativos se han mostrado resilientes en épocas de volatilidad y ofrecen rendimientos en dólares atractivos (entre un 6,5% y 8% anual aprox)”, consideraron.
El presidente Javier Milei había asegurado que “las colocaciones privadas muestran que Argentina está más cerca de salir al mercado para refinanciar su deuda. Hay un montón de colocaciones privadas que se están haciendo a una tasa promedio del 8,5% y a 12 años".
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