
El presidente Gustavo Petro calificó de “cinismo extremo” las críticas de Wilson Ruiz Orejuela, exministro de Justicia durante el gobierno de Iván Duque, y defendió la gestión de su administración frente a señalamientos de desgobierno.
En su publicación, el mandatario aseguró: “Es de un cinismo extremo ver estos integrantes del gobierno que dejó miles de jóvenes presos y decenas asesinados, decir que mi gobierno es un desgobierno”.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel
Agregó: “Desgobierno es aumentar la pobreza, la desigualdad y la mortalidad de los niños y niñas. Desgobierno es matar desde el estado a su propia población”.
La respuesta de Petro se produjo tras un mensaje de Ruiz Orejuela criticando la permanencia de Alfredo Saade como jefe de Despacho presidencial: “Sabían que Alfredo Saade tenía los días contados y no duraría más en su cargo. Su incompetencia y las denuncias que interpusimos ante la Fiscalía y la Procuraduría lo tenían con la salida cantada”.
El exministro añadió: “El Gobierno, consciente del problema, prefirió mover fichas. Así es este desgobierno corrupto, le teme a las instituciones independientes. Una vergüenza”.

Hace unas semanas, Ruiz presentó una denuncia penal contra Saade por promover la reelección presidencial, figura expresamente prohibida en la Constitución desde 2015.
En ese momento sostuvo: “Este episodio es parte de una peligrosa tendencia a utilizar el poder institucional para deslizar ideas de perpetuación en el poder. Frente a ello, la ley debe ser la muralla que impida cualquier desviación autoritaria”.
Y agregó: “El mandato del actual presidente termina en 2026, así lo establece la Constitución, y así se hará cumplir. No es un asunto de opinión: es un asunto de legalidad y de respeto a las reglas del juego democrático”.
La denuncia, formalizada el 22 de julio ante la Fiscalía General de la Nación, solicita investigar a Saade por presuntos delitos de prevaricato por acción, perturbación al certamen democrático y constreñimiento ilegal.
Ruiz argumentó que las declaraciones de Saade desconocen el proceso legal vigente e intentan introducir la figura de la reelección, constituyendo una infracción directa a la neutralidad de los servidores públicos.

El episodio que detonó la denuncia ocurrió el 20 de julio, durante la instalación del nuevo periodo legislativo en el Congreso, cuando Saade gritó repetidamente:“¡Reelección! ¡Reelección! ¡Reelección!”
El hecho quedó registrado en video oficial y fue incorporado como prueba por Ruiz, junto a testimonios de congresistas como Lina María Garrido, Paloma Valencia, Daniel Carvalho y Efraín Cepeda.
La controversia en torno a Saade no se limita a su llamado a la reelección. El funcionario ha insistido en prolongar el mandato de Petro y ha cuestionado lo que denomina el “periodismo arrodillado”, generando cuestionamientos de sectores políticos que advierten sobre intentos de censura y consolidación de una narrativa oficialista.
Tras apenas dos meses en el cargo, Saade fue removido de la jefatura de Despacho y asignado como embajador en Brasil, tras protagonizar varias polémicas, incluido el convenio de fabricación de pasaportes con Portugal.
“Había cumplido con ‘éxito rotundo’ sus tareas en la Casa de Nariño”, proclamó Saade en su cuenta de X al anunciar su designación como embajador.

Sin embargo, la celebración pública contrastó con el trasfondo de su salida, marcada por una investigación disciplinaria que, según informó Ricardo Ospina, director del servicio informativo de Blu Radio, ya tenía consecuencias inminentes.
De acuerdo con el medio citado, la Procuraduría General de la Nación había preparado la suspensión provisional de Saade por presuntas irregularidades en el proceso de contratación para la expedición de pasaportes, y solo faltaba una firma para que la medida se hiciera efectiva.
La decisión de trasladarlo a la embajada buscó, según análisis de medios, anticiparse a la suspensión, evitando que Saade permaneciera fuera de funciones mientras se resolvía la investigación.
El traslado se formalizó en reemplazo de Guillermo Rivera, quien había renunciado el 31 de julio para dedicarse a sus aspiraciones electorales.
El cambio, sin embargo, generó críticas de diversos sectores, que lo interpretaron como una maniobra para esquivar la sanción disciplinaria.
No obstante, la Procuraduría mantiene abiertos los procesos contra el nuevo embajador, y de confirmarse irregularidades, Saade deberá responder ante las autoridades, sin que su cargo diplomático lo exima de las investigaciones en curso.
Más Noticias
Seis aplicaciones que debe desinstalar de su celular para proteger su cuenta bancaria de un ciberataque
Algunas VPN que aparentan brindar mayor privacidad en realidad facilitan el acceso de los atacantes a cuentas bancarias y datos personales almacenados en los teléfonos

El tesoro de Pablo Escobar: la polémica historia de los 600 millones de dólares hallados por un agricultor
Un relato que mezcla realidad y mito resurgió tras una década, cuando medios y redes sociales recordaron el supuesto hallazgo de una suma millonaria en una finca colombiana

Jorge Bedoya a MinTrabajo: “parece más un activista político” en debate por empresarios y Gobierno
El presidente de la SAC respondió a Antonio Sanguino tras sus declaraciones sobre gremios como opositores al Ejecutivo

Andeg tras salida de Yanod Márquez: “intervención de Air-e no tenía una estructura clara”
El gremio de generadoras pidió que el nuevo superintendente asegure recursos para cubrir millonarias deudas de Air-e

Benedetti lo aclara: “Petro no ha llamado a ningún embajador” sobre caso González en Nicaragua
El ministro del Interior negó que el Gobierno buscara proteger a Carlos Ramón González en Nicaragua y defendió a Petro
