Grupos extranjeros estarían detrás de los supuestos amaños en Boyacá Chicó que provocaron amenazas: “Son los monstruos de las apuestas”

El escándalo por amaños en los partidos del fútbol colombiano no para. En distintos equipos se han identificado a jugadores involucrados en esos casos y las autoridades investigan las personas o grupos que lideran esa red de apuestas irregulares que afectan a la rama profesional.

Tras lo ocurrido en Boyacá Chicó, Eduardo Pimentel entregó detalles sobre los jugadores apartados por sospechas de amaño en el encuentro frente a Santa Fe, que provocó después amenazas de muerte a otros futbolistas en el club que, al parecer, dieron información sobre el problema.

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Por el momento, la Fiscalía está investigando lo que pasó con los Ajedrezados, que están comprometidos en la tabla del descenso y sin opciones de entrar a los cuadrangulares semifinales, además de que tuvo tres entrenadores en el primer semestre y el más reciente es Flabio Torres, que apenas lleva un partido y afronta un lío de grandes proporciones.

En entrevista con la emisora Antena 2, el máximo accionista del Boyacá Chicó explicó que las sospechas de amaños en el equipo venían desde mucho antes del viaje a Bogotá, en el que descubrió posteriormente que durante el partido se dieron cosas que aclararon todo.

“Lo que manifiestan ellos es que les dañaron lo del partido de Santa Fe que tenían organizado. No lo hablamos antes del partido porque iban a pensar que lo usábamos para presionar y lo iba a malinterpretar”, mencionó Eduardo Pimentel a la emisora.

El directivo explicó que la irregularidad que vio fueron los 17 tiros de esquina, de los cuales, “unos cuatro o cinco hayan sido adrede. Toda esta situación emerge de un estudio y al día siguiente nos damos de cuenta de que le pegamos porque llamaron a un jugador y le dijeron que era el sapo”.

“Son apuestas de denuncias anteriores y de investigaciones que hicimos hace 10 o 15 años que venían provenientes de oriente, China, Japón y Corea. Ellos son los monstruos de las apuestas y los que, por intermedio de sus conexiones, las manejan pasando por México”, mencionó Pimentel, con respecto a de dónde vendrían los amaños en el fútbol colombiano.

El máximo accionista añadió que “no es un tema de apuestas que emerge directamente en Colombia, que bien lo puede ser, lo que tenemos es que viene del exterior, del oriente del mundo, en donde son los monstruos sobre el tema. Ya denunciamos, lo pasamos a la Asociación de Futbolistas, a la Federación Colombiana de Fútbol y a la Fiscalía, pero cerraron ese caso hace dos años y nunca nos llamaron”.

Eduardo Pimentel reveló que las sospechas de irregularidades relacionadas con apuestas ilegales venían desde la época del técnico paraguayo Roberto Torres, pero al momento de su salida empezó a investigar y aseguró que “me di cuenta de muchas situaciones tras conversar con personas y jugadores”

“Después de algunas investigaciones que realicé, entendí que no eran aceptables algunos errores que eran muy evidentes. Revisé el tema y nos encontramos con lo que denunciamos”, mencionó el máximo accionista, que mostró preocupación por las llamadas a sus deportistas.

“Nuestros jugadores, desde hace cuatro días, han recibido llamadas de amenazas de muerte provenientes de presuntamente el mismo número 3159360079, luego de que un jugador nos informara oportunamente que desde dicho número fueron contactados con el propósito de ofrecerles arreglar el resultado del partido jugado el fin de semana pasado”, dijo.

Sobre dichos mensajes intimidatorios, Pimentel agregó que “cuando se tomaron las determinaciones, ya uno o dos jugadores estaban amenazados por un grupo que lo llamó y le dijo ‘usted era el sapo y va a pagar lo que hizo‘. Obviamente, le dimos en el punto donde era y nos dejó atónitos en una problemática que no solo es del Boyacá Chicó”.