Joven denuncia que fue víctima de un violento atraco en la calle 116, norte de Bogotá: una decisión inesperada lo salvó

En medio de la oscuridad y el peligro, el ciudadano de nombre Camilo se enfrentó a tres asaltantes y, gracias a una maniobra arriesgada, logró salvarse. Ahora advierte a los usuarios de scooters y bicicletas sobre los riesgos que se presentan en la zona

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El impactante testimonio de Camilo
El impactante testimonio de Camilo tras el robo de su scooter en la ciclorruta de la calle 116 en Bogotá - crédito @camilo_dez/TikTok

Un ciudadano fue víctima de un robo de scooter mientras transitaba por la ciclorruta de la calle 116 con Pepe Sierra en Bogotá.

De acuerdo con el testimonio del joven, tres hombres armados con cuchillo lo interceptaron en un tramo con escasa iluminación, lo que lo llevó a tomar una decisión desesperada para evitar un desenlace más grave.

El afectado, identificado como Camilo en sus redes sociales, logró escapar y advierte sobre la inseguridad en la zona, pidiendo a otros usuarios de scooters y bicicletas extremar precauciones.

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El incidente ocurrió cuando Camilo se dirigía a su domicilio por la ciclorruta mencionada, y al notar la presencia de tres individuos que caminaban en sentido contrario, percibió una actitud sospechosa.

La valiente reacción de Camilo
La valiente reacción de Camilo ante un asalto en la ciclorruta de la calle 116: así logró escapar de los ladrones - crédito @camilo_dez/TikTok

“Me robaron mi scooter en Bogotá. Iba por la ciclorruta y veo que hay tres manes que van caminando sentido opuesto hacia donde yo voy. Se me hizo muy raro. Y, bueno, los veía desde muy lejos y ya cuando estábamos bien cerca veo que los manes dejan de caminar, se quedan quietos y veo que les empezó a brillar la mano. Entonces dije: ‘Marica, me van a robar’. O sea, es con puñal, obviamente, con cuchillo”, relató.

Camilo comentó que uno de los asaltantes se ubicó frente a él para obligarlo a detenerse, mientras los otros dos se aproximaban por detrás, pero ante la inminencia del ataque, Camilo optó por embestir al agresor que bloqueaba su paso y lanzarse al suelo, maniobra que le permitió evitar un enfrentamiento directo.

“Lo que hacen es que intentan que yo me detenga, pero lo único que se me ocurre es chocarlo, o sea, literalmente lo choco y me lanzo al piso. Lo que pasa con esa vía, esa ciclorruta en Pepe Sierra, es que está en la mitad de la calle. Están las dos calzadas para carros y hay muchos árboles alrededor. Entonces no hay mucha visibilidad, no hay buena iluminación. Me imagino que esos malparidos aprovechan eso para robar ahí”, explicó el joven.

La ciclorruta de la calle 116, ubicada en medio de dos vías vehiculares, presenta condiciones de baja visibilidad y escasa iluminación, factores que, según la víctima, facilitan la acción de los delincuentes. Aun así, decidió actuar sin temor, con la esperanza de salir ileso, aunque los hechos no se desarrollaron como esperaba.

La valiente reacción de Camilo ante un asalto en la ciclorruta de la calle 116: así logró escapar de los ladrones - crédito @camilo_dez/TikTok

“Luego de tirarme, caigo al piso, me golpeo, y lo que veo es que los otros dos manes intentan como jalarme para robarme más cosas. Me imagino que querían llevarse todo. Yo lo que hago es tirarme a la calle de los carros, o sea, ruedo; ni siquiera me paro, sino que ruedo y me lanzo a la vía. Caigo y los carros empiezan a frenar, a pitar, porque, pues obviamente, me tiré a la calle, marica, como una salchicha”, relató Camilo.

Tras caer al pavimento, varios vehículos intentaron ayudarlo haciendo sonar sus pitos, pero los agresores continuaron la persecución. Camilo logró incorporarse y corrió hasta otra calle, donde encontró a dos mujeres que paseaban a sus perros y pidió auxilio a gritos.

“Los manes, no contentos con eso, me persiguen. Los malparidos me persiguen. Entonces me tocó pararme y salir corriendo. Afortunadamente, llegué a una zona donde había un carro detenido y dos mujeres que estaban sacando a sus perros. Yo llego ahí gritando: ‘¡Ayuda, ayuda, auxilio! ¡Me están robando! ¡Me robaron, me robaron mi scooter!’. Y los manes se van con el otro cómplice, el que yo había atropellado. Ahí me ayudan, intentan tranquilizarme, porque con la adrenalina no sentía nada. Luego fue que empecé a sentir dolor en el hombro, en la pierna, en la rodilla, porque, pues, me había pegado un costalazo contra el suelo”, explicó la víctima.

Tras recibir ayuda y calmarse, Camilo regresó a su casa y denunció el robo, ya que la scooter la había adquirido apenas un mes antes y contaba con seguro, por lo que inició el trámite correspondiente con la póliza.

Robo violento en ciclorruta de
Robo violento en ciclorruta de Bogotá deja alerta por inseguridad - crédito @camilo_dez/Tiktok

A pesar de no haber perdido más pertenencias, el impacto emocional fue considerable. “Qué mierda, o sea, que te roben las cosas por las que tanto trabajas y sueñas. Y qué cobarde la gente que te roba, entre tres... de verdad, me parece ridículo, cobarde, absurdo”, expresó Camilo.

En su testimonio, subrayó la importancia de alertar a otros usuarios sobre los riesgos en la zona. “Un mensajito aquí para la gente que anda en scooter y en cicla: ya saben, la 116 en la noche, vetada. 100% mejor ir por la calle de los carros, la verdad”, recomendó.

Además, hizo un llamado a la ciudadanía para no dejar pasar este tipo de hechos y acudir a las autoridades. “Denunciar, siempre denunciar”, insistió.