Carolina Sabino reveló la clave para mantener vivo su amor a distancia con el empresario Mario Bert: vive en Ecuador

Tras una década de haberse radicado en Ecuador, donde la actriz Carolina Sabino estableció su familiar y tuvo a su Benjamín, su hijo menor, la también cantante regresó al país y reveló a Infobae Colombia que se quedará un buen tiempo.

Si bien fue el reality de cocina Masterchef Celebrity 2025 el que la trajo de vuelta a su tierra, la artista aceptó hacer parte de un nuevo proyecto televisivo y uno teatral que la mantendrán por una larga temporada más en la capital colombiana.

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Inmaduros no solo marca el retorno de Sabino a las tablas colombianas, sino que también la reúne con un elenco destacado bajo la dirección de Fernando Arévalo. La actriz comparte escenario con figuras como Rodrigo Candamil, Rafael Zea, Jennifer Leibovici, Paula Estrada y Andrea Guzmán, en una historia que explora la búsqueda personal y el sentido del éxito en una sociedad enfocada en las apariencias.

Sabino describió la obra como “exquisita desde todo punto de vista”, resaltando la calidad del equipo y la profundidad del mensaje, que invita a disfrutar la vida desde el interior y no solo desde lo que se muestra al exterior.

Además de su participación en el teatro, Sabino continúa en competencia en el programa de cocina MasterChef Celebrity y está grabando la telenovela Las de siempre. En conversación con Infobae Colombia, la artista expresó su entusiasmo por esta etapa de su carrera, en la que confluyen proyectos televisivos y teatrales. “Es un regreso después de diez años de no estar en el país, de ir y volver”, afirmó, destacando la apertura de nuevas oportunidades profesionales y el cariño del público colombiano, al que considera leal y amoroso.

La vida de Sabino transcurre entre Ecuador y Colombia, una dinámica que adoptó al priorizar su familia y su hogar. La actriz explicó que su residencia en Ecuador responde a la búsqueda de un entorno apacible para sus hijos y su esposo Mario, aunque los compromisos laborales la llevan a viajar con frecuencia a Colombia.

“Siempre vuelvo, siempre vuelvo”, aseguró, dejando abierta la posibilidad de permanecer una temporada más larga en el país si las circunstancias familiares lo permiten. Esta movilidad constante ha requerido de una organización cuidadosa para mantener la cercanía con sus seres queridos, quienes la acompañan por temporadas o la esperan en casa, según las necesidades de cada momento.

El apoyo mutuo con su esposo ha sido fundamental para sostener la relación a distancia. Sabino relató que tanto ella como Mario comparten una visión clara sobre la consolidación de la familia y se respaldan en todos sus proyectos.

“Él nunca me ha dicho no y yo a él tampoco. Estamos ahí y buscamos el tiempo. Entendemos que siempre es calidad de tiempo para nosotros”, explicó. Sus hijos, Tomás y Benjamín, también se adaptan a este ritmo: el mayor, Tomás, ya trabaja y reside en Ecuador, mientras que Benjamín la acompaña en sus viajes. Así, la familia ha encontrado formas de mantener viva la conexión y el afecto, pese a la distancia física.

En cuanto a su visión sobre el matrimonio y la crianza, Sabino subrayó la importancia del equilibrio y la comprensión mutua. Reconoció que la convivencia implica retos y que tanto ella como sus hijos y esposo han aprendido a manejar las diferencias y las particularidades de cada uno.

“Vivo con dos hijos y un marido. Ahí hay los temitas, pero ellos también, los tres saben contener las pataletas femeninas”, comentó con humor, aludiendo a la necesidad de balancear las inmadureces y las exigencias propias de la vida familiar.

La actriz también reflexionó sobre la madurez y el conflicto, tanto en la vida personal como en el entorno profesional. Para Sabino, la madurez femenina suele desarrollarse antes debido a la crianza y la responsabilidad, aunque considera valioso conservar una cuota de inocencia y espontaneidad.

“Tengo cuarenta y ocho años y sí, hago unas niñadas a veces y me encanta”, confesó, defendiendo la importancia de mantener la frescura y la capacidad de disfrutar la vida. En el contexto de su participación en MasterChef, valoró la posibilidad de competir sin recurrir al conflicto, destacando que la temporada actual del programa muestra que es posible enfrentarse en buena lid y aprender de la experiencia sin caer en enredos degradantes.

En la telenovela Las de siempre, producción en la que reencuentras viejas figuras de la pantalla chica, Sabino interpreta a Xiomara, un personaje que, según explicó a Infobae Colombia, atraviesa profundas contradicciones y refleja las luchas internas de quienes enfrentan diversas formas de adicción. La actriz espera que este papel invite al público a mirar más allá de los prejuicios y a comprender la complejidad de las personas que atraviesan situaciones difíciles, promoviendo la empatía y el entendimiento en lugar del juicio.

A través de Xiomara, Sabino busca que la audiencia reconozca la humanidad de quienes se ven envueltos en conflictos personales, recordando que detrás de cada historia existen realidades que merecen ser comprendidas con compasión.