Mujer brutalmente atacada a martillazos por su pareja contó su testimonio: “Pensé que iba a hacer un arreglo, pero ya tenía un martillazo en mi cabeza”

El testimonio de Fabiana Karina Rincón, sobreviviente de un brutal ataque por parte de su expareja, reveló lo grave que fue el violento ataque que le propinó su pareja sentimental en su domicilio, en la localidad de Fontibón, en las horas de la noche del lunes 22 de septiembre de 2025.

Después de haber pasado diez días en cuidados intensivos, Rincón relató cómo, tras celebrar su cumpleaños con amigas, fue sorprendida al regresar a su apartamento, donde recibió al menos veinte golpes con un martillo, de los cuales diecisiete fueron en el cráneo y tres en el rostro.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel

“Solo pasaba por mi mente el deseo de vivir. Sentía: ‘Dios mío, no voy a morir, voy a vivir, voy a vivir’”, expresó en un diálogo con Noticias Caracol.

El desenlace fue dramático —la joven cayó en coma y llegó a ser declarada con muerte cerebral en un primer hospital.

“Le quiero dar gracias a Dios, que es el que hace que esté hoy acá con esta segunda oportunidad de vida, porque sí, específicamente, estuve en coma. Me declararon en el primer hospital muerte cerebral, y en el segundo que podía quedar en coma indefinidamente. Hasta que llegó mi mamá. Llevaba dos días en coma y fue la voz de mi mamá la que escuché. Y al escucharla abrí los ojos. Esto fue un motivo de felicidad para el neurocirujano, el cual saltó y abrazó a mi mamá y le dijo: «Usted ha hecho un milagro». Y desde ese momento volví en sí“, dijo.

No obstante, ya está en un proceso de restauración, “en una casa familiar y, pues, estoy con toda la actitud para recuperarme después de todo lo ocurrido”, dijo.

Desde entonces se ha enfrentado a varias cirugías, incluyendo una de doce horas para reconstrucción facial y craneal, y sigue requiriendo múltiples procedimientos médicos para su recuperación.

La mujer narró que había salido con unas amigas a cenar. Dijo que, una vez llegó, se dirigió a su habitación.

“Me fui a empijamar. Inmediatamente, me quité el pantalón. Él ingresó y lo rompió completamente (el pantalón) y salió de la habitación. Se dirigió al baño social y logré ver de allá que estaba tomando el martillo, que estaba sobre la caja de herramientas, al lado de los alicates. Él entró y yo simplemente supuse que iba a hacer algún arreglo, algo”, narró la víctima.

Dijo que “entró, e inmediatamente, ya tenía un martillazo en mi cabeza y solamente pasaba por mi mente el deseo de vivir. Sentía: «Dios mío, no voy a morir, voy a vivir, voy a vivir». En eso recibí al menos cuatro martillazos más. Me tomó por detrás y me sellando en la cabeza. Me logré salir un poquito. Abrí la habitación de mi bebé y la vi dormir. Y desde allí ya no me acuerdo de nada".

En su relato, detalló que su hija de cinco años se encontraba dormida en otra habitación durante el ataque, afortunadamente sin percatarse del horror por el que atravesaba su madre.

“Le doy muchas gracias a Dios, porque si fue mi Dios que la mantuvo dormida así de profunda... Ella no tiene un sueño profundo así. Ella con cualquier ruido se despierta. Pero curiosamente ese día hasta el portero la bajó dormida”, relató, además de confirmar que la integridad física y emocional de la menor permanece intacta.

Según el testimonio, el agresor —su expareja, con quien solo mantenía contacto por la hija en común— fue capturado y permanece en prisión a la espera de una condena. Rincón expresó que su única preocupación es que la justicia actúe y se evite un vencimiento de términos que permita su liberación.

“Solo deseo que no vaya a haber un vencimiento de términos y que esta persona por alguna razón salga en libertad. Quiero que esté en prisión y eso me genera tranquilidad“, dijo.

Adicionalmente, la joven relató que, antes del atentado, había solicitado medidas de protección ante la Comisaría de Familia, sin recibir el respaldo esperado, frente a casos previos de violencia.

“Le pido a la Comisaría de Familia que escuche a las mujeres, porque yo fui hace un año pedido medida de protección y no me brindaron seguridad... No sentí un respaldo de la Comisaría de Familia real”, agregó.

En su mensaje a otras mujeres, Rincón advirtió sobre la necesidad de reconocer señales de agresividad y cambios en la actitud de sus parejas, haciendo un llamado directo a las instituciones.

“Cuando hay cambios drásticos... vienen con flores, vienen con canciones... No es de creer. Son alarmas para mí, porque yo las viví así. Entonces, mucho cuidado con esto. Y si ya tienen algún tipo de alarma, colocarla en conocimiento, que espero que, pues, también le presten atención en las entidades”, sumó.