El contundente ultimátum del jefe de Williams a Carlos Sainz, el reemplazante de Colapinto en la escudería

La temporada de la Fórmula 1 está siendo muy exigente para muchos pilotos y escuderías. A pocos días del reinicio de la competición en el circuito de Spa-Francorchamps, el jefe de equipo James Vowles ha lanzado un mensaje contundente a Carlos Sainz: los resultados deben llegar de inmediato. El piloto español, que llegó a la escudería británica como una apuesta de experiencia y talento, enfrenta ahora la exigencia pública de su propio equipo tras una primera mitad de temporada marcada por el bajo rendimiento y los errores en pista. El contraste con su compañero Alexander Albon, quien ha sumado más del triple de puntos, acentúa la presión sobre Sainz en un momento clave del campeonato.

Sainz aterrizó en Williams con la expectativa de aportar un salto de calidad. Sin embargo, la adaptación al monoplaza y al entorno del equipo no ha resultado sencilla. El ibérico, de 30 años, quien reemplazó a Franco Colapinto en la escudería, no ha logrado plasmar en resultados la confianza depositada en él. Incluso ha quedado en peor posición que Colapinto —a quien sustituyó— en las sesiones de clasificación, lo que ha generado dudas sobre su capacidad para liderar el proyecto de Williams, luego de haber probado sus cualidades en Ferrari.

La situación de Sainz ha llevado a James Vowles, jefe de equipo de Williams, a pronunciarse de manera tajante sobre el futuro inmediato del piloto español.

“Con Carlos, creo que no dimos lo mejor de nosotros este año. Y es una combinación de factores. Cometió errores en la pista. Cometió los mismos errores que nosotros. Hubo accidentes. Fue una combinación de factores”, explicó el directivo británico.

Vowles fue aún más explícito al marcar el inicio de una nueva etapa tras la pausa de la temporada: “Para mí, se trata de poner límites y avanzar desde Spa. Tenemos varias carreras muy buenas por delante. Se trata de lograr el resultado que esperamos del coche, entender por qué no aprovechamos al máximo la clasificación, centrarnos en esos puntos y obtener el mejor rendimiento posible”. El mensaje deja claro que la paciencia en Williams se agota y que el margen de error para Sainz se ha reducido al mínimo.

El jefe de equipo también dirigió un mensaje directo al piloto español: “Para Carlos, se trata de conseguir los resultados que sé que somos capaces de conseguir juntos, algo que no hemos conseguido este año”.

El contraste entre Carlos Sainz y su compañero Alexander Albon es uno de los factores que más presión añade al piloto español. El europeo ocupa la decimoquinta posición en el Campeonato de Pilotos con solo 13 puntos tras las primeras 12 carreras de la temporada. En ese mismo periodo, Albon ha sumado 46 unidades y se ubica octavo en la clasificación general.

El Gran Premio de Bélgica en Spa-Francorchamps se presenta como un momento decisivo tanto para Carlos Sainz como para Williams. Tras dos fines de semana sin actividad, la Fórmula 1 retoma la acción con la decimotercera cita del calendario, que marca el inicio de la segunda mitad de la temporada.

La llegada del hijo de la leyenda del rally a Williams le quitó posibilidades a Colapinto, quien se marchó cedido a Alpine por cinco temporadas, a cambio de una cifra que habría alcanzado los 20 millones de dólares. No obstante, Sainz se mantiene en el ojo de la tormenta. Y el propio Vowles, el impulsor del argentino en la Máxima -fue quien decidió promoverlo- hizo público el ultimátum.

El Gran Premio de Bélgica en Spa-Francorchamps dará inicio a la actividad el viernes 25 de julio, con la única sesión de práctica libre programada para las 7:30 (hora de Argentina). Más tarde, a las 11:30, se celebrará el Sprint Shootout, que definirá la parrilla para la carrera corta.

El sábado 26 de julio, la jornada comenzará a las 7:00 con la carrera sprint, mientras que la sesión de clasificación principal (qualy) se disputará a partir de las 11:00. Finalmente, el domingo 27 de julio, la carrera principal del Gran Premio de Bélgica arrancará a las 10:00, completando así el regreso de la Fórmula 1 tras la pausa de mitad de temporada.