Pablo Escobar y el M-19, un vínculo que incluyó la espada de Bolívar y la toma del Palacio de Justicia

Familiares del capo han confirmado que el antioqueño ayudó económicamente al grupo guerrillero, que se desmovilizó en 1990

Guardar
Familiares del capo han indicado
Familiares del capo han indicado que el antioqueño tuvo cercanía con el grupo armado durante varios años - crédito Colprensa/EFE

Antes de que sus miembros pudieran participar en política y ser parte de la sociedad colombiana, el M-19 era un grupo guerrillero que protagonizó varios crímenes, algunos de lesa humanidad.

El más recordado es la toma del Palacio de Justicia, registrado entre el 6 y 7 de noviembre de 1985, en el que murieron más de 100 personas durante la acción guerrillera y la retoma por parte de las Fuerzas Militares.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel

A 40 años de este hecho, hay varios aspectos que siguen sin ser confirmados sobre la toma, principalmente la presunta participación de Pablo Escobar, líder del cartel de Medellín y uno de los narcotraficantes más peligrosos en la historia de Colombia.

A pesar de que exmilitantes del M-19 han negado que el capo hubiera financiado la toma del Palacio de Justicia, familiares de Pablo Escobar han indicado que el antioqueño tenía una relación cercana con comandantes de esta guerrilla.

El vínculo que comenzó por un secuestro

El cartel de Medellín fundó
El cartel de Medellín fundó el MAS para liberar a la hermana de los hermanos Ochoa - crédito Colprensa

En los 80, el M-19 realizaba secuestros extorsivos para financiar su actividad, siendo uno de ellos el de Marta Nieves Ochoa, hermana de Juan David, Jorge Luis y Fabio Ochoa, socios de Pablo Escobar en el cartel de Medellín.

Dejando a un lado la posibilidad de pagar por un rescate, la estructura criminal decidió conformar el MAS (Muerte a Secuestradores), con el que lograron liberar a la joven.

Precisamente, este hecho hizo que Pablo Escobar comenzará a tener cercanía con el M-19, puesto que uno de los sujetos que tenía en su poder a Marta Ochoa se ganó el respeto del capo.

En diálogo con Infobae Colombia, Nicolás Escobar, sobrino de Pablo Escobar, indicó que el sujeto fue obligado a cavar su propia tumba, y lejos de intentar ser liberado, comenzó a cumplir con la petición rápidamente, afirmando que deseaba ser asesinado para no tener que contar nada sobre sus comandantes.

Tras este episodio, Escobar le envió un mensaje a los jefes del individuo, líderes del grupo guerrillero, que terminaron asistiendo a reuniones con el capo antioqueño.

Familiares de Pablo Escobar indicaron
Familiares de Pablo Escobar indicaron que los socios del capo no sabían de la cercanía del antioqueño con el M-19 - crédito Infobae

La cercanía del criminal con el grupo armado fue tal, que después de colaborar económicamente en varias ocasiones, Escobar recibió como regalo la espada de Simón Bolívar, que había sido robada por el M-19 en 1974.

Esta historia fue confirmada por Juan Pablo Escobar, hijo de Pablo Escobar, que aseguró a Cambio que el objeto terminó en sus juguetes.

“Los detalles que recuerdo de ese artefacto son vagos porque estaba rodeado de docenas de juguetes; así que guardé la espada en mi habitación en la hacienda Nápoles. Con la espada de Bolívar ocurrió lo único que podía pasar con un adolescente que recibe un regalo como ese: terminó refundida por ahí, en alguna finca o apartamento. Le perdí el rastro porque no me importaba”.

Se afirma que en esta
Se afirma que en esta fotografía el hijo del capo tenía en su poder la espada de Bolívar - crédito Redes Sociales

Años más tarde, durante el proceso de paz que finalizó en 1990, el M-19 devolvió la espada de Bolívar; sin embargo, antes de ello le habrían pedido ayuda al narcotraficante para financiar la toma del Palacio de Justicia.

Al respecto, Nicolás Escobar indicó que el capo aceptó con la condición de que tendrían que quemar los informes y todo lo ligado a la aprobación de la extradición en Colombia como un mensaje simbólico de que él no terminaría preso en Estados Unidos.

Sin embargo, el sobrino del capo aseguró que Pablo Escobar no ordenó que asesinaran a nadie, sino que todo lo registrado al interior del Palacio de Justicia fue producto de un plan que se salió de control, tanto para el M-19, como para el Estado colombiano en su afán de recuperar el control del edificio.