
El Museo Moderno presenta la muestra Martín Legón: Solo las piedras recuerdan, en la que el artista interroga al presente de la experiencia humana y se pregunta cómo nos relacionamos con las imágenes, cómo construimos el saber y en qué lugar remoto quedará la marca de lo humano tal como lo conocimos hasta el presente.
La exhibición pone en tensión la educación formal con fuerte impronta del gesto humano y el lenguaje aún desconocido de la inteligencia artificial. A partir de estos opuestos, el montaje genera interrogantes sobre el futuro de la humanidad. A partir de esta premisa, Martín Legón (Buenos Aires, 1978) desarrolla un proyecto que toma como punto de partida la influencia que tuvieron la escuela, los manuales escolares y los libros de divulgación en el arte de los años 60.

A través de una sucesión de ejercicios conceptuales guiados por las operaciones del montaje y el collage, el artista volverá una vez más sobre la noción de “escuelismo”, desarrollada por el crítico Ricardo Martín-Crosa y el historiador del arte Marcelo Pacheco, para exponer el trasfondo pedagógico oculto tras algunas de las obras más emblemáticas del canon argentino, señalan desde el museo.
En la sala G del segundo piso del Moderno se desplegarán colecciones de manuales escolares, como el Carrusel, de Editorial Kapelusz, fotografías de los años 70, juegos manuales de cubos, y una gigantografía sobre cómo hacer muñecos de trapo. Estos objetos entran en fricción con las imágenes de un personaje diseñado por el artista mediante IA, dibujos animados superpuestos a una conferencia, una serie de heladeras exhibidoras que contienen frases de falso bienestar, como “Be cool” o conversaciones en relación con el chat GPT, e instrucciones de cómo hacer muñecos de trapo con IA.

Martín Legón, uno de los artistas argentinos más jóvenes que participaron de la Bienal de San Pablo en 2012, plantea dos ejes posibles de lectura de la exposición, por una parte, cómo y cuáles son las formas de la memoria y, por otra, cómo podemos enseñarnos entre nosotros a desconfiar de las imágenes.
Francisco Lemus, curador de la muestra y jefe del departamento curatorial del Museo Moderno, señala que se trata de un proyecto de largo aliento que en el transcurso de estos años creció y se volvió más sólido en su poética y en sus mensajes cifrados, pero también en su posicionamiento humanista, que aún sigue apostando por el gesto de lo manual. En esta exposición, señala, Martín Legón cruza dos universos ajenos entre sí: el “escuelismo” y la inteligencia artificial. “A través del montaje, Legón tensiona imágenes diferentes –de la historia del arte, las ciencias, la enseñanza y la cultural visual– y genera un caleidoscopio de obras que nos provoca incertidumbre o, mejor dicho, una pregunta inquietante sobre el futuro”, remarca.
La exposición, que forma parte del programa 2024 del Museo Moderno, Arte es educación, podrá visitarse hasta marzo de 2025.

Martín Legón (Buenos Aires, 1978) varía en el soporte de sus obras, recurriendo a instalaciones, dibujos, pinturas y a procedimientos como la recuperación de colecciones fotográficas. En su producción se interesa por enlazar de forma poética textos y citas de la sociología, la literatura y la historia del arte. Así como sucede con la yuxtaposición de un montaje de atracciones cinematográfico, las referencias que elige despliegan cadenas de enunciados críticos y conceptuales. En los últimos años, Legón revisita temas como las estructuras de trabajo, la producción de imágenes y el lugar del artista en la sociedad actual.
Martín Legón expuso en numerosas exhibiciones individuales nacionales e internacionales, entre ellas La seducción de los inocentes (Ángels, Barcelona, 2018), Quatrenial Shanzhai (Museo Genaro Pérez, Córdoba, 2018), Nuevos pensamientos imbéciles (Barro, Buenos Aires, 2017), Las fuerzas productivas (Barro, Buenos Aires, 2015), La vuelta al mundo… desarrollada por Inés Katzenstein y Sofía Hernández Chong Cuy entre el Departamento de Arte de la Universidad Torcuato Di Tella y la Colección Patricia Phelps de Cisneros (Buenos Aires, 2014), por mencionara solo algunas. Es uno de los artistas argentinos más jóvenes en haber participado de la Bienal de San Pablo en la Edición XXX La Inminencia de las Poéticas, curada por Luis Pérez Oramas (2012). En estos últimos años se publicaron sus ensayos La naturaleza del artificio (Big Sur zine, 2012), El Test del Hombre bajo la lluvia (Arta Ediciones, 2012), Apuntes a la Colección Globus (Big Sur Books, 2016) y Maleza (Editorial Iván Rosado, 2016). Su obra forma parte del acervo del Centro de Arte Dos de Mayo (CA2M), Móstoles, España; del Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson de San Juan y del Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro), Argentina. Vive y trabaja en Buenos Aires.
* Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Av. San Juan 350, C. A. B. A. Entrada Gratuita
Últimas Noticias
Programa de la Feria del Libro 2025: todas las actividades del fin de semana del 26 y 27 de abril
Talleres, presentaciones y espacios para todas las edades en un evento que celebra la diversidad cultural

Qué hacer con los niños en la Feria del Libro 2025: actividades infantiles para disfrutar en familia
La propuesta ofrece una programación con narraciones, talleres, juegos y espectáculos gratuitos para chicos todos los días, desde los 2 hasta los 12 años
Las manos de Hamlet toman las calles de Kharkiv: cómo es hacer arte en las ruinas de la guerra
Retrato del artista ucraniano que desde hace años usa como lienzo su ciudad, devastada por los bombardeos rusos. Lo comparan con Banksy y asegura que, para él, “las calles son la mejor galería posible”

Ecocrítica literaria, una nueva forma de leer la naturaleza en los libros
La relación entre la literatura y el medio ambiente se desarrolla a través de los libros: desde “Walden” de Henry David Thoreau hasta “Distancia de rescate” de Samanta Schweblin

“Todos los tiempos son buenos para ser romántico”: amor y literatura, según Megan Maxwell
La bestseller española vino a la Argentina a presentar su nueva novela en la Feria del Libro y conversó con Infobae Cultura. “Muchas veces me preguntan si escribo para mujeres; no, yo escribo para personas”, dice
