Colombia es el país latinoamericano con mayor número de candidatos asesinados en su historia: este es el ranking

Gaitán, Galán, Jaramillo, Pizarro, Gómez y Uribe Turbay son recordados como víctimas de la violencia política en Colombia

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Colombia ha visto morir 5
Colombia ha visto morir 5 candidatos presidenciales - crédito Reuters

Colombia encabeza una estadística dolorosa en América Latina: es la nación que ha registrado más asesinatos de candidatos presidenciales a lo largo de su historia contemporánea.

De acuerdo con los registros históricos y políticos, el país ha visto truncadas las aspiraciones de ocho figuras presidenciales en la región, cinco de ellas en territorio colombiano, lo que la coloca muy por encima de otros países latinoamericanos que también han sufrido este tipo de hechos.

El primer caso documentado se remonta a 1948, cuando Jorge Eliécer Gaitán, líder liberal y principal favorito para las elecciones presidenciales, fue asesinado en Bogotá, un hecho que marcó el inicio del periodo conocido como El Bogotazo y que desató una ola de violencia política sin precedentes.

Décadas más tarde, en 1987, el dirigente de la Unión PatrióticaJaime Pardo Leal fue asesinado en Cundinamarca, en medio de un contexto de creciente persecución contra integrantes de ese movimiento político.

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El final de los años ochenta y el inicio de los noventa resultaron particularmente trágicos para la política colombiana. En 1989 fue asesinado Luis Carlos Galán Sarmiento, candidato del Nuevo Liberalismo, mientras encabezaba un acto público en Soacha.

Apenas unos meses después, en 1990, Carlos Pizarro Leongómez, comandante desmovilizado del M-19 y candidato presidencial, fue acribillado dentro de un avión en pleno vuelo.

Ese mismo año, Bernardo Jaramillo Ossa, sucesor de Pardo Leal en la Unión Patriótica y aspirante presidencial, fue asesinado en el aeropuerto El Dorado de Bogotá.

En el resto de América Latina, los casos de magnicidios de aspirantes presidenciales han sido mucho menos frecuentes.

México sufrió uno en 1994, cuando Luis Donaldo Colosio, candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fue asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana, en medio de su campaña electoral.

Ecuador, por su parte, enfrentó una tragedia similar en 2023, con el asesinato de Fernando Villavicencio, periodista y aspirante presidencial, a pocos días de las elecciones generales.

El caso más reciente volvió a tener a Colombia como escenario. En 2025, el senador Miguel Uribe Turbay, del partido Centro Democrático y precandidato presidencial, falleció como consecuencia de un atentado ocurrido en Bogotá dos meses antes. Su muerte reavivó el debate sobre la seguridad de los líderes políticos y la persistencia de la violencia contra figuras públicas en el país.

En total, Colombia suma cinco asesinatos de aspirantes a la Presidencia en poco más de siete décadas, frente a un caso en México y otro en Ecuador. Expertos en historia política coinciden en que este patrón de violencia refleja no solo los riesgos asociados a la disputa por el poder en el país, sino también las profundas tensiones sociales, económicas y armadas que han marcado su vida institucional.