Cuáles son los nuevos trámites que hay que hacer para vender un auto usado

El Gobierno de Javier Milei introdujo modificaciones en los trámites requeridos para la transferencia de autos usados en Argentina. La eliminación de ciertos requisitos y la implementación de sistemas digitales buscan agilizar el proceso y reducir la burocracia. Entre las principales medidas, se destaca la supresión del libre deuda de patentes y multas, un documento que anteriormente era obligatorio para concretar la venta de un vehículo.

La decisión forma parte de una serie de cambios en el sistema de registración automotor, que incluye el desarrollo del Registro Único Nacional Automotor (RUNA) y del Registro Único Virtual (RUV). Estas plataformas digitales permiten que las concesionarias realicen inscripciones sin necesidad de acudir a los Registros del Automotor, un esquema que hasta el momento solo está habilitado para motocicletas.

Hasta la implementación de las nuevas normas, cualquier persona que quisiera vender un auto usado debía presentar un certificado de libre deuda de patentes y multas. Este documento servía para demostrar que el vehículo no tenía obligaciones impositivas pendientes. Con la reciente modificación, ya no es obligatorio para completar la transferencia de un automóvil.

El cambio implica que las deudas asociadas al vehículo deben resolverse entre comprador y vendedor sin que interfieran en el trámite de transferencia. Es decir, una persona puede adquirir un auto con multas impagas o impuestos adeudados y asumir la responsabilidad de regularizarlos posteriormente.

Esta medida se enmarca dentro del plan de digitalización del sistema registral. En ese contexto, el Gobierno también anunció el cierre de más de 150 registros automotores, lo que forma parte de una estrategia para disminuir costos administrativos y simplificar las gestiones.

Además de la eliminación del libre deuda, el nuevo esquema establece otros ajustes en la documentación necesaria para vender un auto usado. Ahora, los vendedores deben asegurarse de contar con los siguientes documentos actualizados:

• Título de propiedad del vehículo
• Cédula verde, que tras las modificaciones recientes ya no tiene fecha de vencimiento
• Formulario 08, necesario para concretar la transferencia

El Formulario 08 sigue siendo el documento central del trámite. Debe completarse con los datos del comprador y del vendedor y certificarse ante un escribano, un funcionario del registro o mediante los canales digitales habilitados.

La extensión de la validez de la cédula verde elimina la necesidad de emitir una nueva si el propietario desea vender el vehículo, lo que anteriormente generaba demoras en los registros.

En paralelo con la simplificación de trámites para autos usados, el Gobierno lanzó el Registro Único Virtual (RUV), una plataforma que permite a los concesionarios inscribir vehículos cero kilómetro sin necesidad de acudir a un Registro del Automotor.

El sistema comenzó a operar el 19 de febrero de 2025 y en su primera etapa está habilitado únicamente para motocicletas. Sin embargo, se prevé que en el futuro también se extienda a autos y camionetas.

Una de las principales modificaciones vinculadas al RUV fue la eliminación del monto mínimo arancelario para la inscripción de motocicletas, automóviles y maquinaria agrícola. Hasta la corrección implementada mediante la Resolución 89/2025, los costos mínimos en el sistema digital eran superiores a los que se pagaban en los Registros del Automotor tradicionales.

Previo a la corrección, el monto mínimo de inscripción en el RUNA era de $30.000 para motos y $180.000 para automóviles, mientras que en los registros convencionales se pagaban $8.500 para motos, $15.800 para autos nacionales y $21.300 para autos importados. Con la nueva modificación, el arancel del 0,8% sobre el valor del vehículo se aplicará en todos los casos, asegurando que la inscripción digital sea más barata que en los registros tradicionales, donde sigue siendo del 1% del valor del automóvil.

El beneficio inmediato de la eliminación del monto mínimo afecta principalmente a los compradores de motocicletas de baja cilindrada, como las de 110 cm³, que tienen un valor de entre $1.500.000 y $2.500.000. Antes de la modificación, inscribirlas por el sistema digital costaba $30.000, mientras que hacerlo en un Registro del Automotor tenía un costo de entre $15.000 y $25.000.

Con la aplicación del nuevo esquema, el trámite en el RUV se abarata, ya que ahora el costo de inscripción equivale al 0,8% del precio del vehículo. Para una moto de $1.500.000, el arancel será $12.000, mientras que para una de $2.500.000, ascenderá a $20.000.

Los concesionarios que deseen operar en el RUV deben completar un trámite de inscripción ante la Dirección Nacional de Registros de la Propiedad Automotor (DNRPA). Para ello, deben presentar la documentación requerida y designar representantes con firma digital. Una vez aprobada la solicitud, se les otorgan usuarios y contraseñas para operar en la plataforma.

El sistema permite que, al momento de adquirir un vehículo, el comprador pueda realizar su inscripción en la misma concesionaria y retirarlo con la cédula verde digital, el título de propiedad y las chapas patente.

Si bien el RUV aún no está disponible para autos, se espera que en el futuro se amplíe a todas las categorías de vehículos cero kilómetro.