Abogado del colegio de Valeria Afanador afirmó que nunca se alteraron evidencias en la investigación de la desaparición de Valeria Afanador: “Nunca alteró, ni esconde evidencia”

El jurista confirmó que el cuidado de Valeria estaba a cargo de dos profesores del plantel, y tan pronto notaron que la niña no se encontraba en las instalaciones, activaron el respectivo proceso

Guardar
La niña, de 10 años,
La niña, de 10 años, fue hallada sin vida dieciocho días después, a trescientos metros del colegio, cerca del río Frío en Cajicá - crédito Colegio Gimnasio Campestre Los Laureles y X

La investigación sobre la muerte de la menor de 10 años, Valeria Afanador, continúa y varias de las partes involucradas se han pronunciado en el intento por aclarar toda la confusión que se dio ante la respuesta de las directivas del colegio Gimnasio Campestre Los Laureles de Cajicá, declaraciones extraoficiales de la rectora del colegio sobre un presunto trabajador que podría estar involucrado en la desaparición de la menor y los chats del día del hecho entre docentes y directivos.

La niña, de 10 años, fue hallada sin vida dieciocho días después, a trescientos metros del colegio, cerca del río Frío en Cajicá, un desenlace que ha provocado un intenso debate nacional sobre la seguridad escolar y la respuesta de las autoridades.

Francisco Bernate, abogado de la institución educativa, conversó con La FM y defendió la veracidad de la información suministrada por su defensa ante las autoridades correspondientes los 18 días de búsqueda, atendiendo a las acusaciones de la defensa de la familia de la menor, en la que afirmaron que algunos procedimientos fueron alterados por el colegio.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel

“Se reafirma que el colegio nunca alteró ni esconde evidencia. No apreciamos una orden de que borren o tapen algo. Eso es lo positivo de que esto se conozca y que salga a la luz pública, porque se ha acusado al colegio de alterar evidencia”, comentó Bernate.

De igual manera, confirmó que el cuidado de Valeria estaba a cargo de dos profesores del plantel, y tan pronto confirmaron que la niña no se encontraba en las instalaciones, activaron el respectivo proceso: “Como definitivamente no dieron con el paradero de la menor, dentro de lo que se establece en los protocolos, se dio aviso a las diferentes autoridades“, agregó.

Chats profesores de Valeria Afanador
Chats profesores de Valeria Afanador - crédito redes sociales/X

Revelaron conversaciones de los docentes del colegio de Valeria Afanador

La difusión de los mensajes internos entre los docentes del Gimnasio Campestre Los Laureles Bilingüe ha puesto en evidencia la angustia y el desconcierto que se apoderaron del personal durante las primeras horas tras la desaparición de Valeria Afanador.

El acceso a los chats internos, revelado por El Tiempo, muestra que la preocupación de los profesores surgió desde el primer momento en que notaron la ausencia de Valeria. A las 11:15 a. m., una docente utilizó la aplicación interna Slack para alertar: “¿Alguien ha visto a Valeria Afanador? Los niños están corriendo buscándola y dicen que no aparece por ningún lado”.

La menor de 10 años
La menor de 10 años fue encontrada sin vida en la tarde del 29 de agosto - crédito Gimnasio Campestre Los Laureles / Gobernación de Cundinamarca

Otros mensajes reflejaron la incertidumbre sobre su paradero: “Tal vez esté cerca del aula de música o en el salón de deportes donde suele estar” y “No está en el edificio”. Estas comunicaciones evidencian que, aunque los docentes intentaron localizarla, la búsqueda interna no logró resultados, lo que la familia interpreta como un indicio de negligencia.

La reconstrucción de los hechos, basada en la investigación y en el acta oficial, detalla que Valeria llegó al colegio a las 7:15 a. m., acompañada por familiares. Participó en la clase de matemáticas entre las 7:30 a. m. y las 8:50 a. m., donde la profesora recordó que la niña intentó salir del aula, pero no se le permitió.

Posteriormente, asistió a la clase de Communicative English Skills, donde se dedicó a dibujar mientras se explicaban las evaluaciones. Al sonar el timbre del descanso, corrió hacia el salón de deportes para buscar un balón, una conducta que los docentes consideraban habitual en ella.

El cuerpo de Valeria Afanador
El cuerpo de Valeria Afanador fue hallado en una zona contigua al río Frío - crédito Google Maps

El profesor de educación física confirmó que logró sacar la pelota antes de que él cerrara el salón. Mientras la directora de grupo acompañaba a otros estudiantes a tomar onces y se dirigía a su puesto de vigilancia, Valeria debía ingresar a la clase de música a las 10:35 a. m. Sin embargo, no se presentó. El profesor de música organizó grupos de estudiantes para buscarla, pero no obtuvieron resultados y la clase continuó, mientras la inquietud aumentaba entre el personal.

La revisión de las cámaras de seguridad, según el acta oficial, permitió reconstruir los últimos movimientos de la menor. Se la observó en la puerta del salón 2A, colocándose la capota y desplazándose por distintas áreas: la tienda escolar, el parqueadero de docentes, el cuarto de deportes y las canchas de fútbol y vóley. El registro visual se interrumpió a las 10: 23 a. m., momento en que se pierde su rastro.

Alrededor del mediodía, el colegio activó las alarmas de evacuación y reunió a estudiantes y docentes en la cancha verde, con la esperanza de que la niña apareciera. Al confirmarse su ausencia, se notificó a los bomberos, la Policía y la familia, lo que dio inicio a una búsqueda que se extendió durante dieciocho días.