De la alegría a la decepción en Barranquilla: Paraguay aprovechó inseguridades de Colombia y así fue el empate 2-2 por eliminatorias

La selección Colombia volvió a complicarse en las eliminatorias al mundial de Estados Unidos, México y Canadá en 2026, que pese a jugar en el estadio Metropolitano de Barranquilla a reventar, demostró que no se reencuentra con el juego que la llevó a la final de la Copa América.

El combinado cafetero empató 2-2 contra Paraguay, que pasó de un 2-0 igualar las acciones con las anotaciones de Junior Alonso y el golazo de Julio Enciso, mientras que Luis Díaz y Jhon Jáder Durán habría marcado para los locales antes de los 15 minutos de partido.

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El equipo nacional volverá al ruedo de las eliminatorias en junio de 2025, cuando visite a Perú en el estadio Metropolitano de Barranquilla, y luego a Argentina, ya clasificada, en Buenos Aires, con el único objetivo de sumar, al menos, cuatro puntos para asegurar el cupo al mundial.

En medio de las críticas por la mala presentación en Brasil, en la que se perdió el empate en los últimos minutos con un gol de Vinicius Junior, la Tricolor de desahogó con una anotación al momento de cumplirse apenas 37 segundos del encuentro, con el que levantó al público en el Metro.

El atacante del Liverpool, luego de una recuperación de Jhon Jáder Durán y el pase de Jhon Arias, enganchó en el área a Fabián Valbuena y disparó con fuerza al palo derecho, para abrir el marcador y empezar una marcha imparable del jugador, con la que nadie pudo frenarlo.

A los 13 minutos, nuevamente Luis Díaz apareció, esta vez luego de un pase de James Rodríguez para iniciar el contragolpe, habilitó a Durán y el delantero del Al Nassr, con disparo de pierna derecha, mandó el esférico al fondo de la red, con la que el técnico Néstor Lorenzo se ilusionaba con una victoria.

Sin embargo, las cosas no se darían como lo esperaba el combinado cafetero, pues a partir de los 20 minutos que Paraguay empezó a reaccionar, encontró los espacios en la defensa y los errores tanto de Richard Ríos como de Jefferson Lerma, que en el medio campo provocaron estragos.

Antes de terminar el primer tiempo, Junior Alonso consiguió el descuento con un cabezazo en el palo izquierdo, sin marcaje alguno y que generó preocupación en el combinado nacional al momento de entrar al camerino, porque las cosas se complicaban cada vez más.

En la segunda parte, Colombia trató de meterle nuevamente la intensidad del primer tiempo, pero las cosas no funcionaban con Luis Díaz y Jhon Arias, además de que James Rodríguez no se le vio fino con los pases, lo que fue el inicio de un momento muy difícil para el local.

A los 62 minutos, Julio Enciso apareció de la nada para mandar un zapatazo fuerte desde afuera del área, que entró por el ángulo superior izquierdo de la portería de Camilo Vargas y cambió los cánticos por murmullos, la alegría por tristeza y las caras largas aparecieron nuevamente en Colombia.

Una luz de esperanza apareció con la revisión del VAR, por un supuesto fuera de lugar para Junior Alonso, pero el juez Facundo Tello, por interpretación, decidió que estaba habilitado porque dos defensores tocaron el esférico antes de que llegara a los pies del paraguayo.

Desde ese momento, Lorenzo buscó de cualquier manera resolver el encuentro, con los cambios de Jaminton Campaz y Yerry Mina, para el juego aéreo, pero nada le estaba funcionando y el tiempo se convertía en el segundo enemigo, junto con los contragolpes de los Guaraníes.

Con el final de partido, la situación del combinado nacional se puso peor de lo esperado, ya que completó cuatro partidos sin ganar, un punto sumado de 12 posibles y ocho goles en contra, que retomó los comentarios sobre el juego defensivo de la selección Colombia y una posible mala elección en la convocatoria.