Aumentan delitos nocturnos tras decreto de ‘Rumba Segura en Bogotá’: “Los datos evidencian que esta propuesta sigue siendo insuficiente”

Las cifras oficiales muestran un incremento en hurtos, homicidios y delitos sexuales durante la madrugada, mientras expertos y autoridades discuten si la regulación realmente protege a la población y fomenta la seguridad

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El concejal Julián Sastoque advierte
El concejal Julián Sastoque advierte que el Decreto de Rumba Segura podría aumentar la exposición a delitos en Bogotá - crédito Alcaldía Mayor de Bogotá

El concejal Julián Sastoque denunció, ante el Cabildo distrital, que el decreto de Rumba Segura - 293 de 2025 - del alcalde Carlos Fernando Galán, dejó a la ciudadanía más expuesta a delitos, según cifras expuestas en un comunicado público.

Sastoque afirmó: “El alcalde Galán presentó su Decreto de Rumba Segura como una medida para reducir los índices de criminalidad que involucran establecimientos nocturnos y el consumo de licor, y garantizar el derecho al trabajo de los comerciantes formales, pero los datos evidencian que esta propuesta sigue siendo insuficiente“.

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De acuerdo con estadísticas citadas por Sastoque, el 36% de los hurtos a personas en Bogotá ocurren entre las 12:00 a. m. y las 6:00 a. m. Además, el 32% de los homicidios y el 37% de los delitos sexuales se registran también durante este horario nocturno. El concejal advirtió que “es justamente en la rumba y durante la madrugada cuando se presentan las mayores vulneraciones a la ciudadanía”, por lo que considera que extender la operación de los establecimientos podría aumentar los riesgos para la población.

El 36% de los hurtos
El 36% de los hurtos y el 32% de los homicidios en Bogotá ocurren entre la medianoche y las 6:00 a. m., según cifras oficiales - crédito Julián Sastoque

El decreto, presentado por Galán, busca regular el horario de bares, discotecas y otros establecimientos nocturnos, ampliando la atención hasta las 5:00 a. m. en algunas zonas, con el propósito declarado de reducir la criminalidad y fortalecer la economía nocturna formal. Sastoque argumentó que las estadísticas oficiales muestran que la violencia y los delitos asociados con el consumo de licor y el uso del espacio público “no se resuelven simplemente ‘formalizando la rumba’”.

El cabildante también indicó que, si bien el decreto compromete a los establecimientos en zonas priorizadas a cumplir normas de seguridad y convivencia, “no existen suficientes controles por parte de las autoridades y la capacidad de vigilancia no ha aumentado proporcionalmente”.

El análisis presentado por Sastoque llama la atención sobre una tendencia en el incremento de delitos nocturnos vinculados a la operación de bares, al tiempo que pone en duda la eficacia de una estrategia centrada en la ampliación de horarios y la formalización, sin mayores garantías de control y prevención.

Sastoque expresó su esperanza en que la administración opte por dejar atrás el enfoque del “garrote” y comprenda que la “zanahoria” puede generar mejores resultados, destacando el trabajo realizado desde su curul en la defensa de la seguridad ciudadana y la economía nocturna.

Sastoque cuestionó la eficacia de
Sastoque cuestionó la eficacia de la ampliación de horarios sin mayores controles de seguridad y vigilancia - crédito Julián Sastoque

Esta posición busca integrar a actores públicos y privados para crear una estrategia que reconozca y promueva las iniciativas dedicadas al bienestar tanto de quienes disfrutan de la vida nocturna como de quienes dependen económicamente de ella en Bogotá.

Aunque esta economía contribuye con el 3,1 % del Producto Interno Bruto de la ciudad, cifra equivalente a $7,6 billones, la administración Galán persiste en la aplicación de restricciones en vez de establecer estrategias conjuntas con los empresarios del sector.

Qué es el Decreto 293 de 2025

El Decreto 293 de 2025, expedido por la Alcaldía Mayor de Bogotá, que entró en vigencia el 1 de julio de 2025, tiene como fin mejorar la seguridad ciudadana, fomentar la convivencia en el espacio público y prevenir comportamientos que afectan la tranquilidad en la capital colombiana. Según la normativa, se regulan los horarios para actividades económicas relacionadas con el expendio y consumo de bebidas alcohólicas y embriagantes.

El decreto regula la venta
El decreto regula la venta y consumo de alcohol, restringe su consumo cerca de colegios y exige medidas de insonorización - crédito Colprensa

El decreto estipula que las tiendas de barrio, comercios, supermercados, licoreras y depósitos podrán vender alcohol desde las 10:00 a. m. hasta las 11:59 p. m. En el caso de bares y discotecas, el horario autorizado se extiende desde las 10:00 a. m. hasta las 3:00 a. m. del día siguiente. Además, se contempla la implementación de Zonas Focalizadas de Expendio y Consumo Extendido, áreas específicas que podrán funcionar hasta las 5:00 a. m., las cuales serán definidas en un plazo máximo de 90 días con base en criterios de seguridad y ordenamiento territorial.

Adicionalmente, se restringe el consumo de alcohol en un radio de 200 metros alrededor de instituciones educativas y se permite la venta a domicilio bajo la condición de que no se entregue a menores ni se consuma en espacios públicos. Asimismo, los establecimientos tendrán la obligación de adoptar controles al ruido mediante medidas de insonorización para disminuir la contaminación acústica y proteger la tranquilidad de las comunidades.

La Secretaría de Gobierno afirma
La Secretaría de Gobierno afirma que la medida busca reducir delitos y mejorar la convivencia en la capital - crédito Secretaría de Gobierno

La Secretaría Distrital de Gobierno informó que la medida responde a datos que indican que más del 30% de los delitos violentos y alteraciones a la convivencia se presentan entre las 12:00 a. m. y las 6:00 a. m., especialmente en zonas donde hay alta concentración de bares y discotecas. En el último año y medio, el ruido, las riñas y el consumo problemático de alcohol en la vía pública han sido las principales causas de llamadas al 123 y de quejas ciudadanas.

“El decreto no constituye una acción contra el comercio, sino una decisión responsable para proteger la vida, la seguridad y la tranquilidad de la ciudad. Bogotá merece espacios seguros para disfrutar, pero también requiere normas claras para garantizar la convivencia”, afirmó Gustavo Quintero Ardila, secretario Distrital de Gobierno.