Revelaron video de líderes religioso asesinados en Guaviare que fueron obligados a cavar su propia tumba

Una grabación recuperada de un celular incautado a alias Morocho permitió a la Fiscalía reconstruir el trayecto final de ocho líderes y feligreses antes de ser asesinados

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El video hallado en el
El video hallado en el celular de alias Morocho revela los últimos momentos de los ocho líderes religiosos asesinados en Guaviare - crédito Fiscalía/Captura de video

La revelación de nuevas pruebas por parte de la Fiscalía General de la Nación ha permitido avanzar en la investigación sobre la muerte de ocho líderes y feligreses religiosos en la zona rural de Calamar, en el departamento de Guaviare, atribuidos al frente primero Armando Ríos de las disidencias de las Farc.

Entre las evidencias presentadas por el ente acusador, se destaca una grabación hallada en el dispositivo móvil de Excehomo Pabón Amaya, conocico como alias Morocho, que se encuentra judicializado por su presunta participación en estos crímenes.

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El material audiovisual muestra el último recorrido fluvial de las víctimas.

En el video, captado durante el trayecto por el río Itilla, se distingue únicamente el sonido persistente del motor de la embarcación, mientras los líderes y feligreses, habitantes de Pueblo Seco, viajan hacia el lugar al que habían sido citados por las disidencias.

Las víctimas, líderes y feligreses de Pueblo Seco, fueron vistas por última vez navegando por el río Itilla antes de ser asesinadas - crédito villavicencioprimero/Instagram

Según la Fiscalía, alias Morocho habría sido el encargado de contactar, engañar y trasladar a las víctimas en la embarcación antes de que fueran halladas sin vida.

El video fue recuperado durante la captura de este individuo, quien ya ha sido judicializado por su presunta participación en los hechos.

De acuerdo con la secuencia de hechos reconstruida por la autoridad judicial, el caso tuvo origen a comienzos de abril de 2025. El 4 de abril, dos de las víctimas recibieron una convocatoria para presentarse en la vereda Puerto Nuevo.

Tres días más tarde, el 7 de abril, fueron citadas otras seis personas, quienes debían asistir supuestamente para ser “interrogadas”. La razón formal para llamarlas obedecía a la intención de verificar si existía o no una red del ELN operando en la región.

Los ocho cuerpos corresponden a
Los ocho cuerpos corresponden a e Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hérnandez, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón - crédito Fiscalía General de la Nación

Las pruebas obtenidas indicarían que alias Morocho, considerado integrante de las disidencias, habría desempeñado un papel clave al trasladar a los líderes religiosos en la embarcación antes de su hallazgo sin vida.

La Fiscalía sostiene que el registro audiovisual refuerza el relato sobre la forma en que los cuerpos de seguridad irregulares contactaron, engañaron y condujeron a las víctimas hasta el escenario de los hechos.

Al referirse a las citaciones, el ente investigador detalló: “La citación se originó bajo el pretexto de verificar la posible presencia o conformación de una red del ELN en la zona”. Estos elementos se suman al acervo probatorio presentado en la imputación formal contra alias Morocho, quien permanece bajo custodia por su implicación directa en el asesinato de los feligreses y dirigentes sociales del Guaviare.

Detalles de la masacre

El informe emitido el martes 1 de julio de 2025 por la Fiscalía General de la Nación reveló el hallazgo de una fosa común en una zona rural del municipio de Calamar, en el departamento de Guaviare, donde fueron exhumados los cuerpos de ocho líderes sociales y religiosos. La entidad atribuyó la recuperación de los restos a un operativo conjunto realizado junto a la Fuerza de Despliegue Rápido n.º 1 del Ejército Nacional.

Los ocho cuerpos corresponden a
Los ocho cuerpos corresponden a e Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hérnandez, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón - crédito Fiscalía General de la Nación

La investigación indica que la desaparición de las víctimas comenzó el cuatro de abril de 2025, fecha en la que dos de los ahora fallecidos fueron requeridos por presuntos miembros de la estructura Armando Ríos, vinculada a las disidencias de las FARC y bajo el mando de alias Iván Mordisco. Posteriormente, el seis de abril, otros seis líderes recibieron citaciones similares en circunstancias que el ente investigador describe como conexas.

Según los hallazgos preliminares, la hipótesis principal sugiere que los responsables del crimen sospechaban que las víctimas pretendían conformar una célula del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la región. “Con el acompañamiento de la Fuerza de Despliegue Rápido #1 del Ejército Nacional, la Fiscalía General de la Nación recuperó los cuerpos de ocho líderes sociales y religiosos hallados en una fosa común en zona rural de (el municipio de) Calamar”, detalló la Fiscalía en su pronunciamiento oficial.

Entre las personas asesinadas y enterradas en la fosa común figuran Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hernández, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón.